?Y si el coronavirus hubiese llegado a todos los pa¨ªses por igual?
Una simulaci¨®n muestra que Espa?a se encontraba entre los pa¨ªses m¨¢s vulnerables del mundo por su poblaci¨®n envejecida y la convivencia estrecha de j¨®venes y mayores
El dem¨®grafo Albert Esteve ha imaginado un mundo paralelo, en el que el coronavirus no surgi¨® en China y tampoco se expandi¨® de manera caprichosa en funci¨®n del turismo y otros negocios. En el planeta ficticio de Esteve, alguien ha ido casa por casa en 81 pa¨ªses inoculando el virus al 10% de la poblaci¨®n al azar. Los resultados de sus simulaciones ¡ªque tienen en cuenta la edad de la poblaci¨®n y la convivencia de j¨®venes y mayores en un mismo hogar¡ª muestran que unos pa¨ªses eran mucho m¨¢s vulnerables que otros. Algunos eran un polvor¨ªn. ¡°Espa?a ten¨ªa las papeletas para sufrir mucho por sus caracter¨ªsticas demogr¨¢ficas. Somos muy vulnerables¡±, resume Esteve, director del Centro de Estudios Demogr¨¢ficos, en la Universidad Aut¨®noma de Barcelona.
Los pa¨ªses m¨¢s vulnerables al coronavirus eran Italia, Grecia, Portugal, Francia, Austria y Espa?a, seg¨²n las simulaciones del equipo de Esteve, publicadas en la prestigiosa revista cient¨ªfica PNAS. En ese mundo imaginario en el que el coronavirus se distribuy¨® de manera homog¨¦nea, Italia ser¨ªa el pa¨ªs m¨¢s afectado, con 120 muertes directas por cada 100.000 habitantes. Espa?a tendr¨ªa 101. Estados Unidos, 80. Brasil, 47. M¨¦xico, 46. Y Sud¨¢n del Sur, uno de los pa¨ªses con la poblaci¨®n m¨¢s joven del mundo, tendr¨ªa apenas 19 fallecimientos directos. Aunque sus gobiernos hubiesen realizado las mismas pol¨ªticas, el virus habr¨ªa matado directamente hasta seis veces m¨¢s en unos pa¨ªses que en otros.
Los resultados tienen implicaciones para las pol¨ªticas p¨²blicas. En pa¨ªses como Francia y EE UU, donde los ancianos viven mayoritariamente solos o con otras personas de su edad, no ser¨ªa tan necesario blindar los colegios para evitar la transmisi¨®n del virus en los ni?os. Sin embargo, en pa¨ªses como Banglad¨¦s, con los j¨®venes conviviendo con los ancianos en un mismo hogar, s¨ª podr¨ªa ser m¨¢s importante intentar evitar que los ni?os se infecten, para que no lleven el virus a casa. ¡°Pa¨ªses como Grecia, Italia, Portugal y Espa?a se enfrentan a un doble desaf¨ªo. La combinaci¨®n de una poblaci¨®n envejecida y la convivencia intergeneracional conduce a unas altas tasas estimadas de mortalidad debido a la covid-19, pero tambi¨¦n hace que prevenir la transmisi¨®n del virus dentro del hogar sea especialmente complejo¡±, advierten los autores del an¨¢lisis. ¡°Hay evidencias de que la mayor¨ªa de los contagios se dan dentro del hogar¡±, alerta Esteve.
¡°La convivencia intergeneracional ha determinado mucho las diferencias entre Espa?a y Alemania¡±, opina el dem¨®grafo Enrique Acosta
En Espa?a, el 55% de las personas de m¨¢s de 80 a?os que no viven solas comparten hogar con otra persona de menos de 65 a?os, seg¨²n los datos del padr¨®n manejados por el dem¨®grafo. El grupo de Esteve ya realiz¨® en abril una simulaci¨®n similar con las provincias espa?olas. Seg¨²n sus resultados de entonces, el 65% de las muertes por contagios dentro del hogar en Espa?a estar¨ªan inducidas por personas menores de 65 a?os.
El nuevo estudio tambi¨¦n calcula la mortalidad indirecta que causar¨ªan los contagios dentro de casa a partir de ese 10% inicial de infectados. Los resultados var¨ªan enormemente por pa¨ªses, en funci¨®n del tama?o y la estructura por edad de los hogares. En Suiza, con una poblaci¨®n envejecida y aislada, la mortalidad directa ser¨ªa de 85 por cada 100.000 habitantes, mientras que la indirecta ser¨ªa de 68. En Banglad¨¦s, con ciudadanos muy j¨®venes y en contacto con sus abuelos, la mortalidad directa ser¨ªa de 34 y la indirecta alcanzar¨ªa los 100. Los contagios dentro del hogar generar¨ªan m¨¢s muertes que los contagios fuera de ellos.
¡°Suiza es muy interesante. Las muertes directas miden el nivel de envejecimiento del pa¨ªs, porque si seleccionas un 10% de la poblaci¨®n suiza al azar, como es un pa¨ªs envejecido, mucha gente mayor morir¨ªa. Ahora bien, como en Suiza mucha gente mayor vive sola, dentro del hogar no est¨¢n expuestos a que otros le contagien la enfermedad¡±, expone Esteve. Su an¨¢lisis muestra que en Espa?a la mortalidad indirecta alcanzar¨ªa las 119 personas por cada 100.000 habitantes, frente a las 101 muertes directas, por esa mayor convivencia de j¨®venes y ancianos.
¡°Esta simulaci¨®n, como ejercicio intelectual, es muy interesante. Aporta mucha informaci¨®n a la aplicaci¨®n de pol¨ªticas p¨²blicas¡±, opina Enrique Acosta, un dem¨®grafo colombiano del Instituto Max Planck, en Rostock (Alemania). ¡°La edad es importante, pero tambi¨¦n lo es el tema de la convivencia intergeneracional. Yo creo que eso ha determinado mucho, por ejemplo, las diferencias entre Espa?a y Alemania. Tenemos una estructura de edad parecida, con una poblaci¨®n muy envejecida, pero en un lugar el virus tiene un impacto muy fuerte en la mortalidad y en el otro el impacto es mucho m¨¢s ligero¡±, razona Acosta, que tambi¨¦n destaca decisiones pol¨ªticas, como la r¨¢pida actuaci¨®n con testeos masivos en Alemania.
En otro art¨ªculo en la revista PNAS, el equipo de Acosta apunta a otros factores ¡ªcomo la prevalencia de enfermedades cr¨®nicas y el acceso a un buen sistema p¨²blico de salud¡ª que explicar¨ªan por qu¨¦ el coronavirus provoca resultados tan distintos en cada pa¨ªs. ¡°La simulaci¨®n del equipo de Esteve pone en evidencia que Espa?a estaba en una situaci¨®n muy vulnerable. Aunque se hubieran tomado las mismas medidas que en Alemania, el impacto del coronavirus habr¨ªa sido m¨¢s fuerte¡±, recalca Acosta.
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