Dos multas m¨¢s que dudosas por un botell¨®n

Octubre de 2014. Pablo y Alba ten¨ªan 20 y 18 a?os. Naturales de Aranjuez, un s¨¢bado por la noche fueron a Madrid para ir a la Sala Marco Aldany, en la calle de la Princesa. Sostienen que estaban a punto de entrar cuando dos polic¨ªas les pidieron el DNI y les tomaron los datos, pero les dijeron que no iban a ser sancionados ni les entregaron ninguna multa. Tres meses despu¨¦s, les lleg¨® a cada uno en su domicilio una multa de 600 euros por ingerir alcohol en la v¨ªa p¨²blica. Este es el testimonio que han mantenido los dos afectados y los siete amigos que les acompa?aban en el juicio que el mi¨¦rcoles se celebr¨® en la Audiencia Provincial. La pregunta del letrado de la acusaci¨®n fue la misma para todos los testigos:

- Los polic¨ªas, despu¨¦s de pedirles el DNI, ?entregaron el bolet¨ªn de multa a Pablo y a Alba?

- No.

¡°Estoy seguro de que no¡±, a?adi¨® uno de los siete j¨®venes. Un juicio anterior les hab¨ªa dado la raz¨®n: en junio de 2017 ganaron por la v¨ªa administrativa, por lo que se les retir¨® la multa. El juez argument¨® que no quedaba demostrado que estuvieran bebiendo alcohol. El abogado de los dos j¨®venes, en su argumentaci¨®n, a?adi¨® un informe de la Defensora del Pueblo de 2015, en el que se apuntaba que en ese a?o hab¨ªan tenido lugar 73 casos en los que los polic¨ªas hab¨ªan multado sin entregar la copia a los sancionados.

Los dos polic¨ªas acusados, que acudieron a la vista en uniforme, alegaron que no recuerdan aquella noche porque a lo largo del d¨ªa hacen ese tipo de intervenci¨®n muchas veces. En 2019, las multas por botell¨®n en Madrid ascendieron a 39.736, 10.000 m¨¢s que el a?o anterior. Aseguraron que no consiguen ning¨²n beneficio por trabajar por la noche ni comisi¨®n seg¨²n el n¨²mero de multas que tramitan. Aseguraron que llevaron a cabo el protocolo. De lo que se les acusa es de salt¨¢rselo: declarar que el afectado no ha querido recoger la multa si en realidad no se le ha entregado es delito de falsedad documental, penado con prisi¨®n de tres a seis a?os.

El abogado de la defensa y la fiscal condujeron sus preguntas a las bolsas con alcohol, qui¨¦n las llevaba, por qu¨¦ no las hab¨ªan tirado antes de llegar a la calle de la Princesa si ya no iban a beber o si preguntaron a los polic¨ªas si iban a ser multados. ¡°Si la polic¨ªa te pide el DNI, creo que es una pregunta que surge¡±, contest¨® el testigo Alberto Aguilera. Ning¨²n testigo recordaba ser ¨¦l quien llevaba la bolsa, ni la raz¨®n por la que no las tiraron antes. Solo una pregunta del abogado de los polic¨ªas a Aguilera se sali¨® del interrogatorio autom¨¢tico:

- ?Hubo alg¨²n tipo de enfrentamiento aunque fuera verbal entre los agentes y ustedes?

- No.

- Entonces, ?por qu¨¦ en la foto que subi¨® a Instagram escribi¨® ¡°Fuck the police¡± (¡°Que le jodan a la polic¨ªa¡±)?

La foto de la red social a la que se refiere corresponde al d¨ªa de los hechos, el 26 de octubre de 2014, en la que aparecen los nueve amigos tras el cumplea?os de este testigo.

- Usted comprender¨¢ que no es agradable que la polic¨ªa te pida la documentaci¨®n. Nos cort¨® el rollo - contest¨® Aguilera.

- Si le llegan a poner la multa, ?qu¨¦ hubiese escrito usted?

¡°Ese comentario es impertinente, se?or letrado¡±, zanj¨® el juez, quien a?adi¨® que el joven hac¨ªa uso de su libertad de expresi¨®n. El Ministerio fiscal pide la absoluci¨®n de los polic¨ªas. El juez deja el caso visto para sentencia.