Batlle exhibe mano dura contra la venta ambulante ilegal en Barcelona
El Ayuntamiento y la Generalitat dedican 100 polic¨ªas a ¡°erradicar¡± el top manta
Cada d¨ªa, de las nueve y media de la ma?ana a las diez de la noche, y ¡°sine die¡±, un centenar de agentes de polic¨ªa ¡ªentre mossos, guardia urbana y polic¨ªa portuaria¡ª patrullar¨¢n el paseo de Joan de Borb¨® y otras zonas estrat¨¦gicas de Barcelona para ¡°erradicar¡± el top manta. Esa es la medida que puso en macha este lunes el concejal de Seguridad, el socialista Albert Batlle, para acabar con la venta ambulante ilegal en la ciudad. Decenas de manteros se miraban a lo lejos el dispositivo, a la espera de encontrar un hueco para colocarse de nuevo.
El nuevo concejal de Seguridad ha empezado su mandato con determinaci¨®n. Uno de sus objetivos son los vendedores ambulantes ilegales, de quienes se han quejado amargamente los comerciantes, asegurando que les provocan unas p¨¦rdidas de 65 millones seg¨²n la patronal de peque?os y medianos comercios, PIMEC.
Barcelona es ¡°capital del comercio de proximidad¡±, defendi¨® este lunes Batlle en declaraciones a los medios de comunicaci¨®n, a mediod¨ªa, con el dispositivo antimanteros ya en marcha y flanqueado por Guardia Urbana, Mossos y polic¨ªa portuaria. Los veh¨ªculos policiales se fueron arremolinando a las diez de la ma?ana en el paseo de Juan de Borb¨®. A esa hora a¨²n no hab¨ªan llegado las decenas de vendedores que desde hace meses, los ¨²ltimos con m¨¢s intensidad, ocupan el flanco derecho del paseo frente al mar, sin dejar apenas espacio libre.
Los polic¨ªas se bajaron de los veh¨ªculos y empezaron a patrullar. No hizo falta nada m¨¢s, los manteros ni siquiera se acercaron al paseo. Algunos de ellos ya sab¨ªan de antemano que habr¨ªa un dispositivo policial porque ya les hab¨ªan dicho que a partir del lunes no podr¨ªan colocarse all¨ª. Un peque?o grupito se miraba a lo lejos, desde la parada de metro de la Barceloneta, el despliegue policial.
¡°Si no podemos ponernos, tendremos que vender de otra manera, quiz¨¢ caminando¡±, dec¨ªa un joven senegal¨¦s que no perd¨ªa la oportunidad de ense?ar un pareo por si aparec¨ªa alg¨²n comprador ocasional. ¡°Estoy normalmente en Madrid, pero ahora en verano voy a Barcelona. Se vive mejor, hay m¨¢s turistas y playa¡±, contaba. Conf¨ªa en que la polic¨ªa se canse despu¨¦s de dos o tres d¨ªas patrullando y puedan colocarse de nuevo. Si eso no pasa, quiz¨¢ se dedique a vender agua o latas de refrescos o alcohol, dice. Tambi¨¦n contempla desplazarse a otra ciudad costera vecina de Barcelona. Porque comer, dice, tendr¨¢n que comer. ¡°Ya nos hemos pronunciado muchas veces¡±, zanj¨® el portavoz del Sindicato de Manteros, Laminer Sarr, sobre la pol¨ªtica municipal de expulsarlos del espacio p¨²blico.
La eterna batalla
No es la primera vez que los pol¨ªticos, apoy¨¢ndose en la polic¨ªa, se conjuran para erradicar el top manta. Algo que hasta ahora no han logrado. El fen¨®meno afecta a varios municipios costeros catalanes, como El Vendrell, Sitges o Roses, y cada uno aplica su propia pol¨ªtica para hacerle frente, incluso vali¨¦ndose de seguridad privada. En Barcelona, fuentes policiales calculan que en la actualidad trabajan un millar de vendedores ambulantes ilegales.
La alcaldesa Ada Colau ha sido acusada en diversas ocasiones de pasividad. Con los socialistas al frente de la delicada ¨¢rea de Seguridad, la intenci¨®n es transmitir una imagen de mano dura con este tipo de comercio. En las ¨²ltimas semanas se han producido incidentes aislados entre manteros y guardia urbana, que les han requisado el material.
El objetivo del nuevo dispositivo es, sin embargo, evitar ese tipo de actuaciones y que la presi¨®n policial sea suficiente para prevenir que se coloquen en los puntos estrat¨¦gicos en la ciudad. Liderado por la Guardia Urbana, los Mossos le dan apoyo por si hay problemas de orden p¨²blico, y tiene una vocaci¨®n de ¡°movilidad¡±: que los polic¨ªas se puedan desplazar a otros puntos de la ciudad si detectan que hay actividad por parte de los manteros.
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