Los anticuerpos que protegen contra el coronavirus duran por lo menos siete meses

La sangre de miles de personas acaba de aportar buenas noticias en uno de los frentes m¨¢s cruciales en la guerra contra el nuevo coronavirus: la inmunidad natural.

Desde el comienzo de la pandemia una de las preguntas m¨¢s acuciantes ha sido c¨®mo de efectiva es la inmunidad que tiene una persona tras superar la infecci¨®n y, sobre todo, cu¨¢nto tiempo dura. Es una pregunta angustiosa porque para responderla hay que esperar, a pesar de la urgencia pand¨¦mica. Lo mismo sucedi¨® con el SARS en 2002: al principio se dudaba de que hubiese inmunidad duradera. Ahora sabemos que la gente que pas¨® el virus segu¨ªa teniendo anticuerpos 12 a?os despu¨¦s.

En los ¨²ltimos d¨ªas se han publicado casos de unas pocas personas reinfectadas por SARS-CoV-2, incluidas algunas que han sufrido una enfermedad m¨¢s grave la segunda vez. Los anticuerpos son prote¨ªnas del sistema inmune que se unen al virus e impiden que este infecte m¨¢s c¨¦lulas. Varios estudios de hace meses mostraban que los anticuerpos decaen a los pocos meses de la infecci¨®n en personas con enfermedad leve, incluido el estudio serol¨®gico que se realiz¨® en Espa?a. ?Est¨¢n entonces protegidos los que superan la primera infecci¨®n?

Seg¨²n los datos de uno de los mayores estudios realizados hasta la fecha sobre este tema, lo m¨¢s probable es que s¨ª; y esa protecci¨®n mediada por anticuerpos dura al menos siete meses.

¡°Nuestro estudio demuestra que es posible generar inmunidad duradera contra este virus¡±, explica Deepta Bhattacharya investigador del Centro de C¨¢ncer de la Universidad de Arizona (EE UU) y coautor del trabajo, que ser¨¢ publicado en la revista Immunity. ¡°En las infecciones moderadas que hemos analizado la respuesta de anticuerpos parece bastante convencional; los niveles de estas prote¨ªnas suben al principio y luego bajan, pero despu¨¦s se estabilizan¡±, a?ade. Las reinfecciones, advierte, son casos ¡°excepcionales¡±.

Cuando el SARS-CoV-2 entra en nuestro organismo se inicia una compleja respuesta del sistema inmune que tarda unas dos semanas en completarse y que involucra a millones de c¨¦lulas de todo el cuerpo. Algunas de ellas son sofisticad¨ªsimas: pueden recordar para siempre a un pat¨®geno y desarrollar las armas moleculares para destruirlo, incluidos diferentes tipos de anticuerpos de gran potencia.

"No tenemos una bola de cristal para saber cu¨¢nto duran los anticuerpos, pero basados en lo que sabemos de otros coronavirus esperamos que la respuesta inmune se mantenga al menos un a?o y probablemente mucho m¨¢s¡±

El estudio de Arizona surge de una campa?a masiva de test en la que participaron 30.000 personas. El estudio se ha centrado en los datos de casi 6.000 de ellas y ha analizado la producci¨®n de anticuerpos neutralizantes en m¨¢s de 1.000.

La prevalencia de infecciones es baja, con lo que solo se han hallado unas 200 personas que hab¨ªan pasado la infecci¨®n y hab¨ªan producido anticuerpos neutralizantes, explica Bhattacharya. Lo m¨¢ximo que el equipo ha conseguido retroceder en el tiempo para ver cu¨¢nto duran los anticuerpos son esos siete meses, pues la epidemia de coronavirus lleg¨® relativamente tarde a este Estado. ¡°Solo hemos podido analizar a seis personas que se hab¨ªan infectado hace entre cinco y siete meses, pero tenemos muchas m¨¢s que lo hicieron hace entre tres y cinco meses. No tenemos una bola de cristal para saber cu¨¢nto duran los anticuerpos, pero basados en lo que sabemos de otros coronavirus esperamos que la respuesta inmune se mantenga al menos un a?o y probablemente mucho m¨¢s¡±, explica Bhattacharya.

El equipo de EE UU cree que los datos previos que apuntaban a que los anticuerpos decaen pronto se debe a que analizaron un tipo de c¨¦lulas del plasma sangu¨ªneo que son las primeras en acudir tras una infecci¨®n, pero que tienen una vida corta. Se trata de c¨¦lulas capaces de segregar anticuerpos no muy espec¨ªficos, como los IgM. Tiempo despu¨¦s entra en juego un segundo tipo de c¨¦lulas sangu¨ªneas m¨¢s longevas que acuden a los centros germinales, una especie de cuarteles generales de la inmunidad localizados en los ganglios y el bazo donde reciben ant¨ªgenos del nuevo virus que les permiten identificarlo con mucha m¨¢s precisi¨®n y desarrollar anticuerpos mucho m¨¢s espec¨ªficos, los famosos IgG.

Entre esta segunda oleada de anticuerpos hay una tropa de ¨¦lite dirigida contra la prote¨ªna que diferencia al nuevo coronavirus de otros de su clase: la esp¨ªcula. Esta protuberancia con forma de pincho que sobresale de su envoltura es la encargada de encajar en el receptor de las c¨¦lulas humanas para abrirlas, adue?arse de su maquinaria biol¨®gica y comenzar a reproducirse sin freno. Esto supone el inicio de una infecci¨®n, con s¨ªntomas o sin ellos. En una minor¨ªa de casos, la entrada del virus genera una respuesta desproporcionada del sistema inmune que puede acabar provocando la muerte.

El equipo de Arizona ha analizado dos de estos anticuerpos capaces de unirse a diferentes regiones de la esp¨ªcula y bloquear as¨ª su entrada en las c¨¦lulas. Este tipo de anticuerpos han demostrado en el laboratorio poder frenar la expansi¨®n del virus de una forma mucho m¨¢s efectiva que los que atacan a la prote¨ªna N ¡ªnucleoc¨¢pside¡ª, situada en el interior del pat¨®geno con el fin de proteger su genoma y facilitar su copia una vez ha entrado en la c¨¦lula.

En Espa?a, el estudio serol¨®gico mostr¨® que los anticuerpos contra el coronavirus deca¨ªan unos tres meses despu¨¦s de la infecci¨®n en cuatro de cada 10 infectados con s¨ªntomas leves. Lo mismo sucedi¨® en otros estudios en otros pa¨ªses. El problema ¡ªargumentan ahora los investigadores estadounidenses¡ª es que esos estudios midieron solo anticuerpos contra la prote¨ªna N. En su trabajo muestran que los anticuerpos contra la esp¨ªcula y la parte de esta que entra en contacto con las c¨¦lulas humanas (RBD) son mucho m¨¢s duraderos.

La ausencia de este tipo de anticuerpos duraderos puede explicar los casos mortales de covid-19, seg¨²n muestra un reciente estudio coordinado por dos de los mejores hospitales de Boston (EE UU). Los pacientes que acaban falleciendo no generan cuerpos germinales, y por tanto no llegan a producir anticuerpos neutralizantes especializados, seg¨²n ha demostrado el an¨¢lisis de 17 pacientes de covid muy grave, incluidos 11 fallecidos cuyos bazos y ganglios se analizaron en autopsias. Sin esta tropa de ¨¦lite, la respuesta inmune se tuerce y el cuerpo comienza a generar una cascada de prote¨ªnas inflamatorias que acaban produciendo un desenlace fatal.

Estos hallazgos tienen importantes implicaciones para la efectividad de las vacunas. La mayor¨ªa de las m¨¢s avanzadas se basan en generar inmunidad contra varias partes de la esp¨ªcula del virus. ¡°Hay algunos casos en los que la respuesta inmune que genera la vacuna es superior a la de la infecci¨®n normal, por ejemplo la del papiloma humano, pero en general la efectividad de las vacunas es mayor cuando el propio sistema inmune es capaz de barrer al virus por s¨ª solo. Creo que varias de las vacunas m¨¢s avanzadas ser¨¢n efectivas, solo queda esperar a que acaben los ensayos y analicemos en detalle los datos de seguridad¡±, concluye Bhattacharya", explica.

Desde el comienzo de la pandemia casi 30 millones de personas han superado la infecci¨®n gracias a su sistema inmunitario. ¡°Con los estudios acumulados hasta ahora lo l¨®gico es pensar que nuestra respuesta inmunitaria contra el coronavirus nos protege¡±, opina Marcos L¨®pez, presidente de la Sociedad Espa?ola de Inmunolog¨ªa. ¡°Aunque hay reinfecciones, estas son anecd¨®ticas y en algunos casos de reinfecci¨®n no se hab¨ªa hecho un estudio previo para saber si en la primera infecci¨®n no hubo una respuesta inmune adecuada¡±, resalta.

El trabajo de EE UU pone en entredicho la utilidad de algunos test de anticuerpos comerciales, explica Carmen C¨¢mara, inmun¨®loga del hospital La Paz, en Madrid. ¡°Los test que solo valoran los anticuerpos contra la prote¨ªna N, como el de Abbott, pueden estar dando negativo cuando a¨²n quedan anticuerpos neutralizantes contra la prote¨ªna S [la esp¨ªcula]¡±, resalta.