¡°No hay una bala de plata contra la pandemia¡±: as¨ª se reforzaron los sistemas de salud en los pa¨ªses con mejores resultados
Actuar r¨¢pido, por consenso, ampliar plantillas de sanitarios, fortalecer infraestructuras, ayudar a los vulnerables, implicar a la sociedad y adaptarse a nuevas evidencias son algunas de las medidas que tomaron los pa¨ªses que menos da?o sufrieron por la covid
El nuevo coronavirus cambi¨® el curso del a?o 2020, y desde entonces se han buscado insistentemente soluciones milagrosas, errores clave y factores que por s¨ª solos cambiar¨ªan el devenir la pandemia. Sin embargo, el trabajo de los especialistas muestra una y otra vez que nunca hubo balas de plata: remedios prodigiosos que resolvieran la crisis en cualquier momento o lugar. La revista Nature Medicine publica ahora un estudio que vuelve a insistir en esta idea: los gobiernos que dieron mejor respuesta acometieron m¨²ltiples intervenciones en muchos ¨¢mbitos, atentos a las nuevas evidencias cient¨ªficas y protegiendo a los profesionales, para mejorar la fortaleza de sus sistemas de salud. El art¨ªculo es el resultado de las investigaciones del panel independiente designado por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) para examinar la respuesta global e institucional a la pandemia.
¡°Nuestro estudio sugiere que no hay una sola medida que funcione, sino que hace falta que introduzcamos una serie de medidas y que estas est¨¦n bien coordinadas¡±, explica la especialista en salud p¨²blica Helena Legido-Quigley, coautora de este estudio y componente del panel independiente. Para este estudio pusieron la lupa en 28 pa¨ªses, tambi¨¦n Espa?a; y los dividieron en tres bloques en funci¨®n de la cantidad de muertos por 100.000 habitantes que han sufrido: los que mejor resultado han tenido (como Vietnam y Tailandia), los que peores cifras tienen (EE UU, Brasil, Reino Unido o M¨¦xico) y los que han tenido un saldo intermedio (Singapur o Jap¨®n, por ejemplo). La experta se?ala que los Estados que mejor respondieron actuaron decididamente y de inmediato, sus gobiernos estuvieron bien coordinados y con consenso entre los diferentes niveles, y tambi¨¦n procedieron r¨¢pidamente a asignar m¨¢s recursos financieros y humanos a la salud p¨²blica y la asistencia sanitaria.
¡°Despu¨¦s de a?os de recortes, [Espa?a] ten¨ªa unas plantillas debilitadas y han tenido que hacer un esfuerzo tit¨¢nico para paliar y dar el mejor servicio posible¡±Helena Legido-Quigley, Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres
El factor humano es uno de los que m¨¢s se resaltan en este estudio, que cont¨® con entrevistas con muchos de los profesionales que actuaron en primera l¨ªnea de respuesta. ¡°Los sistemas de salud resilientes manejan las crisis contando con una fuerza laboral adecuada, capacitada y dispuesta¡±, se?ala el an¨¢lisis. Y a?ade: ¡°La plantilla de sanitarios en los pa¨ªses de alto rendimiento se ampli¨® mediante la reasignaci¨®n y la contrataci¨®n y cont¨® con apoyos financieros y sociales¡±. El estudio se?ala muchas actuaciones que se pusieron en marcha en los pa¨ªses mejor parados para proteger a sus profesionales, como ampliar plantillas (incluso recurrir a estudiantes y jubilados), reorganizar turnos para evitar horas extendidas sin descanso, otorgar permisos para la recuperaci¨®n f¨ªsica y mental, proveer alojamiento cerca de sus lugares de trabajo para proteger a sus familias y cuidado de sus hijos.
Legido-Quigley destaca la importancia de estos apoyos financieros, sociales y psicol¨®gicos, junto con una formaci¨®n continua, para que las plantillas estuvieran en condiciones de hacer frente a la pandemia. ¡°Los profesionales de la salud han tenido que hacer unos esfuerzos incre¨ªbles en situaciones muy dif¨ªciles siendo la parte m¨¢s positiva de esta pandemia junto con la colaboraci¨®n cient¨ªfica y el descubrimiento de la vacuna¡±, asegura la experta, de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres. Pero advierte del peligro de un desgaste que todav¨ªa se da hoy en d¨ªa: ¡°En nuestros encuentros con enfermeras de todo el mundo, muchas reconoc¨ªan cansancio emocional y mencionaban que estaban pensando dejar la profesi¨®n¡±. Tambi¨¦n ha funcionado implicar a la sociedad civil en la respuesta, como en pa¨ªses africanos y asi¨¢ticos, como Tailandia, que cuenta con una red de un mill¨®n de trabajadores comunitarios que han desarrollado tareas cruciales de salud p¨²blica.
En cuanto a la infraestructura para cuidar de los enfermos, el estudio se?ala que en todo el mundo se han empleado tres enfoques comunes para ampliarla r¨¢pidamente: mediante la construcci¨®n de nuevas instalaciones, la reconversi¨®n de lugares p¨²blicos y la reconfiguraci¨®n de las instalaciones m¨¦dicas existentes para atender a los pacientes con covid. Ninguna de estas opciones es mejor o peor por s¨ª misma, porque el an¨¢lisis deja claro que no basta con invertir dinero si el sistema es ineficaz: ¡°Es importante destacar que los resultados de la inversi¨®n en salud y bienestar son tan buenos como las estructuras que los respaldan¡±, resume el estudio. Eso s¨ª, la financiaci¨®n actual en la mayor¨ªa de pa¨ªses no es insuficiente, seg¨²n Legido-Quigley.
¡°La plantilla de sanitarios en los pa¨ªses de alto rendimiento se ampli¨® mediante la reasignaci¨®n y la contrataci¨®n y cont¨® con apoyos financieros y sociales¡±Estudio de 'Nature'
El estudio se?ala que las ¡°similitudes entre pa¨ªses con resultados de salud divergentes dejan en claro que no hay una ¨²nica bala de plata para un sistema de salud resiliente¡±. Sin embargo, s¨ª hay una serie de caracter¨ªsticas comunes de los pa¨ªses con buen rendimiento. Por ejemplo, que ¡°aprendieron de la evidencia que iba surgiendo y adaptaron la capacidad de su sistema de salud en respuesta a la evoluci¨®n de la situaci¨®n epidemiol¨®gica¡±. Tambi¨¦n hubo elementos importantes con respecto a la situaci¨®n de la que part¨ªan los distintos pa¨ªses. Por ejemplo, aquellos que hab¨ªan sufrido epidemias como el ¨¦bola, el MERS y el SARS contaban con ventaja porque sus sistemas de salud hab¨ªan aprendido con la experiencia. En el otro extremo, las medidas de austeridad de los a?os previos a la pandemia afect¨® a su desempe?o en otros estados. Algunos de estos pa¨ªses ten¨ªan un sistema ¡°m¨¢s debilitado¡± y ¡°las plantillas estaban reducidas debido a los recortes¡±, se?ala Legido-Quigley.
Espa?a, que figura entre los pa¨ªses con peores resultados, contaba con un buen sistema, pero debilitado por las medidas de austeridad, seg¨²n Legido-Quigley: ¡°Despu¨¦s de a?os de recortes, ten¨ªa unas plantillas debilitadas y han tenido que hacer un esfuerzo tit¨¢nico para paliar y dar el mejor servicio posible¡±. Sin embargo, el estudio reconoce algunas acciones tomadas por Espa?a como reciclar m¨¦dicos de otras especialidades para aumentar la capacidad de atenci¨®n de personas con covid grave y que se considere accidente laboral la infecci¨®n de los sanitarios en contacto con enfermos. Adem¨¢s, el estudio aplaude a los pa¨ªses que han adoptado medidas de apoyo econ¨®mico para empresas, para proteger los puestos de trabajo o para los hogares de bajos ingresos, porque ¡°ayudan a las personas a adherirse a las pautas de salud p¨²blica, con el objetivo de prevenir infecciones y, a su vez, mitigar la tensi¨®n en el sistema de salud¡±.
El efecto de la pandemia ha puesto de manifiesto los puntos donde el sistema es m¨¢s d¨¦bil, por eso estos expertos proponen una transformaci¨®n sist¨¦mica de los sistemas de salud, para que se centren en la resiliencia, las personas y en combatir las desigualdades en salud. ¡°La salud es m¨¢s que atenci¨®n m¨¦dica y se necesita un enfoque desde todo el gobierno para crear poblaciones saludables capaces de prevenir y responder colectivamente a las crisis, sin dejar a nadie atr¨¢s¡±, afirma Legido-Quigley. Y termina: ¡°Aunque la atenci¨®n primaria necesita m¨¢s inversi¨®n, est¨¢ demostrando su capacidad para organizar uno de los mejores sistemas de vacunaci¨®n, gracias a ser un sistema p¨²blico y al liderazgo de las enfermeras, a las que vamos a tener que cuidar mucho como ellas han hecho con nosotros¡±.
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