25 mujeres con ¡°af¨¢n de ser protagonistas y de cre¨¦rselo¡±
Carmena invita a comer a un grupo de mujeres empresarias en la v¨ªspera del 8 de marzo
En el edificio acristalado de los jardines de Cecilio Rodr¨ªguez este jueves a medio d¨ªa hab¨ªa servilletas moradas, flores blancas y rosas y alrededor de la mesa, un grupo de 25 se?oras. Poderosas unas, empoderadas todas. Carmena ha convertido en tradici¨®n compartir con mujeres una comida la v¨ªspera del 8 de marzo. Hace dos a?os, invit¨® a embajadoras y el a?o pasado, a directoras de institutos y colegios. Este a?o ha compartido mesa con empresarias. Desde nombres conocidos como la exministra Elena Salgado, que hoy preside la Asociaci¨®n Espa?ola de Empresas de Consultor¨ªa, pasando por la presidenta de Microsoft Espa?a, Pilar L¨®pez, hasta la due?a de una empresa familiar de poller¨ªa y una de las lideresas de Villaverde, un grupo de mujeres jubiladas de ese distrito. Todas han coincidido, seg¨²n la alcadesa, en "el af¨¢n de que las mujeres tenemos que ser protagonistas y nos lo tenemos que creer y tomar ese papel".
"Yo he sido de todo", cont¨® la alcaldesa. Y entre las muchas funciones que ha desempe?ado, ha estado la de empresaria. La primera vez, record¨®, fue cuando siendo joven se junt¨® con unos compa?eros abogados y decidieron abrir un despacho en la calle Atocha. Aquella aventura tuvo un momento "dram¨¢tico" cuando cinco perdieron la vida en un atentado de la ultraderecha. Tambi¨¦n, cuando dej¨® la judicatura, se march¨® con una empresa social, Zapatelas, dedicada a la venta de ropa de beb¨¦ fabricada por presas. "Tengo una gran admiraci¨®n por las empresas, por la libertad, la valent¨ªa y la originalidad", dijo Carmena a las comensales.
Por la mesa han desfilado platos de salmorejo, de salteado de verduras de temporada con romescu, corvina con vinagreta de tomate e historias que tienen que ver con el techo de cristal, con la brecha de g¨¦nero, con la necesidad de referentes, con el sobresfuerzo que tienen que hacer las mujeres y con la discriminaci¨®n por el hecho de serlo. Salgado, que mira atr¨¢s y ve "el progreso enorme que se ha conseguido", ha recordado c¨®mo cuando empez¨® a estudiar Ingenier¨ªa Industrial era "la ¨²nica chica". Los profesores de la que despu¨¦s fue ministra de Econom¨ªa, seg¨²n la presentadora de eventos Helena D¨ªez-Fuentes, le preguntaban si entend¨ªa la materia.
D¨ªez-Fuentes, tambi¨¦n periodista y abogada, transmite como cronista improvisada de la comida que "muchas contaron que no notan la desigualdad y otras dec¨ªan que quedaba mucho por hacer". "Sobre todo yo he sacado varias conclusiones: la primera, que las mujeres tenemos que cre¨¦rnoslo m¨¢s; muchas no nos lo creemos". La misma conclusi¨®n que sac¨® la alcaldesa.
La presidenta en Espa?a de unas de las grandes tecnol¨®gicas ha contado el reto que supone que en su sector la presencia de mujeres "no llega al 20%". "He compartido la presi¨®n social que tienen las ni?as a la hora de estudiar matem¨¢ticas o ciencia" y que las que terminan la carrera, "en un porcentaje mayoritario no se dedica a la tecnolog¨ªa". "Eso en nuestra empresa nos obliga a mostrar referentes", ha manifestado L¨®pez.
En la comida han coincidido Mercedes Wullich, fundadora del Ranking Top 100 Mujeres L¨ªderes en Espa?a, y Carmen Le¨®n, una de las jubiladas que forma parte del grupo de siete lideresas de Villaverde. La primera define a las mujeres l¨ªderes como personas que "han trabajado much¨ªsimo, generalmente el doble de los hombres; pero hay un elemento fundamental: la determinaci¨®n y la constancia para seguir y conseguir lo que se han propuesto". "Como mujer mayor, la universidad m¨ªa ha sido la de la vida; pero al estar en este grupo [de las lideresas], hemos ido aprendiendo y nos hemos ido soltando", ha contado Le¨®n, que ha introducido en la conversaci¨®n la importancia de la educaci¨®n sin sesgo de g¨¦nero para empoderar a las mujeres.
"Contaba Ana S¨¢enz de Miera que tiene cuatro chicas -y es una chica joven de 38 a?os, que es la vicepresidenta de Ashoka mundial-, c¨®mo esta ma?ana hablando con su hijas les dec¨ªa que hab¨ªa una brecha salarial entre mujeres y hombres y a ellas eso les parec¨ªa m¨¢s incre¨ªble que si hubiera zombies y marcianos. 'C¨®mo es posible, si somos m¨¢s inteligentes, que cobremos menos", contaba que dec¨ªan las ni?as, seg¨²n D¨ªez-Fuentes, que ha tomado nota de las intervenciones.?
Las mujeres han salido satisfechas de la comida. "Todas vemos los retos, y ha habido afirmaciones rotundas, como que vivimos en el mejor momento de la historia", aseguraba L¨®pez. "Siempre hay peligro [de retroceder] y el avance es dif¨ªcil, pero en la comida hab¨ªa optimismo".
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