El programa estatal chileno de cuidados domiciliarios al debe: alcanza solo al 2,9% de la poblaci¨®n objetivo
Un estudio del Hogar de Cristo, que adelanta en exclusiva a EL PA?S, revela la falta de pol¨ªticas p¨²blicas efectivas en el ¨¢rea y propone nuevas f¨®rmulas. En 2022, el periodo analizado, se atendi¨® a 1.515 personas de 52.125
Una investigaci¨®n del Hogar de Cristo, una fundaci¨®n dedicada a las personas gravemente vulneradas en sus derechos y que ha sido adelantada en exclusiva a EL PA?S, ha analizado las pol¨ªticas p¨²blicas en torno a los cuidados en Chile. El estudio muestra que el programa de Cuidados Domiciliarios del Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama), estatal, alcanz¨® en 2022, el periodo que ha sido analizado, solo al 2,9% que lo requiere: se atendi¨® a 1.515 personas de una poblaci¨®n objetivo de 52.125.
Los datos son alarmantes si se considera que el envejecimiento de la poblaci¨®n va acompa?ado de un mayor ¨ªndice de dependencia. Al respecto, el estudio describe que si en 2020 en Chile exist¨ªan 4,2 personas mayores dependientes por cada 100 personas no dependientes, en el a?o 2050 se estima que esta cifra aumentar¨¢ a 12,7. Actualmente, el 22% de las personas mayores (798.282) tienen dependencia funcional en alguno de sus grados. As¨ª, el bajo piso con el que se comienza en materia de cuidados es m¨¢s preocupante si actualmente el n¨²mero de personas mayores en el pa¨ªs sudamericano corresponde al 18% de la poblaci¨®n total y, seg¨²n estimaciones del Instituto Nacional de Estad¨ªsticas (INE), este porcentaje llegar¨ªa a un 32% en 2050.
El documento ?D¨®nde envejecer? Est¨¢ndares de calidad en la atenci¨®n domiciliaria para personas mayores en Chile, que ser¨¢ presentado el 3 de julio, corresponde al volumen n¨²mero seis de su serie de investigaciones que llevan por nombre Del dicho al derecho.¡±El escenario actual es que Chile est¨¢ envejeciendo. Las pol¨ªticas para atender a las personas mayores todav¨ªa son escasas y no comprendemos a¨²n la diversidad que existe en ese mundo. Por eso nos pareci¨® muy relevante poder profundizar en mejorar ese quehacer con el foco en las personas mayores y en los cuidados¡±, dice Liliana Cort¨¦s, directora social nacional del Hogar de Cristo.
La publicaci¨®n se?ala que las pol¨ªticas p¨²blicas a nivel mundial est¨¢n promoviendo el envejecimiento en el lugar, es decir, que las personas mayores puedan permanecer en sus hogares por el mayor tiempo posible, y que por eso es relevante priorizar los cuidados domiciliarios. ¡°La mayor¨ªa de las personas mayores quieren envejecer en su casa, con las cosas que han cuidado por muchos a?os. ?D¨®nde quieres envejecer? Es a es una pregunta de derecho¡±, enfatiza Cort¨¦s.
Ante la crisis de los cuidados en el pa¨ªs sudamericano, el Hogar de Cristo ve con optimismo el anuncio del presidente Gabriel Boric en su Cuenta P¨²blica del 1 de junio pasado de la creaci¨®n de un Sistema Nacional de Cuidados que busca, de aqu¨ª al 2026, atender en sus hogares a las 75 mil personas con dependencia severa que est¨¢n inscritas en el Registro Social de Hogares. El objetivo del estudio del Hogar de Cristo, explican en la instituci¨®n, es ser de ayuda para la implementaci¨®n de la pol¨ªtica p¨²blica: ¡°Viene a entregar caminos y propuestas concretas de c¨®mo hacer que el Sistema Nacional de Cuidados logre concretizarse y logre perdurar en el tiempo¡±, dice la directora social.
Mujeres cuidadoras
La publicaci¨®n muestra que a nivel mundial existe una feminizaci¨®n del envejecimiento, lo que coincide con el escenario a nivel de Chile: para el periodo 2015-2020 la esperanza de vida para las mujeres fue de 82,1 a?os y 77,3 a?os para los hombres, seg¨²n datos del Observatorio Social del Ministerio de Desarrollo Social.
El cuidado en Chile es un ¨¢rea que se ha dejado a cargo de las mujeres. En el pa¨ªs sudamericano un 70,5% de las personas cuidadoras son mujeres y la mayor¨ªa pertenece al rango de edad que va desde los 45 a?os hasta los 74 a?os, seg¨²n datos del Ministerio de Desarrollo Social. ¡°En Chile la pobreza todav¨ªa tiene rostro de mujer. La mayor¨ªa de las personas cuidadoras son mujeres y, una gran parte de ellas, son adultas mayores. Con ese antecedente, lo que vemos es una cuidadora que, posiblemente, no logr¨® salir al mundo del trabajo y, por los roles m¨¢s patriarcales de nuestra cultura, se ve forzada a cumplir con este papel¡±, comenta Liliana Cort¨¦s.
Desde el Hogar de Cristo explican que la corresponsabilidad es parte de la soluci¨®n y que en esta tarea debe incorporarse al Estado, al mercado, a la familia y a la comunidad: ¡°No se trata solamente de que me ayuden a cuidar a alguien sino que, m¨¢s bien, es la posibilidad de compartir la responsabilidad de cuidar a otro¡±, explica la directora social nacional.
En el envejecimiento existe tambi¨¦n una brecha con respecto al nivel de ingresos: la esperanza de vida y las condiciones de bienestar en la vejez est¨¢n positivamente correlacionadas con los ingresos y el nivel educacional, afirma la investigaci¨®n. El 28% de las personas mayores con dependencia funcional en Chile pertenecen al quintil de ingresos m¨¢s pobres y el 12% al quintil m¨¢s alto, seg¨²n la Encuesta de Discapacidad y Dependencia (ENDIDE) de 2022 de la cartera de Desarrollo Social. ¡°Es muy importante entender que no todas las personas mayores van a requerir de estos sistemas de cuidados, sino que lo requieren con mayor fuerza las personas que est¨¢n m¨¢s abandonadas hoy en nuestro pa¨ªs. Son quienes viven en mayor vulneraci¨®n de derechos y pobreza¡±, puntualiza Liliana Cort¨¦s
La investigaci¨®n tambi¨¦n presenta modelos para mejorar el actual programa de Cuidados Domiciliarios del Senama que, adem¨¢s de tener una baja cobertura, no toma en cuenta el nivel de dependencia de las personas. Los dos escenarios propuestos por el Hogar de Cristo categorizan a la poblaci¨®n seg¨²n un nivel de dependencia leve, moderado y severo y, de acuerdo a esta clasificaci¨®n, aumentan la cantidad de horas de cuidados domiciliarios y considera un mayor n¨²mero de asistentes de apoyo. El programa actual del Senama considera un gasto de $318.000 pesos chilenos per c¨¢pita real mensual (unos 330 d¨®lares). En cambio, las propuestas del Hogar de Cristo tienen un costo de $394.000 pesos chilenos per c¨¢pita real al mes (unos 416 d¨®lares) y $504.000 (unos 530 d¨®lares) per c¨¢pita real mensual.
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