Aniversarios m¨¢gicos en Badalona
El festival Li-Chang cumple 20 a?os y Magoo, su director, ya suma 40 en los escenarios
Martes. Tarde. Instituto Eugeni d¡¯Ors. Sant Roc (Badalona). Terminado el horario lectivo, 25 profesores asisten a un taller sobre aplicaciones pedag¨®gicas de la magia. La matr¨ªcula se ha cerrado sin poder atender todas las peticiones. Los maestros del taller son Enric Magoo y Mati G¨¢lvez. Es uno de las decenas de actos que llenan este mes la agenda del festival de magia de Badalona,?el Memorial Li-Chang.?Son seis sesiones de dos horas que se pasan volando. La primera lecci¨®n es un repaso r¨¢pido a la historia de la magia. Magoo realiza un juego de cubiletes rememorando la pintura de la tumba de Baket III, en Egipto, en la que aparecen dos personajes manej¨¢ndolos. Es de hace cuatro mil a?os y podr¨ªa ser el primer testimonio gr¨¢fico de un juego m¨¢gico. Tambi¨¦n les habla de Dedi, de quien se cuenta en un papiro que, ante el fara¨®n Keops, resucit¨® una oca decapitada uniendo su cabeza al cuello. Dedi, dice la leyenda, era un hombre de ciento diez a?os, que com¨ªa al d¨ªa quinientos panes, medio buey y beb¨ªa m¨¢s de cien jarras de cerveza. La clase, particularmente divertida, contin¨²a con otros juegos. Algunos basados en principios f¨ªsicos (un aro enred¨¢ndose en una cadena) o efectos de base matem¨¢tica con cartas. Y all¨ª se explica que la magia puede ayudar a la memoria, la imaginaci¨®n, la psicomotricidad, la percepci¨®n¡ Una t¨¦cnica de aprendizaje que emplea el juego. Casi al final de la sesi¨®n, Magoo pregunta a los alumnos por qu¨¦ se han matriculado. Las respuestas son las l¨®gicas. Atraer la atenci¨®n del alumno, romper la rutina escolar, aplicarlo a un curso de manualidades, conseguir la complicidad del estudiante¡ Hasta que uno de ellos, que pedir¨¢ permiso ¡ªconcedido¡ª para mostrar un n¨²mero de magia, bromea: poder hacer desaparecer a los alumnos que m¨¢s fastidien.
Magoo hace cuarenta a?os que es mago y lo ha celebrado con un espect¨¢culo en el Principal de Badalona. Se titula Confid¨¨ncies d¡¯un prestidigitador. Figura que Magoo acaba de terminar una actuaci¨®n y entra en su camerino, el escenario, donde cuenta su peripecia y pasi¨®n por la magia. C¨®mo empez¨® en el circo familiar de Antonio Arb¨®s. C¨®mo entr¨® a trabajar con 19 a?os en L¡¯Apotecari M¨¤gic. C¨®mo ayud¨® en la compa?¨ªa Abracadabra, etc. Tambi¨¦n aqu¨ª narra, muy brevemente, la historia de la magia. En su relato no se olvida de Reginald Scot, un noble ingl¨¦s que en 1584, aterrado por las hogueras de la Inquisici¨®n, public¨® un libro para demostrar que la brujer¨ªa se basaba en trucos que no ten¨ªan nada de demon¨ªacos. Fue el primer texto impreso sobre rutinas m¨¢gicas. Magoo recuerda a Jean-Eug¨¨ne Houdin (1805-1871), que funda el espect¨¢culo de ilusionismo moderno y a quien Erik Weisz homenaje¨® inspir¨¢ndose en ¨¦l para tomar el nombre art¨ªstico de Houdini. Magoo recrea un ejercicio de escapismo. Mientras va maquill¨¢ndose para terminar con su premiado n¨²mero de Frankenstein, realiza diferentes juegos. Con la inocente ayuda de una ni?a del p¨²blico, hace levitar una mesa. Un efecto maravilloso y t¨¦cnicamente impecable. El espect¨¢culo es una clase de lo que el mago llama ¡°enga?o honesto¡±, en la que viaja por el asombro y la ternura. Los aplausos no duraron cuarenta a?os¡ pero casi.
Mati G¨¢lvez, Psiquelady cuando sube a los escenarios, presentaba en el festival un espect¨¢culo infantil. ?Mentalismo para ni?os? G¨¢lvez reivindica un mentalismo que no confunde, pero igualmente capaz de crear ilusi¨®n. ¡°En mis espect¨¢culos, nadie puede pensar que uso poderes esot¨¦ricos, el mentalismo no tiene por qu¨¦ ser tenebroso¡±. Adem¨¢s de magia para adultos, G¨¢lvez se dedica a la magia corporativa, pero no solo para actuar en una convenci¨®n de clientes. La contratan para mejorar estrategias de mercadotecnia o ventas. G¨¢lvez cita como ejemplo de la especialidad a Txema Gic¨®, ilusionista e ingeniero, autor de Magia para vender. Interesada por la neurociencia, est¨¢ convencida de que los magos pueden aprovechar lo que saben de psicolog¨ªa para otros objetivos.
En la gala internacional intervino la peruana Gisell. Tambi¨¦n da cursos de magia para ni?os en colegios, como actividad extraescolar. ¡°Acudir a la magia perfecciona la capacidad de expresi¨®n y comunicaci¨®n¡±. Antes de afincarse en Barcelona en 2015, ya trabaj¨® con ni?os en Per¨². En el festival participan casi el mismo n¨²mero de magos que de magas. Algo poco frecuente porque la historia de la magia es masculina. Ellas no aparecen. ¡°No porque no existieran¡±, comenta Gisell. ¡°Fueron marginadas¡±. Y resalta el papel de las asistentes o partenaires en los grandes efectos de escena, donde acostumbran a ser ellas quienes se meten en los cajones. ¡°Lo cierto es que carecemos de referentes. Todos los libros de magia se dirigen a los magos¡±. Una de las tareas de Gisell, por ejemplo, ha sido crear su propio vestuario alternativo a la americana, una indumentaria llena de ¨²tiles bolsillos.
Gisell actu¨® en la gala internacional del festival el pasado fin de semana. Mostr¨® su destreza en la multiplicaci¨®n de cartas. El italiano Shezan hizo lo propio con l¨¢mparas y el sevillano H¨¦ctor Ruiz tuvo el encargo de la magia de grandes aparatos. El excepcional d¨²o portugu¨¦s Ta Na Manga realiz¨® dos ejercicios de poes¨ªa esc¨¦nica que son un radical ejemplo de qu¨¦ manera un repertorio puede renovarse proponiendo nuevos conceptos, argumentos y miradas. El finland¨¦s Marko Karvo trajo el clasicismo en su manifestaci¨®n m¨¢s perfecta. Es inconcebible su capacidad para hacer aparecer palomas, jaulas y loros que, adem¨¢s, dan controlados garbeos por la sala. Todo ello presentado con buen humor por el mago Jaime Figueroa. El ventr¨ªlocuo Andreu Llorens, Selvin, recibi¨® la menci¨®n de honor del festival por sus 50 a?os de oficio. La gala se celebr¨® en el teatro Zorrilla, donde j¨®venes magos como Guillem, Alex Gelabert o Alouette recib¨ªan al p¨²blico con juegos de cartas que no eran precisamente para aprendices. ?ste es uno de los legados del festival: la propagaci¨®n germinal del arte de la magia. Y al primero que hay que agradec¨¦rselo es a Magoo. Lleva al frente del mismo desde el primer d¨ªa, hace 20 a?os.
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