Kiko Veneno: ¡°Algunos pol¨ªticos nos quieren dormidos¡±

A Kiko Veneno (Figueras, 67 a?os) le gusta Madrid como plaza para tocar. Lo ha hecho multitud de veces desde que empez¨® su carrera musical en 1977. La ¨²ltima vez que estuvo en la capital fue el pasado mes de mayo, en la pradera de San Isidro. Hoy visita la sala Ochoymedio (Barcel¨®, 11) en el que ser¨¢ el tercer concierto de la gira de presentaci¨®n de su nuevo disco, Sombrero roto,que vio la luz en abril. ¡°Madrid es una ciudad especial para m¨ª¡±, recuerda el m¨²sico, que ahora est¨¢ afincado en Sevilla. ¡°Aqu¨ª grab¨¦ los primeros discos de mi carrera¡±, dice Veneno que estuvo a punto de mudarse a la capital espa?ola en los ochenta.

¡°Fue una ¨¦poca de mi vida en la que ven¨ªa mucho a grabar y pens¨¦ que ser¨ªa m¨¢s f¨¢cil trasladarme aqu¨ª con mi familia. Pero al final mi vida en Sevilla, el ambiente, el tener m¨¢s cerca la playa, el solecito ¡ªaunque nos muramos de calor en verano¡ª... me hicieron echarme para atr¨¢s¡±, cuenta sentado en el sof¨¢ de su agencia de representaci¨®n, Spanish Bombs, en el coraz¨®n de la ciudad.

No se considera un nost¨¢lgico, aunque no puede evitar sonre¨ªr al recordar ¡°a mi buen amigo Ceesepe¡±. ¡°Siempre que ven¨ªa a Madrid, le iba a buscar a ¨¦l y siempre le encontraba en su casa pintando¡±. El pintor madrile?o, fallecido el a?o pasado, ilustr¨® la portada del primer disco en solitario de Kiko Veneno, Ser¨¦ mec¨¢nico por ti, publicado en 1981. ¡°Era un genio, cre¨® un c¨®mic para la portada que narraba en una breve historia de qu¨¦ iba el disco¡±, explica. Ayer, el C¨ªrculo de Bellas Artes organiz¨® un homenaje a Ceesepe¡ª?Va por Ceesepe!¡ª en el que particip¨® Kiko Veneno, entre otros artistas, interpretando una canci¨®n in¨¦dita, Desprecio, escrita por el pintor e ilustrador.

En el Ochoymedio, Veneno cantar¨¢ las 10 canciones que componen Sombrero roto, al que acompa?a en su publicaci¨®n un libro ¡ªilustrado por Marta Lafuente Cuenca y Carmena Alvarado¡ª en el que su hijo, Ad¨¢n L¨®pez, narra la trayectoria de su padre como ¡°una historia de amor por la m¨²sica¡±.

¡°Al final echas la vista atr¨¢s y te das cuenta de que has construido todo esto por algo, y ese algo no puede ser otra cosa que pasi¨®n¡±, dice el m¨²sico, andaluz de adopci¨®n, quien confes¨® en una entrevista hace a?os que estuvo a punto de tirar la toalla tras grabar el disco ?chate un cantecito (1992). ¡°S¨ª, era otra ¨¦poca de mi vida, pero ahora, a los 67 a?os, me encuentro muy bien y, si la cosa sigue as¨ª y me dejan, seguir¨¦ dando guerra¡±.

En este ¨²ltimo trabajo, el cantante y compositor introduce otros estilos musicales como la electr¨®nica. ¡°Me apetec¨ªa cambiar, hacer algo diferente. Aunque las vanguardias son m¨¢s de los j¨®venes, yo sigo experimentando¡±, dice, y a?ade que le gusta lo que se est¨¢ haciendo actualmente en el trap. ¡°Es un g¨¦nero bastante dif¨ªcil de definir, pero en l¨ªneas generales me agrada. No es un ritmo tan machac¨®n como otros estilos, tiene poca bater¨ªa, pocos elementos absorbentes, se le da mucho protagonismo a la voz¡­, me gusta como concepto musical¡±.

Kiko Veneno, que nunca ha tenido reparo en opinar p¨²blicamente sobre la situaci¨®n pol¨ªtica y social de Espa?a, critica ahora ¡°la falta de reconocimiento de la cultura en este pa¨ªs¡±. ¡°Vienen otras elecciones y de nuevo, m¨¢s debates electorales en los que, por supuesto, no oiremos hablar nada sobre propuestas para la cultura. ?Sabes por qu¨¦? Porque no interesa. La cultura es conocimiento, es inquietud, nos hace estar despiertos, y algunos pol¨ªticos nos quieren dormidos¡±, dice. ¡°Tambi¨¦n me preocupa la censura que se est¨¢ viviendo y a¨²n m¨¢s la autocensura que muchos m¨²sicos y artistas se est¨¢n haciendo¡±, a?ade.

Todav¨ªa le quedan varios d¨ªas por delante antes de marcharse de Madrid. Los va a invertir buscando hueco para dejarse caer por el bar La Dolores y tomarse ¡°una cerveza bien tir¨¢¡±. ¡°Me gusta mucho ir ah¨ª por esas cervezas bien frescas que dejan las marquitas en el vaso¡±, se r¨ªe. ¡°Y pasear por Madrid, eso tambi¨¦n lo har¨¦ antes de irme, si puedo. Me gusta atravesar las avenidas con ¨¢rboles y cruzarme con la gente, los madrile?os son muy abiertos y participativos. Eso s¨ª, cada vez que vuelvo encuentro m¨¢s turistas¡±, concluye.