El Gobierno de Boric se enreda con la figura de la primera dama
La oficina de la pareja del presidente chileno, Irina Karamanos, provoca una pol¨¦mica por cambiar el nombre y las atribuciones del cargo. La Moneda da marcha atr¨¢s a lo que califica de ¡°error administrativo¡±
La antrop¨®loga y polit¨®loga feminista Irina Karamanos, de 32 a?os, novia del presidente chileno Gabriel Boric, asumi¨® el pasado marzo el papel de primera dama con el compromiso de reformular y despersonalizar esa figura. Esta semana se hizo p¨²blico que el 30 de marzo, a trav¨¦s de una resoluci¨®n, el Gabinete de la Primera Dama pas¨® a llamarse Gabinete Irina Karamanos y ampli¨® sus funciones. El Gobierno progresista recul¨® en menos de 24 horas desde que estall¨® la pol¨¦mica tras recibir un alud de cr¨ªticas de distintos sectores pol¨ªticos. El partido de derecha Uni¨®n Dem¨®crata Independiente (UDI) llev¨® el caso a la Contralor¨ªa, solicitando que se pronuncie sobre la legalidad de la resoluci¨®n.
La Moneda calific¨® el asunto como un ¡°error administrativo¡± y Boric intent¨® este viernes zanjar el tema. ¡°Est¨¢ absolutamente superado, corregido, y la disposici¨®n y el trabajo que est¨¢ llevando adelante Irina es lo que se se?al¨® en campa?a¡±, asegur¨®. La oficina de Karamanos rechaz¨® la solicitud de una entrevista a este peri¨®dico.
¡°No soy ni primera, ni dama. En ese sentido, pienso que hay que salir de ese t¨¦rmino conservador y clasista¡±, dijo Karamanos en una entrevista a los pocos d¨ªas de asumir el cargo, suscitando un inter¨¦s mayor sobre el vuelco que le dar¨ªa. La resoluci¨®n enmendada establec¨ªa que, entre sus funciones, podr¨ªa ¡°identificar, proponer y coordinar lineamientos estrat¨¦gicos y definiciones program¨¢ticas para pol¨ªticas p¨²blicas con el objeto de aportar a la erradicaci¨®n de la desigualdad y la discriminaci¨®n de grupos hist¨®ricamente excluidos, con enfoque interseccional, de derechos humanos y perspectiva de g¨¦nero¡±.
El Gobierno inform¨® el mi¨¦rcoles el reemplazo del nombre del Gabinete Irina Karamanos, que ten¨ªa registrado un dominio en internet, por Coordinaci¨®n Sociocultural de la Presidencia. Las funciones establecidas sobre el cargo, que no est¨¢ definido, regulado, ni es remunerado ¡ªal igual que en la mayor¨ªa de las democracias¡ª, tambi¨¦n sufrieron modificaciones. Se elimin¨®, por ejemplo, la coordinaci¨®n y definiciones program¨¢ticas de pol¨ªticas p¨²blicas, uno de los puntos que desat¨® m¨¢s cr¨ªticas en la oposici¨®n por considerar que podr¨ªa influir en el Ejecutivo.
Mar¨ªa de los ?ngeles Fern¨¢ndez, doctora en Ciencia Pol¨ªtica y presidenta de la Fundaci¨®n Hay Mujeres, le achaca el ¡°patinazo grande¡± a la ¡°falta de experiencia¡±. ¡°No es el ¨²nico error administrativo que comete el Gobierno en su corto andar. El riesgo es que, si todo empieza a ser un error administrativo, se empieza a perder credibilidad¡±. Apunta que las primeras damas que han precedido a Karamanos han avanzado en pol¨ªticas p¨²blicas por la v¨ªa de los hechos, no por decreto. Por ejemplo, la exprimera dama Cecilia Morel, esposa de Sebasti¨¢n Pi?era, impuls¨® el programa Elige Vivir Sano, enfocado en combatir la malnutrici¨®n. ¡°Pero Irina lo declar¨® y no puede sortear los conductos regulares del Congreso¡±, a?ade Fern¨¢ndez.
Antes de asumir el liderazgo de las seis fundaciones de la red sociocultural de la Presidencia que le corresponden al rol de la primera dama, Karamanos era la encargada del frente feminista del partido Convergencia Social, donde milita Boric, y trabajaba en la Fundaci¨®n Procultura, dedicada a generar oportunidades de desarrollo en territorios aislados. Fern¨¢ndez asegura que le llam¨® la atenci¨®n positivamente que Karamanos quisiera reformular el cargo desde la igualdad de g¨¦nero. ¡°Pens¨¦ que iba a seguir trabajando en la fundaci¨®n, que acompa?ar¨ªa al presidente cuando lo requiriera en temas espec¨ªficos, pero que seguir¨ªa teniendo su soberan¨ªa personal y profesional. Pero no ha sido as¨ª¡±, sostiene la polit¨®loga.
Para Carolina Guerrero, doctora en Ciencia Pol¨ªtica y autora de investigaciones centradas en primeras damas, la modificaci¨®n del nombre y abitruciones fue un ¡°error¡±. ¡°El problema de se?alar que se iba a reformar el cargo fue que se generaron expectativas de que iba a cumplir un rol totalmente distinto y hasta ahora reci¨¦n est¨¢n viendo qu¨¦ hay en la oficina para despu¨¦s pensar en algunos cambios¡±, explica. La investigadora asociada al GIGA Institute for Latin American Studies en Alemania se?ala que el papel de la primera dama ha sido cuestionado desde un principio por una parte del feminismo al decir que es un trabajo de ¡°ser la esposa de¡±, y que por ende no deber¨ªa existir.
¡°La segunda alternativa¡±, plantea Guerrero, ¡°es transformarlo, incluir la mirada feminista y la coordinaci¨®n interministerial sin que se solapen las labores¡±. Sin embargo, la polit¨®loga a?ade que es muy pronto para hacer una valoraci¨®n del trabajo de Karamanos. ¡°Me imagino que el programa se empezar¨¢ a ver un poco m¨¢s adelante¡±, agrega.
En los tres meses y medio que lleva la nueva Administraci¨®n, Karamanos ha dedicado sus esfuerzos a aumentar la transparencia y la descentralizaci¨®n en las fundaciones presidenciales que lidera, y ha llevado una agenda fuerte en temas relacionados a los pueblos originarios. La antrop¨®loga ha levantado mesas de trabajo para fomentar los derechos ling¨¹¨ªsticos y de las personas LGTBI. Esta ¨²ltima, en coordinaci¨®n con el Ministerio de la Mujer y Equidad de G¨¦nero.
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