Ana Tijoux: ¡°Chile siempre duele, esa es su gracia y su desgracia¡±
La rapera francochilena conversa con EL PA?S sobre su primer libro ¡®Sacar la voz¡¯, un relato ¨ªntimo y terap¨¦utico donde libera miedos, preguntas y nostalgias y reflexiona sobre el tr¨¢nsito de Chile. Sobre el Gobierno de Boric, dice: ¡°Est¨¢n gobernando con miedo¡±
El pasado 9 de mayo, Ana Tijoux sorprendi¨® a los 12.000 espectadores que presenciaban el concierto de Alicia Keys en el Movistar Arena de Santiago de Chile. Casi al cierre del espect¨¢culo, la rapera francochilena subi¨® al escenario para interpretar una extracto de 1977, el tema con el que salt¨® a la fama internacional, en medio de la canci¨®n Girl on fire de la cantante estadounidense. Las dos artistas cantaron y bromearon en medio de la ovaci¨®n del p¨²blico.
Una semana y media m¨¢s tarde, Tijoux volvi¨® a subirse a un escenario. Esta vez, se trataba de una cita m¨¢s ¨ªntima: el lanzamiento de su primer libro Sacar la Voz (Penguin Random House, 2023), que escribi¨® durante los ¨²ltimos dos a?os.
Son pasadas las cuatro y media de la tarde y Anamar¨ªa Tijoux Merino (Lille, Francia, 45 a?os) llega caminando, sin prisa, al Teatro Oriente, ubicado en el municipio de Providencia, en la zona oriente Santiago. Saluda y sube a los camarines. Afuera sus fan¨¢ticos, de diferentes edades, ya la esperan ansiosos, apostados en las escalinatas del teatro. La artista, que cautiv¨® a Thom Yorke, David Byrne y Iggy Pop ¨Ceste ¨²ltimo la destac¨® entre las mejores cantantes de rap del globo y la sum¨® a su show en Chile en 2016¨C, se instala en el tocador que perteneci¨® al actor y director teatral chileno, Tom¨¢s Vidiella, una habitaci¨®n con paredes pintadas de un rojo oscuro, con espejos biselados de marcos dorados y fotograf¨ªas antiguas que transportan a otra ¨¦poca. Viste pantal¨®n y chaqueta de jeans y un gorro de lana naranjo que hace juego con sus zapatillas. Muy rapera. M¨¢s tarde subir¨¢ al escenario con un elegante traje de dos piezas blanco y zapatillas fucsia, un renovado look con pelo corto desordenado del que ya hab¨ªa dado algunas pistas junto a Alicia Keys.
Habla r¨¢pido como en sus canciones, con esa voz inconfundible, entre suave y susurrante. Y conversa sobre su libro, sobre los cajones que abre en cada una de sus p¨¢ginas y de lo diferente que fue escribir con soltura sin preocuparse de si las palabras sonaban bien o mal, como le sucede cuando compone las letras de sus canciones. ¡°Esto fue sin p¨²blico, sin ensayo, sin instrumentos, sin aplausos, sin luces, sin noches, sin cambios de horario. Fue bac¨¢n [chilenismo de ¡®muy bueno¡¯] estar sola con el computador. Me encant¨® ese lugar de meterme hacia adentro para excavar y excavar¡±, dice.
Ana narra sin pudores ni convenciones partes de su ni?ez, su adolescencia, su encuentro con la m¨²sica, con la sexualidad, su experiencia con la maternidad. Habla de desamores, revive conversaciones y libera sus miedos, sus ansiedades y angustias. ¡°He sentido terror varias veces mientras hago un disco. Un p¨¢nico inexplicable. Como un se?or se instala en el sof¨¢ de mala manera. Prende su cigarro sin apuro. Afina su cerebro brillando oscuridad evidente y sigue fumando. Sudo fr¨ªo¡±, escribe sobre su proceso creativo.
El libro fue tambi¨¦n una manera de viajar hacia adentro, de encontrarse con sus ¡°semitonos¡±, dice a EL PA?S. Los ¨²ltimos no fueron a?os f¨¢ciles para Ana Tijoux. Una de las raperas m¨¢s influyentes de Latinoam¨¦rica se enfrent¨® a la muerte de dos de sus medios hermanos: Tania en 2019, de c¨¢ncer, y luego Patricio en 2021, de covid. Sacar la voz, dice, fue tambi¨¦n un ejercicio terap¨¦utico de darse permiso para llorar: ¡°Sacar para afuera, entender la muerte y sobre todo la ausencia. Y hacer un ir para atr¨¢s, c¨®mo fueron mis relaciones tanto de pareja, como con mis padres, conmigo misma, c¨®mo me veo, c¨®mo me siento¡±.
A sus 45 a?os, reconoce que siente la fragilidad de la vida. ¡°Uno va envejeciendo. Se nos est¨¢n poco a poco enfermando los amigos, partiendo los familiares. La vida se te va entre los dedos. Cuando tienes 20 a?os te sientes invencible¡±, se lamenta. Y luego r¨ªe: ¡°Suena clich¨¦, me estoy pegando un Ricardo Arjona con todas sus letras, pero son esos ejercicios necesarios de la vida. Entonces uno vuelve a la ni?ez personal con los viejos, los pap¨¢s, y a la ni?ez de los hijos. Todo se revuelca en la misma ola¡±, cuenta mientras mira a un punto fijo en la habitaci¨®n evocando esos recuerdos.
Tambi¨¦n escudri?a en su relaci¨®n con Chile, un pa¨ªs que reci¨¦n conoci¨® a los seis a?os, a comienzos de los a?os ochenta, cuando viaj¨® sola desde Francia para conocer a sus familiares, y con el cual mantiene una relaci¨®n compleja, marcada por el exilio de sus padres en dictadura. ¡°Chile es ese lugar extra?o donde cobijo la extra?ez, tan solitario como maltratador, donde me siento fuera de encuadre¡±, escribe en las primeras p¨¢ginas de su libro.
Ana ya no vive en Chile. Parti¨® a Francia poco antes del estallido social de 2019 en Chile a cuidar a su hermana, se separ¨® de su pareja, volvi¨® al pa¨ªs sudamericano para la pandemia, donde estuvo cinco meses confinada, antes de volver a emprender vuelo, esta vez a Barcelona, ciudad a que lleg¨® invitada por un amigo y que la cautiv¨®. All¨¢, dice, disfruta de sus conversaciones con Salvador, su amigo librero, sextagenario, y de compartir con personas de otras edades y profesiones. ¡°Aqu¨ª, (en Chile) est¨¢ todo muy segmentado: los raperos con los raperos, los acad¨¦micos con los acad¨¦micos. Y, adem¨¢s, subsegmentado por la edad¡±. Aun as¨ª, dice que echa de menos a su gente, y que es probable que vuelva a vivir en Sudam¨¦rica.
¡°Chile es un pa¨ªs terremoteado, esquizofr¨¦nico, bipolar, entre depresivo y euf¨®rico. Es como su geograf¨ªa, sus placas tect¨®nicas son como sus personalidades¡±, dice a este peri¨®dico, teorizando sobre los acontecimientos de los ¨²ltimos a?os. ¡°Cuando veo este Chile post elecciones del 7 de mayo y esta crisis pol¨ªtica, le digo a mis amigos: ¡®Hay una crisis pol¨ªtica mundial. Lo que pasa es que Chile mira a Chile nom¨¢s¡±. Tijoux piensa, sin embargo, que, m¨¢s all¨¢ del contexto internacional, ¡°Chile siempre duele, esa su gracia y su desgracia¡±.
Contestataria, antisistema, de izquierda, Tijoux escribe en su libro sobre el 18 de octubre de 2019, cuando lanz¨® Cacerolazo, la canci¨®n que termin¨® transform¨¢ndose en una especie de himno de las protestas sociales. Y tambi¨¦n escribe sobre el 4 de septiembre de 2022, el d¨ªa del plebiscito en que gan¨® el Rechazo al nuevo texto constituyente, en un fracaso para la izquerda. ¡°Me siento otra vez ni?a, me siento otra vez extranjera. Se perdi¨® la Convenci¨®n Constituyente. No se perdi¨® solo una votaci¨®n, gan¨® una vez m¨¢s la turbulencia de la impunidad y el olvido¡±, anota.
Sentada de piernas y brazos cruzados en el camerino color rojo, reflexiona unos segundos y confiesa: ¡°Voy a decir algo terrible: yo me imaginaba que iba a quedar la cag¨¢ [el desastre]¡±. Se refiere a lo que ha pasado en Chile despu¨¦s del estallido social. ¡°Hab¨ªa rasgos que dec¨ªan que algo iba a pasar: la alta oligarqu¨ªa chilena jam¨¢s iba a permitir que se tocaran los bolsillos de quienes dirigen este pa¨ªs. Es que siempre ha sido dado vuelta Chile¡±. Habla del triunfo del Partido Republicano, de extrema derecha, en la ¨²ltima elecci¨®n del 7 de mayo, donde los conservadores obtuvieron el 35,5% de los votos y consiguieron 23 de los 51 consejeros que escribir¨¢n la nueva propuesta de Constituci¨®n. Y dice: ¡°No hay que tener miedo, hay que dar la pelea ahora m¨¢s que nunca, sin desplomarse. Ellos son gente pensante, son, entre comillas, enemigos brillantes, y eso los hace extremadamente peligrosos. Hay que ser m¨¢s brillante que ellos, yo lo veo como un tablero de ajedrez pol¨ªtico¡±, afirma.
El contrapeso para Tijoux, en todo caso, no est¨¢ en el actual Gobierno. La artista conoci¨® al presidente Gabriel Boric y algunos de los actuales ministros en la ¨¦poca cuando iba a tocar a la Universidad de Chile y ellos eran dirigentes estudiantiles, pero dice que no son amigos. La autora del single feminista Antipatriarca es cr¨ªtica con la actual Administraci¨®n: ¡°Est¨¢n gobernando con miedo y creo que mucha gente lo est¨¢ sintiendo. Ac¨¢ dominan las corporativas, ac¨¢ gobierna la oligarqu¨ªa¡±. Y agrega: ¡°A m¨ª la gente del poder nunca me ha atra¨ªdo mucho¡±. El tiempo de entrevista se termina. Ana se para, se despide, dice que no quiere fotos y que ya es hora de empezar a prepararse. El show debe empezar.
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