El castillo de los espa?oles que a¨²n resiste

Justo cien a?os despu¨¦s de jugar su primer partido oficial en estadio propio, el Santa Laura, la Uni¨®n Espa?ola empat¨® en el mismo recinto con Colo Colo. El partido se jug¨® en penumbras porque las muchas luminarias del recinto est¨¢n malas, con la cancha a la miseria y un aforo limitado a 5.000 personas. Solo 250 apoyaban al rival.

El 13 de mayo de 1923 los hispanos inauguraban el estadio m¨¢s fiel del f¨²tbol chileno y hoy el m¨¢s antiguo. All¨ª hubo piscina, vel¨®dromo y muchas veces se instalaron canchas de b¨¢squetbol, cuadril¨¢teros de boxeo, pistas de patinaje, escenarios art¨ªsticos y pol¨ªticos, estanques de bautizo, y alguna vez, el 1931, se organiz¨® una corrida de toros. El espect¨¢culo taurino se despleg¨® ante el presidente de la Rep¨²blica Esteban Montero y pese a que lo prohib¨ªa la Constituci¨®n.

El recinto, al cual se accede a trav¨¦s de la peque?a r¨¦plica de un castillo, ha sido protagonista de partidos de la selecci¨®n chilena, de vibrantes pleitos por Copa Libertadores y ha visto coronarse a muchos campeones. Tan valioso es su aporte a la competencia, que sus dos principales remodelaciones en el siglo fueron financiadas por la federaci¨®n de f¨²tbol nacional, que considera indispensable su funcionamiento.

Ahora, a la espera de la improbable aprobaci¨®n de un proyecto de remodelaci¨®n que suma dos torres de departamentos al recinto enclavado en el popular barrio de Independencia, a pasos del metro, el estadio ve reducida su trascendencia por la falta de mantenimiento. All¨ª son -o deber¨ªan ser locales- la Uni¨®n Espa?ola, las Universidades de Chile y Cat¨®lica, adem¨¢s de Recoleta, un cuadro de la segunda divisi¨®n. Y all¨ª deber¨ªan haber jugado sus partidos internacionales Magallanes, Palestino y Audax Italiano, si la pelota pudiera rodar normalmente y los espectadores vieran lo que pasa en cancha con est¨¢ndares lum¨ªnicos adecuados.

Los a?os terminados en tres son favorables para la Uni¨®n Espa?ola, club formado por inmigrantes un 18 de mayo de 1897. Fund¨® su estadio en 1923, fue campe¨®n por primera vez en 1943, inici¨® un ciclo dorado de tres t¨ªtulos en 1973, gan¨® la Copa Chile en 1993 y conquist¨® su ¨²ltimo t¨ªtulo el 2013, por lo que -al menos cabal¨ªsticamente- pod¨ªa ilusionarse esta temporada, aunque el p¨²blico ya no llegue como antes ni los fan¨¢ticos sean tan fieles como cuando la instituci¨®n agrupaba a la colonia.

La Uni¨®n fue uno de los fundadores del torneo nacional, en 1933. Pero debi¨® entrar en receso en 1939 debido a la Guerra Civil en Espa?a y la divisi¨®n dentro de los descendientes en Chile. Ya entonces luc¨ªa en su camiseta el ?guila de San Juan, s¨ªmbolo del franquismo, lo que llev¨® al pintor Jos¨¦ Balmes -quien lleg¨® a Chile a bordo del Winnipeg, el barco para refugiados ib¨¦ricos que gestion¨® Pablo Neruda- a declarar que el equipo no les representaba a todos.

As¨ª surgi¨® la leyenda de otro club, el Iberia, fundado en 1933 con la esperanza de reunir a la fanaticada republicana de la colonia, especialmente tras elegir presidente al sacerdote catal¨¢n Gilberto Lizana. Una historia que desmiente Jos¨¦ Antonio Marino, autor del libro del Centenario del Santa Laura y profundo conocedor de la historia del club. ¡°Eso no es exacto. El equipo no fue fundado por espa?oles, sino por comerciantes de la Vega Central (el mercado de la capital) y llevaba por nombre Iberia porque su auspiciador era una f¨¢brica de alpargatas. Y el ?guila de San Juan era el s¨ªmbolo de la Uni¨®n Espa?ola desde 1935, antes que Franco la utilizara en Espa?a¡±.

Como sea, el tema ya no distrae, y se cuenta con lugares de reuni¨®n como el Estadio Espa?ol, en una de las zonas acomodadas de Santiago, y el C¨ªrculo Espa?ol, elegante edificio al centro de la capital. La Uni¨®n en tanto ha ganado siete t¨ªtulos nacionales, fue finalista de la ¨²ltima Copa Chile y ya acumula 13 participaciones en la Copa Libertadores, siendo subcampe¨®n en 1975.

El partido inaugural que el equipo jug¨® hace un siglo frente al Santiago F.C. termin¨®, igual que hoy, empatado. Y de mala forma adem¨¢s. Un sector del p¨²blico, encolerizado por el cobro de un penal, invadi¨® el campo de juego para agredir al ¨¢rbitro Luis Roaltti. S¨®lo la intervenci¨®n de Rosendo de Santiago, uno de los 23 espa?oles fundadores de la instituci¨®n, impidi¨® una tragedia, en una de las mil historias que guarda el Santa Laura, un estadio conocido en Chile como ¡°La Catedral¡±. No por su imponente estructura o por la devoci¨®n con que se resguarda la historia, sino porque all¨ª se ha hecho rito la liturgia del f¨²tbol por m¨¢s de 100 a?os.