Conservatorio en ruina: sin profesores ni equipo directivo
200 alumnos de la escuela de m¨²sica de Legan¨¦s sufren las bajas de los docentes que no se han cubierto por cuestiones burocr¨¢ticas entre el Ayuntamiento y la Comunidad
¡ªEsta es Carolina, mi profesora. A ella se lo agradezco todo.
La que presenta a su maestra con orgullo es Celia Lozano, 22 a?os. Le faltan cinco minutos para empezar su clase de canto en el conservatorio de Legan¨¦s, al suroeste de Madrid. Est¨¢ en sexto, el ¨²ltimo curso del grado medio, y ha tenido que sacrificar mucho para llegar hasta ah¨ª. Vive en Aranjuez, entre medias ha estudiado Musicolog¨ªa en la Universidad Complutense y ha cogido el tren una y otra vez para asistir puntualmente a sus clases y obtener el t¨ªtulo que le dar¨¢ puntos para presentarse a las pruebas de la Escuela Superior de Canto de Madrid. Esta soprano lo ha dado todo. Pero este a?o, se teme, no podr¨¢ sacarse dos asignaturas, las de idioma aplicado al canto, porque no hay profesores. Y sin examen, no hay t¨ªtulo. 200 estudiantes de m¨²sica se encuentran en esa situaci¨®n. Para remate, el equipo directivo ha renunciado en pleno. Y ni el Ayuntamiento ni la Comunidad se responsabilizan del problema.
Lozano estudia en el conservatorio pero su situaci¨®n an¨®mala se repite en la escuela municipal de m¨²sica. Ambos centros est¨¢n unidos por el espacio, el claustro de profesores que comparten y el nombre de su fundador, Manuel Rodr¨ªguez Sales. Y trae a padres y alumnos por el camino de la amargura. En total, seis docentes de los 26 de la plantilla est¨¢n de baja o excedencia desde inicio de este curso y el Ayuntamiento no ha cubierto sus huecos. De hecho, ni?os como Andrea Canizales, de nueve a?os, se han rendido y han dejado de estudiar porque no tienen a alguien que les ense?e c¨®mo manejar el instrumento que eligieron concienzudamente. Ella estaba ilusionada con la viola, pero les pasa lo mismo a quienes estudian la trompeta, el piano de conservatorio, el fagot, el contrabajo o idioma aplicado al canto.
En definitiva, 200 de los 900 alumnos que hay entre la escuela municipal de m¨²sica y el conservatorio ¡ªdonde se estudia de manera reglada el grado medio¡ª est¨¢n afectados por la falta de profesorado. Sin clases y sin poder avanzar desde septiembre. Pero con la matr¨ªcula pagada, que va desde los 250 hasta los 700 euros anuales, dependiendo del n¨²mero de asignaturas y del curso.
¡°Est¨¢n dejando morir la escuela y el conservatorio¡±, se queja Juan Bautista, 44 a?os, uno de los miembros m¨¢s activos del AMPA.
La guerra abierta con el Ayuntamiento viene de lejos. Los padres culpan a su alcalde, Santiago Llorente (PSOE), no solo de no cubrir la baja de los profesores, sino de incumplir los pagos a los proveedores, lo que significa que ya no va nadie a afinar los instrumentos, no pagan a la empresa que subcontrata a los profesores de idiomas aplicado al canto (los ¨²nicos subcontratados) o a los encargados de arreglar los desperfectos del edificio, un antiguo instituto de 60 a?os. Goteras, salas sin insonorizar y un edificio de tres plantas que tienen que compartir con la biblioteca del pueblo, asociaciones vecinales o el sindicato de la polic¨ªa local.
Y todo, seg¨²n el Ayuntamiento, por un ¡°problema burocr¨¢tico complejo¡± con los papeles originales del conservatorio, pero que tambi¨¦n tiene tintes pol¨ªticos. La escuela de m¨²sica se inaugur¨® en 1972 pero, en 2013, el Ayuntamiento, en aquel momento gobernado por el PP, solicit¨® a la Comunidad de Madrid, tambi¨¦n en manos de los populares, la autorizaci¨®n para un conservatorio de grado medio. La idea no era mala: pidieron las competencias jur¨ªdicas y econ¨®micas y la administraci¨®n regional las concedi¨®, por lo que el municipio ha corrido con los gastos durante siete a?os.
Pero tras las elecciones de 2015, sin embargo, el PSOE recuper¨® el feudo de Legan¨¦s y comenzaron los problemas ¡°por la falta de claridad en los papeles¡± de su predecesor, es decir, de un convenio regulador que formalizara aquel traspaso de competencias en educaci¨®n, en manos de la administraci¨®n regional. ¡°Se ha estado funcionando con parches y nosotros queremos dar viabilidad al conservatorio con un marco regulador. Lo que tenemos que hacer ahora es pedir un informe a Hacienda para que determine si somos sostenibles y luego la Comunidad nos debe delegar las competencias¡±, explica la concejala de Cultura, Eva Mart¨ªnez Borrega, de Leganemos M¨¢s Madrid, que gobierna en coalici¨®n con los socialistas desde 2019.
Sin embargo, la Comunidad de Madrid insiste en que el Ayuntamiento es titular exclusivo del conservatorio. ¡°Puede decir lo que estime oportuno, pero las objeciones de su propia intervenci¨®n municipal no las atienden. Y as¨ª desde 2017¡±, aseguran fuentes de la Consejer¨ªa de Educaci¨®n. Es decir, cuando el primer profesor pidi¨® una baja.
Un informe fechado en 2018 por Alejandro Avenza, subdirector general de r¨¦gimen jur¨ªdico local de la Comunidad, da la raz¨®n al Ayuntamiento y argumenta que no tiene competencias en materia educativa. Las tiene la administraci¨®n regional. Aunque de la escuela de m¨²sica, que ha funcionado de manera indivisible, no. Y ah¨ª est¨¢ el problema. Porque ambos centros comparten profesores.
¡°Es una pena. Entre unos y otros est¨¢n acabando con nuestra cultura, que viene de lejos¡±, lamenta ?ngel Puerta, 69 a?os, tambi¨¦n del AMPA.
Concretamente, el amor por la m¨²sica lleg¨® a Legan¨¦s, un municipio de cerca de 200.000 habitantes, de la mano de Manuel Rodr¨ªguez Sales. Valenciano y militar, se instal¨® en el pueblo madrile?o cuando no sumaba m¨¢s de 5.000 vecinos en los a?os sesenta, donde fue a hacer la mili. All¨ª se enamor¨® de Conch¨ªn, que despu¨¦s se convirti¨® en su mujer, y all¨ª se instal¨®. ¡°Era un entusiasta¡±, recuerda Mar¨ªa Eugenia Mesa, de 68 a?os, una de sus primeras alumnas. Don Manolo, como llamaban a Rodr¨ªguez Sales en los tiempos en que a los maestros se les hablaba de usted, cre¨® primero un coro y una banda de cornetas y tambores y, cuando vio que el amor por la m¨²sica se empez¨® a contagiar entre los leganenses, utiliz¨® sus dotes de sargento para convencer al alcalde de que el pueblo necesitaba una escuela de m¨²sica.
Corr¨ªa el a?o 72. La escuela se inaugur¨®, creci¨® y se convirti¨® en un centro de referencia de bandas sinf¨®nicas de Espa?a. Y, adem¨¢s, Don Manolo teji¨® una red social. ¡°Sac¨® a gente de la calle durante el boom de las drogas, les meti¨® la m¨²sica en el cuerpo¡±.
La vocaci¨®n se instal¨® en la escuela. Los profesores, m¨¢s que un trabajo, compart¨ªan una forma de vida. Y de all¨ª salieron nombres como Gloria Hijosa, trompista que toca ahora en el Theater Kiel de Alemania, Carlos Ord¨®?ez de Arce, saxofonista, premio en 2017 del prestigioso V International Saxophone Competition Jean-Marie Londeix, o Alberto Rom¨¢n, contrabajista que ha tocado como solista en el cuarteto Colores junto al violinista Ara Malikian. Ahora, de hecho, uno de los mayores orgullos que despierta el lugar lleva la cara de una joven promesa de 16 a?os: Alejandro Tolosa, que perfecciona all¨ª sus estudios de tromb¨®n desde que ten¨ªa ocho a?os. Todav¨ªa en quinto ¡ªle falta un curso y medio para optar al Conservatorio Superior de M¨²sica de Madrid¡ª ya forma parte de la Orquesta Sinf¨®nica de Madrid y ostenta el privilegio de ser el ¨²nico que ha entrado en la Joven Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid (Jorcam) sin estar matriculado en estudios de grado superior. Una joya con matr¨ªculas de honor que ya ha tocado en el Auditorio Nacional. ¡°Mi profesora de Legan¨¦s, Isabel Delgado, es la que me ha ayudado y se ha volcado en todo. Sin ella no estar¨ªa aqu¨ª¡±, dice un Tolosa t¨ªmido pero reivindicativo.
¡°A los profesores les horroriza pensar que tienen que pedir una baja por maternidad, por ejemplo. Se sienten culpables porque saben que dejan a sus alumnos sin nada¡±, reconoce M. P., una profesora. El centro, adem¨¢s, carece de equipo directivo. Renunciaron todos por la situaci¨®n actual.
¡°Para mi padre, la m¨²sica era la cara A de su LP. Y su familia la cara B¡±, cont¨® la hija de Rodr¨ªguez Sales en su entierro, en 2008. Pese a padres, alumnos y profesores, ese disco que dej¨® el fundador en herencia est¨¢, ahora, algo rallado. ¡°Esto m¨¢s que una cuesti¨®n de competencias, es de incompetencias¡±, rumia Puerta. Mayores y j¨®venes se conjuran para salvar su refugio. Ya han acudido al Defensor del Pueblo, que ha admitido a tr¨¢mite su queja, y recogen firmas en change.org para sumar apoyos y presionar a sus pol¨ªticos. Se trata de salvar la m¨²sica de Legan¨¦s. Y de honrar la memoria de Don Manolo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.