El Gobierno de Boric intenta asegurar el tim¨®n pese al contundente triunfo de la derecha
Los resultados del domingo en Chile, que auparon al Partido Republicano como primera fuerza del pa¨ªs y dejaron a la izquierda sin poder de veto en el Consejo Constitucional, ponen en riesgo la agenda de reformas de La Moneda
Los resultados de las elecciones del domingo en Chile han dejado al Gobierno de Gabriel Boric nuevamente contra las cuerdas. Hace ocho meses, en septiembre pasado, el rechazo contundente por un 62% a una propuesta de nueva Constituci¨®n represent¨® una gran derrota para la Administraci¨®n de izquierdas, que hab¨ªa apostado por un texto que cambiaba profundamente la institucionalidad chilena. En esta ocasi¨®n, la derrota en las elecciones del Consejo Constitucional que redactar¨¢ una nueva propuesta de Ley Fundamental no tom¨® a La Moneda por sorpresa, aunque la magnitud del avance del Partido Republicano, de la extrema derecha, no era esperada. La fuerza nacida en 2019 se convirti¨® en el principal partido de Chile, con casi 3,5 millones de votos, lo que representa el 35% de una elecci¨®n con alta participaci¨®n (85%). Con 23 esca?os, casi la mitad del ¨®rgano (de un total de 51), queda en una posici¨®n holgada para liderar las conversaciones constitucionales, aunque el Partido Republicano nunca ha sido partidario de cambiar el texto redactado en 1980, en la dictadura de Augusto Pinochet.
Lo que realmente preocupa en el Gobierno de Boric, sin embargo, apunta a la complejizaci¨®n de las conversaciones en el Parlamento, donde esta Administraci¨®n tiene menos de tres a?os para aprobar una serie de reformas de gran importancia, como la tributaria y la de pensiones. El Partido Republicano le ha sacado por primera vez una amplia ventaja a la derecha tradicional ¨Ccompuesta por los partidos UDI, RN y Ev¨®poli¨C, que alcanz¨® un 21% y 11 consejeros (menos de la mitad). Era el escenario que quer¨ªan evitar en La Moneda, que no solo no tiene mayor¨ªa en la C¨¢mara de Diputados y en el Senado, sino que a la alta fragmentaci¨®n del Poder Legislativo (existen 21 partidos entre los diputados y una gran cantidad de independientes que fueron electos por determinadas fuerzas pol¨ªticas, pero que renunciaron con el pasar de los meses). El endurecimiento de las posturas de la derecha tradicional, producto del liderazgo de los republicanos, representa un nuevo obst¨¢culo para la tramitaci¨®n de leyes de suma relevancia para la Administraci¨®n de Boric, a la que le quedan dos a?os y 10 meses de gesti¨®n.
En noviembre pasado, la ministra del Interior, Carolina Toh¨¢, aseguraba en una entrevista con EL PA?S: ¡°Hay cosas que este Gobierno va a lograr y que lo van a dejar muy bien parado en la historia¡± y hablaba de una reforma tributaria sustantiva, una reforma a las pensiones y de una nueva Constituci¨®n. ¡°Va a lograr mucho m¨¢s que eso, pero si solo lograra estas tres cosas, ser¨ªa de los gobiernos m¨¢s realizadores que ha tenido Chile¡±, comentaba Toh¨¢, que entr¨® al Ejecutivo justamente tras el fiasco del proceso constituyente anterior. Luego de septiembre, el Ejecutivo chileno realiz¨® una gran moderaci¨®n de sus expectativas, se comenz¨® a hablar una y otra vez de di¨¢logo y los propios ministros se mostraron abiertos a una mayor negociaci¨®n. Ana Lya Uriarte, que era la ministra socialista que hasta hace algunas semanas llevaba las relaciones con el Congreso ¨Cfue reemplazada por una enfermedad de larga recuperaci¨®n¨C, aseguraba a este peri¨®dico que los di¨¢logos en el Congreso avanzaban ¡°con mucha fuerza, pero tambi¨¦n con capacidad de di¨¢logo y apertura a una deliberaci¨®n democr¨¢tica¡±. ¡°Buscamos f¨®rmulas que nos permitan cumplir con los objetivos que nos hemos planteado, pero acogiendo miradas, planteamientos y puntos de vista distintos¡±, dec¨ªa Uriarte en enero pasado.
Pero el escenario se ha complicado nuevamente para el Gobierno por el tsunami republicano y la amenaza del endurecimiento de las posturas de la derecha tradicional en el Congreso, un ¨®rgano muy sensible a los nuevos escenarios. El presidente del Senado, Juan Antonio Coloma, uno de los rostros hist¨®ricos de la UDI, de la derecha cl¨¢sica, asegur¨® ayer que ¡°los efectos pol¨ªticos son inevitables¡±. ¡°M¨¢s all¨¢ de que fue una elecci¨®n de constituyentes, obviamente tiene un efecto pol¨ªtico, porque se trata de una manifestaci¨®n muy clara de voluntad¡±, asegur¨® Coloma, que defiende que la agenda legislativa del Gobierno se concentre en derrotar la inseguridad ciudadana y en el empleo y crecimiento econ¨®mico. Interlocutor clave de La Moneda en el Parlamento, el senador no nombr¨® ni la reforma tributaria ni de pensiones, que han tenido un largo y complejo debate.
El 28% que obtuvo la lista oficialista en las elecciones del domingo, que le permitir¨¢ tener 16 consejeros ¨Ccon lo que no alcanza los 21 que le permit¨ªan el poder de veto dentro del Consejo Constitucional¨C, dificulta empujar dentro asuntos relevantes para la izquierda chilena, como la consolidaci¨®n de un Estado social y que derechos como la educaci¨®n y la salud est¨¦n consagrados y garantizados constitucionalmente, no de forma predominante en manos del mercado.
Es el segundo aspecto que preocupa al Gobierno de Boric, al margen de las reformas en curso que busca llevar adelante antes de que se acabe el mandato en marzo de 2026. El presidente ha defendido la necesidad de una nueva Constituci¨®n para Chile que supere a la de 1980 escrita en la dictadura de Augusto Pinochet ¨Cse ha repetido incansablemente que el objetivo apunta a contar con una nueva Ley Fundamental al finalizar el Gobierno¨C, pero podr¨ªa tratarse de un texto conservador y con mayores trabas que el actual. En esa circunstancia, ?defender¨¢ el mandatario una propuesta que ni se acercar¨ªa a lo que la izquierda so?aba en 2019 o, por el contrario, llamar¨ªa a rechazarla en el plebiscito de diciembre? Incluso antes del contundente triunfo de la derecha extrema, algunos intelectuales y grupos pol¨ªticos de izquierda intentaron desembarcarse de este segundo intento constituyente.
El mi¨¦rcoles se realizar¨¢ un c¨®nclave oficialista en la residencia presidencial de Cerro Castillo, en Vi?a del Mar, con la presencia de todos los presidentes de los partidos que respaldan al Gobierno. Si bien p¨²blicamente el Ejecutivo de Boric ha se?alado que no se torcer¨¢ el rumbo, como dijo la portavoz Camila Vallejo a EL PA?S, el batacazo ha sido tan grande que resulta impensable que no tenga consecuencias en La Moneda.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.