Alcaldes que llevan 40 a?os y quieren m¨¢s

El jugador del cl¨¢sico videojuego SimCity debe construir su propia ciudad seleccionando sobre un solar vac¨ªo d¨®nde levantar escuelas, hospitales y carreteras. En la vida real, Luis Partida, de 72 a?os, ha hecho algo parecido en Villanueva de la Ca?ada a lo largo de cuatro d¨¦cadas de mandato como alcalde.

Cuando gan¨® las primeras elecciones de la democracia en Espa?a, el 3 de abril de 1979, este pueblo ubicado 30 kil¨®metros al oeste de la ciudad de Madrid no ten¨ªa ¡°nada de nada¡±, recuerda en su despacho. A su alrededor tiene un municipio donde ha inaugurado casi todo, cortando cintas y poniendo primeras piedras aqu¨ª y all¨¢.

En su primer a?o como regidor, en Villanueva solo hab¨ªa una peque?a escuela que acog¨ªa a ni?os y ni?as en clases separadas hasta los 8 a?os y el m¨¦dico les visitaba desde el pueblo vecino de Quijorna.

Hoy, adem¨¢s de los servicios b¨¢sicos de educaci¨®n y salud, el municipio es sede de atracciones y prestaciones muy exclusivas: un parque acu¨¢tico, un campo de golf, dos universidades privadas ¡ªla Universidad Alfonso X el Sabio y la Camilo Jos¨¦ Cela ¡ª y un centro de astronom¨ªa de la Agencia Espacial Europea.

Al principio hab¨ªa algo m¨¢s de 1.000 vecinos censados y hoy son 21.000 seg¨²n el ¨²ltimo padr¨®n, de enero de 2018, y m¨¢s de 40.000 si se les suma la poblaci¨®n flotante de estudiantes de las dos universidades que viven en pisos compartidos y tambi¨¦n chal¨¦s, que son el modelo de vivienda m¨¢s com¨²n en el municipio. ¡°Hemos hecho de una aldea, una ciudad, un referente¡±, celebra el alcalde.

Partida es integrante de un selecto club de 31 alcaldes espa?oles que en dos semanas cumplir¨¢n 40 a?os de gobierno municipal en democracia, seg¨²n los datos de la Federaci¨®n Espa?ola de Municipios y Provincias. Lo extraordinario de Villanueva es que con diferencia es el mayor de esos municipios, muy por encima del segundo en tama?o, Bri¨®n (A Coru?a), con 7.748 habitantes. La gran mayor¨ªa se encuentra en la Espa?a vac¨ªa y no supera los 1.000 habitantes.

En Madrid solo hay otro alcalde con 40 a?os de gobierno democr¨¢tico a sus espaldas: Carlos Rivera, de 63 a?os, regidor de Torremocha del Jarama. Con 975 habitantes, ese tranquilo pueblo encajonado en la Sierra Norte de Madrid, 66 kil¨®metros al norte de la capital, es un caso extraordinario de crecimiento en la Espa?a rural. En abril de 1979, cuando Rivera gan¨® su primera elecci¨®n, su pueblito ten¨ªa solo 141 habitantes.

A los dos pareciera darles algo de v¨¦rtigo abandonar el poder. En conversaciones por separado en sus despachos, donde tienen sus bastones de mando y recuerdos de toda una vida, admiten que hab¨ªan pensado que lo dejar¨ªan tras el mandato que concluye este a?o, pero ambos han reconsiderado su decisi¨®n a ¨²ltima hora y se presentar¨¢n a los comicios del 26 de mayo.

Durante sus 40 a?os de alcald¨ªa han crecido las voces que ven mal la reelecci¨®n sin l¨ªmites. Los cr¨ªticos presuponen que la longevidad en el poder corrompe, pero esta es una cuesti¨®n en disputa. ¡°Tenemos ejemplos de mandatos cort¨ªsimos, que han acabado en los tribunales, y de mandatos largu¨ªsimos que no lo han hecho¡±, dice el profesor de Derecho de la Universidad de Valencia Carlos Flores Juber¨ªas.

"Mis hijos odian la pol¨ªtica"

A Partida le duelen las sospechas. A?ora la consideraci¨®n que ten¨ªan los pol¨ªticos en sus primeros a?os, cuando se encontraba con el comunista o el socialista y se pon¨ªan de acuerdo. Corren otros tiempos, de demagogia y confrontaci¨®n sin tregua. ?l advierte a los pol¨ªticos m¨¢s j¨®venes: ¡°Si no nos entendemos, vamos al fracaso total¡±.

Partida asegura que tanta gente le estaba pidiendo que siguiera cuatro a?os m¨¢s que decidi¨® hacerles caso. En 1979 se present¨® empujado por unos amigos del pueblo que se hab¨ªan afiliado a UCD, el partido del presidente Adolfo Su¨¢rez. Ten¨ªa muchas dudas pero acept¨® porque le animaba el entusiasmo de esos a?os. ¡°No sab¨ªamos qu¨¦ era la pol¨ªtica o la democracia. Era algo nuevo para m¨ª y mucha m¨¢s gente¡±, a?ade. Hasta 1987 combin¨® la alcald¨ªa con su trabajo de inform¨¢tico en el Banco Santander. Acumula diez victorias por mayor¨ªa absoluta (con UCD, Alianza Popular y el Partido Popular). En la ¨²ltima elecci¨®n de 2015 obtuvo su peor resultado (un 47% de los votos).

Seg¨²n ¨¦l, una de las decisiones que han propiciado el crecimiento de su ciudad fue optar al principio de su primer mandato por rechazar la construcci¨®n de viviendas en altura y optar por un modelo de urbanizaci¨®n de baja densidad, que atrajo a residentes que ¡°buscaban calidad de vida¡±. Por aquellos a?os el noroeste de Madrid crec¨ªa como una zona privilegiada, la m¨¢s rica de la regi¨®n.

Por el camino ha sufrido los sinsabores de la pol¨ªtica, salpicado junto con su mujer, arquitecta municipal, por un caso de corrupci¨®n que acab¨® siendo archivado tras siete a?os. Fue su episodio m¨¢s negro porque coincidi¨® con un c¨¢ncer, ya superado, que ¨¦l cree fue consecuencia de aquel trauma. Tan dura fue aquella etapa entre 2005 y 2012 que el ¨²nico de sus cinco hijos que mostraba inter¨¦s por la pol¨ªtica, Paolo, perdi¨® todo el apetito. ¡°Mis hijos odian la pol¨ªtica porque yo he sido atacado injustamente¡±, dice. El PSOE municipal, que lider¨® la acusaci¨®n, no contest¨® a una solicitud de valoraci¨®n sobre la gesti¨®n de Partida.

Rivera, por su parte, asegura que el pr¨®ximo ser¨¢ su ¨²ltimo mandato porque ¡°tiene que haber un relevo¡±. Siempre ha sido candidato independiente. Era repartidor del Corte Ingl¨¦s cuando gan¨® su primera elecci¨®n con 23 a?os. Hijo y nieto de vecinos de Torremocha, le apenaba c¨®mo los j¨®venes se iban del pueblo y dice que se present¨® a alcalde para darles opciones. Hoy, Torremocha cuenta con un polideportivo, una escuela de m¨²sica y un centro para empresarios artesanos.

Le han llamado cacique pero responde que ese t¨¦rmino no es apropiado en democracia, cuando un regidor se presenta a examen cada cuatro a?os. Dice que mucha gente no sabe que alcaldes de municipios peque?os como el suyo no cobran. "Creen que todo el mundo se forra y que somos unos chorizos", se lamenta.

?l vive gracias a que combina la alcald¨ªa con su trabajo como secretario en otros cinco ayuntamientos de la comarca. Cuando se retire se ir¨¢ a su huerto, junto al r¨ªo Jarama: ¡°Seguir¨¦ colaborando desde fuera y cobrando lo mismo que ahora¡±.