El potencial de reinventar tradiciones
Pablo V¨¢zquez, emprendedor dentro del sector del turismo, ha sabido conjugar lo local con la innovaci¨®n para atraer al p¨²blico extranjero
Con una licenciatura como ingeniero de Montes por la Universidad de C¨®rdoba en el bolsillo, experiencia en el sector privado y tambi¨¦n en el p¨²blico en la lucha contra los incendios, Pablo V¨¢zquez no terminaba de encontrar su sitio. A?adi¨® a su formaci¨®n un m¨¢ster en energ¨ªas renovables y prob¨® suerte en Alemania en plena crisis. Lo que no sab¨ªa que apenas unos meses despu¨¦s de su viaje fundar¨ªa una empresa de importaci¨®n de productos andaluces al pa¨ªs germano. Arranc¨® con aceite de Jabalquinto (Ja¨¦n) y poco a poco fue ampliando el cat¨¢logo. Recuerda especialmente cuando dio a probar a sus clientes una torta de In¨¦s Rosales con queso payoyo de C¨¢diz y vino de la bodega ronde?a Descalzos Viejos. ¡°Les alucinaba¡±, relata. Comprendi¨® entonces el poder de la gastronom¨ªa andaluza.
En 2013 volvi¨® a M¨¢laga. Su experiencia le sirvi¨® para sumarse a Spain Food Sherpas, una empresa que entonces daba sus primeros pasos. Mezclaba la gastronom¨ªa con el turismo a partir de una idea sencilla: ofrecer rutas gastron¨®micas aderezadas con aspectos hist¨®ricos y culturales. La idea era buena, pero faltaban clientes. Y sus conocimientos de marketing online le ayud¨® a encontrarlos en internet. Justo donde hoy reservan sus viajes seis de cada diez viajeros, seg¨²n los informes de Turismo Andaluz. Los atrajo con el concepto de sherpa gastron¨®mico. ¡°Son personas que acompa?an al turista para contar la historia de lo que hay detr¨¢s de la gastronom¨ªa: desde d¨®nde se cultivan los productos a qu¨¦ tradiciones rodean a ciertos platos¡±, explica V¨¢zquez.
Las rutas comenzaron en M¨¢laga, luego se ampliaron a Granada y en marzo llegan a Sevilla. El siguiente objetivo es C¨®rdoba. Para emprendedores como ¨¦l, la regi¨®n tiene un potencial enorme. Las cifras le avalan: m¨¢s de 30,6 millones de personas visitaron Andaluc¨ªa en 2018 generando un negocio superior a 21.000 millones de euros, seg¨²n datos de la Junta de Andaluc¨ªa. El turismo aporta el 13% del PIB andaluz.
El 40% de los turistas que llegan a Andaluc¨ªa son extranjeros. Para Spain Food Sherpas el porcentaje crece hasta el 99%. Sus clientes proceden de Reino Unido, Alemania, los pa¨ªses escandinavos y Estados Unidos. Se interesan por un punto de vista m¨¢s local, experiencias en primera persona alejados del turismo de masas. Por eso la firma tiene como eje principal la cercan¨ªa para que quienes acuden a sus rutas tengan la sensaci¨®n de ser un andaluz m¨¢s, aunque sea por unas horas. Ah¨ª el papel de los sherpas gastron¨®micos es fundamental. Son personas ligadas al territorio o con un gran bagaje en ellos. Y llevan a los grupos -que nunca superan las 10 personas- a lugares reales. ¡°A sitios donde habitualmente vamos nosotros con familia o amigos¡±, a?ade el empresario, que dice que ¡°lo local es el futuro del turismo¡±.
Contra el turismo agresivo
El objetivo final es convertir al turista en viajero, f¨®rmula que abander¨® AirBnB para distanciarse de los hoteles. Sin embargo, el incre¨ªble ¨¦xito de la plataforma nacida en San Francisco tambi¨¦n ha tra¨ªdo consecuencias negativas como la subida de precios del alquiler y una escasez de vivienda. Por eso V¨¢zquez cree que hay que defender a la ciudadan¨ªa del turismo agresivo. ¡°M¨¢laga, por ejemplo, debe crecer hacia los barrios, porque el centro ya est¨¢ saturado¡±, explica el m¨¢ximo responsable de Spain Food Sherpas, que por ello pronto tambi¨¦n comenzar¨¢ a oferta una ruta por el barrio de Pedregalejo, barriada al este de M¨¢laga.
¡°Las personas que residen en una ciudad son tan importantes como quienes llegan de visita¡±, insiste quien cree necesaria una oferta complementaria al sol y la playa para acabar con uno de los mayores problemas del sector tur¨ªstico: la estacionalidad. Reto que, seg¨²n V¨¢zquez, las peque?as empresas est¨¢n ayudando a superar gracias a su versatilidad y la propuesta de nuevos escenarios. Y si en verano es muy dif¨ªcil competir con la costa por factores como el clima, durante el resto del a?o se abren muchas posibilidades. ¡°Sobre todo el interior¡±, asegura. Por ello, siempre busca asociarse a otras iniciativas empresariales para expandir el negocio. As¨ª no s¨®lo se comparten riesgos, tambi¨¦n se generan nuevas ideas.
La explotaci¨®n del Caminito del Rey como nuevo recurso es un buen ejemplo de zonas donde hace unos a?os apenas hab¨ªa turismo. Ahora cuenta con m¨¢s de 850 empresas que pueden vender las 1.100 entradas de aforo m¨¢ximo que tiene este recorrido de v¨¦rtigo por el Desfiladero de los Gaitanes. En sus tres primeros a?os de funcionamiento -en abril cumplir¨¢ el cuarto- hab¨ªa superado el mill¨®n de visitas y los 100 millones de impacto econ¨®mico. M¨¢s all¨¢, lugares como La Alpujarra de Granada, El Torcal de Antequera, la Sierra de Huelva o actividades relacionadas con el aceite, la vendimia o el vino ¡°deben formar parte¡± de un cat¨¢logo que d¨¦ al sector tur¨ªstico una mayor estabilidad a lo largo de todo el a?o. Y, de paso, ayude a superar otro grave problema andaluz: la despoblaci¨®n. ¡°Las peque?as empresas fijan a las personas en su territorio¡±, opina V¨¢zquez.
La gastronom¨ªa es otra de las claves para conseguir la soluci¨®n a ese desaf¨ªo. Tanto quienes la promueven en peque?os negocios rurales como desde los 18 restaurantes con estrellas Michel¨ªn de la comunidad. Los grandes chefs est¨¢n poniendo en valor productos que incluso estaban en v¨ªas de extinci¨®n. La zanahoria mor¨¢ de Cuevas Bajas es uno de ellos. Ha pasado de ser alimento para el ganado a tener una gran demanda gracias no s¨®lo a los esfuerzos de los agricultores, tambi¨¦n a que cocineros como Dani Garc¨ªa la usaron para sus men¨²s. Ahora miles de personas acuden al pueblo a conocer el producto. ¡°As¨ª se consigue cerrar el c¨ªrculo: tanto turistas como agricultores y empresarios se ven beneficiados¡±, concluye V¨¢zquez.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.