La calidad del esperma de los humanos ha bajado a la mitad en el ¨²ltimo medio siglo

Los hombres van a tener problemas para ser f¨¦rtiles en apenas una d¨¦cada, de seguir este ritmo: la cantidad de espermatozoides por eyaculaci¨®n no ha dejado de bajar desde hace casi un siglo. Su concentraci¨®n tambi¨¦n ha bajado a menos de la mitad que hace 50 a?os, acerc¨¢ndose al umbral de la infertilidad. Y el ritmo del descenso se ha acelerado en lo que va de siglo, dobl¨¢ndose. Son los datos alarmantes de un trabajo con estudios de 53 pa¨ªses. Los autores de la investigaci¨®n no se han adentrado en las causas, pero se?alan a determinados h¨¢bitos de vida y la exposici¨®n de contaminantes qu¨ªmicos ya desde el feto.

En 2017, este peri¨®dico publicaba un art¨ªculo titulado La calidad del esperma de los occidentales ha bajado a la mitad en 40 a?os. El estudio que se publica este martes que el problema no es solo de estadounidenses, australianos y europeos. Entonces no ten¨ªan suficientes datos del resto de las regiones del mundo para determinar la fertilidad global de los hombres. Ahora, los autores de aquel trabajo han publicado un nuevo estudio ya con registros de pa¨ªses de los cinco continentes. La nueva investigaci¨®n, que incluye datos de Latinoam¨¦rica, ?frica y Asia, muestra que el declive del esperma est¨¢ siendo mundial.

¡°Ahora podemos decir que la cantidad del esperma ha ca¨ªdo a la mitad en los ¨²ltimos 50 a?os, globalmente, no solo el de los occidentales¡±

Hagai Levine, profesor de la Universidad Hebrea de Jerusal¨¦n

Hagai Levine, profesor de la Universidad Hebrea de Jerusal¨¦n y principal autor del trabajo, cuenta en un correo en referencia al titular del art¨ªculo de 2017: ¡°Ahora podemos decir, seg¨²n los datos disponibles en la actualidad: La cantidad del esperma ha ca¨ªdo a la mitad en los ¨²ltimos 50 a?os, globalmente, no solo el de los occidentales¡±. La investigaci¨®n que lidera, publicada en Human Reproduction Update, muestra que el n¨²mero de espermatozoides (concentraci¨®n esperm¨¢tica) ha pasado de 101 millones por cada mililitro a 49 millones por mililitro desde 1973, fecha de los primeros estudios disponibles. La cantidad total tambi¨¦n ha tenido un descenso acusado, pasando de 335,7 millones por eyaculaci¨®n a 126,6 millones en 2018, ¨²ltimo a?o disponible.

El trabajo muestra otro dato tan inquietante como intrigante: el ritmo de descenso se est¨¢ acelerando. Mientras que desde 1973, la concentraci¨®n esperm¨¢tica ha bajado a un ritmo anual del 1,16%, desde 2000 lo ha hecho a una velocidad del 2,64%. Al ver otros a?os del periodo, se confirma la aceleraci¨®n: desde 1985, el ritmo era del 1,31% y ya en 1995, subi¨® a 1,90% al a?o. De seguir esta tendencia, en apenas una d¨¦cada, la cantidad de espermatozoides podr¨ªa bajar del umbral m¨ªnimo a partir del cual cuesta m¨¢s tener hijos. ¡°Los hombres pueden ser considerados subf¨¦rtiles con concentraciones esperm¨¢ticas inferiores a los 40 mill/ml e inf¨¦rtiles por debajo de los 15 mill/ml¡±, dec¨ªa el doctor Levine en el art¨ªculo de 2017.

Jaime Mendiola, coautor del estudio y profesor de Medicina Preventiva y Salud P¨²blica de la Universidad de Murcia, dice que es esta aceleraci¨®n lo que m¨¢s les preocupa. ¡°No sabemos si va a ir a m¨¢s¡±, afirma. Sobre las causas del declive mundial de espermatozoides, todo son hip¨®tesis. Mendiola recuerda que, sin ser el objetivo de su estudio, ¡°se ha se?alado a la exposici¨®n a qu¨ªmicos y contaminantes ambientales que provocar¨ªa una disrupci¨®n hormonal del eje hipot¨¢lamo-hip¨®fisis-g¨®nadas que interferir¨ªa en la producci¨®n esperm¨¢tica¡±. Este investigador dice que adem¨¢s de los malos h¨¢bitos de vida y condicionantes actuales, hay que mirar hacia atr¨¢s, ¡°a la exposici¨®n prenatal; cuando estamos en el feto es la ¨¦poca cr¨ªtica para el desarrollo testicular¡±. As¨ª que la crisis se estaba gestando desde hac¨ªa d¨¦cadas.

La profesora Shanna Swan, de la Escuela Icahn de Medicina de Mount Sinai (EE UU), recuerda en una nota que los recuentos esperm¨¢ticos bajos no solo afectan a la fertilidad de los varones, sino que tambi¨¦n tienen importantes consecuencias para la salud masculina en general, y est¨¢n relacionados con otras tendencias adversas, denominadas gen¨¦ricamente s¨ªndrome de disgenesia testicular. ¡°El inquietante declive en los recuentos y la concentraci¨®n esperm¨¢tica de m¨¢s del 1% por a?o mostrados en nuestro trabajo son consistentes con las tendencias adversas en otras patolog¨ªas del var¨®n, tales como el c¨¢ncer testicular, las alteraciones hormonales y los defectos cong¨¦nitos genitales¡±. Mendiola a?ade que se han establecido conexiones entre la mala calidad esperm¨¢tica y ¡°un aumento de la mortalidad y la morbilidad, adem¨¢s de un descenso de la esperanza de vida¡±.

El director de innovaci¨®n de la Fundaci¨®n IVI, uno de los mayores grupos de reproducci¨®n asistida, Nicol¨¢s Garrido, valora la relevancia del estudio: ¡°Lo han hecho expertos de talla mundial y lo han publicado en una revista de referencia¡±. El grupo IVI, con presencia en varios pa¨ªses, tiene datos de primera mano. Publicaron en 2019 un trabajo con datos sobre la calidad del esperma de casi 120.000 hombres. ¡°Lo nuestro son los problemas de infertilidad. Entonces nos hicimos una pregunta, ?los hombres son cada vez m¨¢s inf¨¦rtiles? Con datos de nuestras cl¨ªnicas de Estados Unidos y Espa?a desde hace 20 a?os, vimos que el porcentaje de se?ores con ausencia de espermatozoides ha ido en aumento¡±. Y se plantearon una segunda cuesti¨®n, ?esto tiene relevancia cl¨ªnica? ¡°Hay tratamientos diferentes seg¨²n la gravedad del problema y hemos comprobado que los tratamientos de reproducci¨®n asistida son cada vez m¨¢s complejos debido a la menor calidad del esperma¡±.

¡°Sospechamos que la exposici¨®n temprana del embri¨®n/feto y el ni?o a contaminantes con actividad hormonal, disruptores endocrinos, tiene mucho que ver¡±

Nicol¨¢s Olea, catedr¨¢tico de la Universidad de Granada

Sobre las causas, Garrido reconoce el problema para se?alar al culpable o culpables. ¡°Sabemos que tiene que ver con nuestros h¨¢bitos de vida y con nuestra exposici¨®n a contaminantes, pero no somos ratas a las que poder aislar en el laboratorio para averiguar el papel de cada factor, y estamos expuestos a muchos factores ambientales¡±. Menciona incluso el posible y parad¨®jico papel de las cl¨ªnicas de fertilidad. ¡°Llevamos 40 a?os ayudando a las parejas a tener hijos, pero en el caso de los problemas de origen gen¨¦tico, es probable que haci¨¦ndolo estemos trasladando el problema a la siguiente generaci¨®n¡±, dice. En todo caso, la infertilidad de base gen¨¦tica supone un porcentaje menor en el total del problema.

El catedr¨¢tico de la Universidad de Granada Nicol¨¢s Olea, uno de los que m¨¢s ha investigado sobre la calidad del esperma en Espa?a, coincide con los autores del estudio y con Garrido en lo complicado que es determinar las causas exactas del problema, pero tiene sus supuestos culpables: ¡°Sospechamos que la exposici¨®n temprana del embri¨®n/feto y el ni?o a contaminantes con actividad hormonal, disruptores endocrinos, tiene mucho que ver¡±. De hecho, su grupo ha publicado recientemente varios trabajos sobre la presencia de disruptores endocrinos en la leche materna en Espa?a.

Lo malo de todo esto es que, como dicen Olea, Garrido, Levine o Mendiola, la doble exposici¨®n a contaminantes, tanto en el ¨²tero como en la edad adulta, es un problema complejo y, ahora confirmado, mundial. Lo bueno es que los mismos humanos que han creado el problema, pueden solucionarlo. Levine hace un llamamiento urgente ¡°a la acci¨®n global para promover entornos m¨¢s saludables para todas las especies y reducir las exposiciones y los comportamientos que amenazan nuestra salud reproductiva¡±.

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