El Ayuntamiento desmantela un proyecto vecinal para combatir la soledad

Ena Velasco no quiere sentirse sola. Naci¨® en Ventilla hace 63 a?os, tiene una hija a la que ve una vez al a?o ¡ª¡°as¨ª no hace da?o¡±¡ª y un marido con el que no comparte demasiadas cosas: ¡°Una relaci¨®n correcta¡±, describe. Se siente joven, tiene ganas de re¨ªrse y de vivir, pero nadie con quien hacerlo. A veces, cuando encontraba a alguien sentado en un banco de la calle, buscaba su compa?¨ªa y su conversaci¨®n. ¡°Se?ora, ?usted a m¨ª de qu¨¦ me conoce?¡±, le contestaban algunos. Decidi¨® buscar remedio. Acudi¨® a su asistente social: ¡°Estoy aqu¨ª porque me siento muy sola¡±. En cuesti¨®n de semanas, se vio rodeada por una red de vecinos y ahora, cuenta divertida, su WhatsApp no deja de sonar.

Este ¨¦xito se debe, en parte, a la cooperativa Tangente, que hace dos a?os comenz¨® a gestionar un proyecto piloto de Madrid Salud, organismo dependiente del Ayuntamiento, en Almenara (distrito de Tetu¨¢n) y en Trafalgar (Chamber¨ª). La finalidad: crear una red de apoyo comunitario que facilitase la detecci¨®n y el apoyo en la lucha contra la soledad no deseada. Para ello, promov¨ªan actividades en el barrio que potenciasen el sentido de arraigo y de comunidad. El pasado 31 de diciembre, cuando los primeros resultados comenzaban a notarse, el alcalde, Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida, desmantel¨® el programa y no prorrog¨® su contrato, que contaba con una inversi¨®n de 450.000 euros para dos a?os. Ena y cientos de personas como ella se quedar¨¢n, de nuevo, solos.

Es el caso de Angelines Obiols, de 81 a?os, que, tras vivir toda su vida por la Casa de Campo, se traslad¨® a la plaza de Castilla (Ventilla) cuando muri¨® su madre y sus hijos se independizaron. ¡°Fue un cambio tan brusco¡­ No conoc¨ªa a nadie en este barrio y me deprim¨ª mucho¡±. Buscando cosas para hacer, dio con este proyecto y su vida cambi¨®. Iba a clases de gimnasia, de mindfullness, a tertulias de cine, daba largos paseos por el barrio... Gracias a Tangente, ?ngeles descubri¨® que hay mucha gente sola en los barrios ¡ª¡°mucha m¨¢s de las que me imaginaba¡±¡ª que necesitan ayuda para dar el primer paso y encontrarse.

En definitiva, ese era el objetivo de los 11 trabajadores de Tangente. El proyecto piloto estaba enmarcado dentro del plan Madrid ciudad de los cuidados que inaugur¨® la exalcaldesa Manuela Carmena para impulsar programas en varios barrios de la capital, con la finalidad de crear comunidad. Seg¨²n Sandra Candelas, coordinadora del proyecto que gestiona Tangente, ¡°los dos primeros a?os sirven para establecer redes vecinales, de comerciantes y profesionales, y al mismo tiempo para sensibilizar en el barrio sobre la problem¨¢tica¡±. Lo novedoso del programa era que se dirig¨ªa a personas mayores de 18 a?os, y no solo a jubilados, lo que incrementa la dificultad para comparar sus resultados con otros proyectos que ya existen porque se enfocan solo en la poblaci¨®n m¨¢s mayor.

¡°Est¨¢ planteado as¨ª porque una de las caracter¨ªsticas de Madrid Salud es la aplicaci¨®n de los principios de diversidad e igualdad de oportunidades al trabajo de salud comunitaria. Hemos tratado a gente migrante, a mujeres v¨ªctimas de violencia machista, catedr¨¢ticos reci¨¦n jubilados, j¨®venes¡­ Un perfil muy diverso¡±, explica Candelas. Lo interesante de estos dos a?os, seg¨²n Tangente, es que han podido llegar a mucha gente sola que no estaba siendo atendida. ¡°Ser¨ªa un retroceso volver a enfocar la soledad como un problema que solo afecta a los mayores¡±, a?ade Candelas.

Ejemplo de la diversidad del proyecto es el caso de ?ngeles Jim¨¦nez, de 48 a?os, v¨ªctima de violencia de g¨¦nero. Tras mudarse a Madrid porque ¡°buscaba protecci¨®n¡±, acudi¨® a los servicios sociales y la derivaron a Tangente. ¡°Pensaron que su proyecto era perfecto para m¨ª, y no se equivocaban¡±, cuenta. Adem¨¢s de las actividades gratuitas del proyecto ¡ª¡°me han permitido olvidar muchos momentos malos y no estar todo el d¨ªa pensando en lo mismo¡±¡ª, su tabla de salvaci¨®n fue el grupo de voluntarios organizado por Tangente para acompa?ar a los vecinos. ¡°?bamos al cine, a pasear, a tomar un caf¨¦... Tambi¨¦n me sent¨ªa m¨¢s segura con ellos porque iban conmigo a zonas donde estoy localizable¡±, explica esta vecina de Chamber¨ª que ahora duda de si volver¨¢ a encontrar un proyecto semejante.

A pesar de los relatos de ¨¦xito del plan, el Consistorio achaca la cancelaci¨®n al bajo n¨²mero de personas atendidas. ¡°Se puso en marcha en 2017 con el objetivo de prestar apoyo a unos 17.000 ciudadanos en dos barrios y en 2018 iniciaron el itinerario de atenci¨®n 43 personas, concluy¨¦ndolo 7¡±, justifican fuentes del ?rea de Seguridad y Emergencias, de quien depende Madrid Salud.

Carlos L¨®pez, experto en evaluaci¨®n social que ha trabajado para Tangente, explica que la finalidad del proyecto no era llegar a un n¨²mero determinado de personas, sino ¡°implicar a los barrios de Trafalgar y Almenara en la lucha contra la soledad y generar un cambio de din¨¢micas¡±.?La coordinaci¨®n de Tangente a?ade que, para asegurar la detecci¨®n y prevenci¨®n de los casos de soledad, realizaron m¨¢s de 145 actividades, con un total de 2.344 participantes, m¨¢s de 785 talleres de formaci¨®n a los que acudieron 856 asistentes.?

Para la oposici¨®n, el desmantelamiento de esta medida se enmarca en el intento del actual Ayuntamiento de borrar el ¡°legado Carmena¡±: cualquier iniciativa impulsada por la exalcaldesa tanto de car¨¢cter vecinal como social.?¡°No existe otro centro en Madrid con estos recursos¡±, lamenta ?ngeles Jim¨¦nez, que reconoce que no sabe si va a encontrar el apoyo que estaba recibiendo hasta ahora en otra pol¨ªtica p¨²blica. ¡°No solo se sienten solos y aislados los ancianos¡±, agrega. Ena Velasco es m¨¢s afortunada: su m¨®vil seguir¨¢ sonando. ¡°Las dos psic¨®logas de Tangente que me trataban me han dado pautas¡±. Por su parte, Angelines Obiols guarda, ¡°como oro en pa?o¡±, al grupo de amigas que ha hecho en las tertulias de cine. ¡°Seguiremos yendo a los Verdi por la ma?ana y por la tarde a una cafeter¨ªa para comentar la peli¡±.