Una negociaci¨®n contra reloj con la Asamblea como premio

Los cinco partidos implicados en las conversaciones para formar los gobiernos del Ayuntamiento y la Comunidad (PSOE, PP, Cs, M¨¢s Madrid y Vox) negocian sabiendo que tienen que haber alcanzado un acuerdo en los pr¨®ximos diez d¨ªas, ya que el 11 de junio se constituye la Asamblea regional y se elige a su presidente y al resto de miembros de la Mesa. No son unos puestos cualquiera: otorgan a sus ocupantes el poder para marcar el ritmo de toda la legislatura, acelerando y frenando los asuntos que les interesen. Eso obliga a priorizar las negociaciones regionales por encima de las capitalinas, pese a que se intentar¨¢ vincular ambas: el Ayuntamiento de Madrid no se constituye hasta el d¨ªa 15. As¨ª, el acuerdo que definir¨¢ la composici¨®n de la Mesa de la Asamblea avanzar¨¢ el pacto de Gobierno.

¡°El tiempo corre¡±, advirti¨® ayer al respecto Iv¨¢n Espinosa de los Monteros, que coordina las negociaciones de Vox. ¡°Hemos perdido una semana. Espero que no perdamos la semana siguiente, porque no es solo que el d¨ªa 15 se constituyan los Ayuntamientos, es que el d¨ªa 11 se constituyen las mesas [de los distintos parlamentos regionales]¡±.

?Puede ser la presidencia de la Asamblea una moneda de cambio en la b¨²squeda de apoyos para lograr la presidencia de la Comunidad? ¡°S¨ª. Lo digo con claridad¡±, contesta con contundencia uno de los negociadores de los principales partidos, bajo la condici¨®n de mantener el anonimato. En consecuencia, ese puesto, como las tres vicepresidencias, y las secretar¨ªas, entrar¨¢n en el juego de compensaciones por votos favorables o abstenciones para la investidura.

Ning¨²n presidente auton¨®mico se puede arriesgar a que la Asamblea est¨¦ dirigida por un rival, pero s¨ª puede abrirse a que la comande un socio, o a que este tenga un poder decisivo en la construcci¨®n de mayor¨ªas a trav¨¦s de las vicepresidencias. Ha ocurrido, por ejemplo, en Andaluc¨ªa, primer ejemplo del pacto de las tres derechas (PP, Cs y Vox) que Isabel D¨ªaz Ayuso aspira a reeditar en Madrid. All¨ª gobierna Juan Manuel Moreno Bonilla (PP), pero la C¨¢mara es presidida por Marta Bosquet (Cs), lo que cimenta la alianza de un gobierno de coalici¨®n sin Vox, que es con lo que sue?an las dos formaciones en la Comunidad. Como compensaci¨®n, el partido de extrema derecha tiene un puesto en la Mesa.

Vox, sin embargo, no est¨¢ por ahora por la labor de facilitar la reedici¨®n de un pacto que se labr¨® sin que le dejaran sentarse a negociar al mismo tiempo con PP y Cs, y que culmin¨® con un Ejecutivo de coalici¨®n en el que no se le dio cabida. Dos aspectos que la formaci¨®n de Santiago Abascal aspira a corregir en Madrid, precisamente por su descontento con la aplicaci¨®n de las medidas que ha propuesto para Andaluc¨ªa.

El precedente de Andaluc¨ªa

¡°El gran problema es que hay un beneficiario de ese pacto que es Ciudadanos, que no jug¨®, no arriesg¨® absolutamente nada, no vino a la mesa de negociaci¨®n, pero est¨¢ disfrutando del poder¡±, lament¨® Javier Ortega Smith, l¨ªder capitalino de Vox, en una entrevista televisiva. ¡°Y podr¨¢ decir: yo con usted no he pactado nada, puedo hacer lo que me d¨¦ la gana¡±, a?adi¨®. ¡°Y en el fondo tiene raz¨®n¡±, reconoci¨®. ¡°Ese es el gran problema, que en el fondo tiene raz¨®n¡±.

La aritm¨¦tica parlamentaria y el reglamento de la Asamblea se combinan en Madrid para obligar a alianzas lo suficientemente significativas de cu¨¢l ser¨¢ el acuerdo para la investidura del presidente.

La presidencia se decide por mayor¨ªa absoluta (las m¨¢s f¨¢ciles son las que obtendr¨ªas las sumas de PP, Cs y Vox, o las de PSOE, Cs y M¨¢s Madrid). Si no se alcanza, se vuelve a votar a los dos diputados que hayan logrado m¨¢s papeletas en la primera vuelta, y se elige al que sume m¨¢s apoyos (lo que abre el juego). Las vicepresidencias se destinan a los tres diputados que obtengan m¨¢s votos cuando llegue el momento. Y las secretar¨ªas, tambi¨¦n. El reglamento da al PSOE una ventaja: si hay cuatro empates sucesivos en cualquiera de esos puestos, resultar¨¢ elegido el representante de la lista m¨¢s votada, que fue la socialista.

El cron¨®metro ya descuenta el tiempo hasta el martes 11. Queda apenas una decena de d¨ªas para decidir el futuro de Madrid.