Notre Dame fue la primera catedral que us¨® hierro en su construcci¨®n

La catedral de Notre Dame de Par¨ªs fue el edificio m¨¢s alto de su tiempo. Arrasada por el fuego en abril de 2019, el incendio de la ic¨®nica seo ha permitido descubrir uno de sus secretos: el uso del hierro en su construcci¨®n. Los maestros canteros que la levantaron en el siglo XII usaron miles de grandes grapas met¨¢licas que ayudaron a sostener una estructura tan elevada formada por grande bloques de piedra sin que se viniera abajo. La dataci¨®n del metal indica que el metal se us¨® ya en el inicio de la construcci¨®n. Los grandes edificios posteriores, sobre todo las catedrales g¨®ticas, introdujeron la innovaci¨®n de Notre Dame en sus muros.

Un grupo de cient¨ªficos especializados en la llamada arqueometalurgia ha tenido la ocasi¨®n de estudiar de cerca las grapas de Notre Dame. Solo les han permitido analizar una docena, algunas desprendidas por culpa del fuego. Pero el incendio ha dejado a la vista decenas en las tribunas (el segundo nivel de la catedral) y otras tantas de los muros superiores. Maxime L¡¯H¨¦ritier, historiador medieval de la Universidad de Par¨ªs 8 y experto en historia de la construcci¨®n, dice que, contando las visibles y accesibles contaron 280. ¡°Pero incluyendo las que no se pod¨ªan ver en los mismos niveles o incrustadas en la mamposter¨ªa de la cornisa ajedrezada, ser¨ªan unos miles de grapas en total¡±.

¡°Incluyendo las que no se pod¨ªan ver en los niveles o incrustadas en la mamposter¨ªa de la cornisa ajedrezada, ser¨ªan unos miles de grapas¡±

Maxime L¡¯H¨¦ritier, historiador medieval de la Universidad de Paris 8

La fundici¨®n moderna del hierro no surgi¨® hasta el siglo XIX, pero desde la antig¨¹edad, se us¨® carb¨®n casi siempre vegetal en hornos para trabajar y forjar el hierro de espadas, armaduras, arados y utensilios dom¨¦sticos. En ese proceso, parte del carbono del carb¨®n interacciona con el metal, dando lugar a lo que siglos m¨¢s tarde ser¨ªa el acero. L¡¯H¨¦ritier y sus colegas aprovecharon este proceso llamado carburizaci¨®n para aplicar la t¨¦cnica de dataci¨®n por radiocarbono a las grapas. Tal y como publican en la revista cient¨ªfica PLoS ONE, las de las tribunas son de en torno al 1160 y hay otras de varias d¨¦cadas despu¨¦s. El obispo de Par¨ªs, Maurice de Sully inici¨® las obras en 1163, as¨ª que las fechas encajan. La catedral ya estaba casi terminada un siglo despu¨¦s, pero hubo que esperar a 1345 para darla por finalizada.

La presencia de estas grapas ya en las fases iniciales de construcci¨®n revela, para L¡¯H¨¦ritier, la relevancia del hierro en la base de las catedrales g¨®ticas. ¡°Diversos materiales met¨¢licos (de hierro o bronce) ya se utilizaban ocasionalmente en templos o teatros antiguos¡±, reconoce el historiador franc¨¦s. Por ejemplo, el Coliseo de Roma tiene grapas met¨¢licas. ¡°Sin embargo, el tipo de construcci¨®n es muy diferente, con enormes bloques de piedra sin argamasa. Las grapas solo se utilizaban con fines de construcci¨®n (para mantener la alineaci¨®n de los bloques de piedra). En Notre Dame y otras iglesias g¨®ticas se busca la altura y la esbeltez de las construcciones. Todos los materiales de construcci¨®n y elementos de la arquitectura, por lo tanto, juegan un papel din¨¢mico en la b¨²squeda de la estabilidad. As¨ª que, el uso de grapas para unir algunos de los bloques de piedra que probablemente eran sometidos a fuerzas extremas es verdaderamente innovador¡±, explica en un correo.

Los canteros y arquitectos que levantaron la catedral hasta una altura de 32 metros en la nave central y 69 metros las dos torres utilizaron las grapas para poder elevarla tan alto. ¡°El hierro proporciona diversos tipos de refuerzos. Parece que en muchos casos tiene un papel importante para la fase de construcci¨®n, cuando el edificio no est¨¢ totalmente apuntalado y cargado¡±, cuenta L¡¯H¨¦ritier. Las grapas no son como uno se las imagina (ver fotografia). Se trata de barras de hierro de hasta un metro y cuatro kilogramos de peso, que un¨ªan dos bloques entre s¨ª. En la catedral parisina, las han encontrado en las piedras de los muros superiores, las tribunas y el coro, lo que no descarta que tambi¨¦n las usaran en la planta inferior. ¡°Notre Dame parece ser la primera iglesia g¨®tica en hacer uso de estos elementos de hierro¡±, a?ade el cient¨ªfico galo.

Habr¨ªa que esperar al siglo XIII para que las otras grandes catedrales francesas, como las de Reims o Chartres, usaran tambi¨¦n el hierro siguiendo la estela de la catedral de Par¨ªs. Ya en el siglo XIV, catedrales como la de Praga o la de Mil¨¢n recurren al hierro. Tambi¨¦n aparece en edificios no religiosos, como los palacios papales de Roma o el ch?teau de Vincennes, el castillo de los reyes franceses, reflejo de su emergente poder. Pero los tiempos parecen haber cambiado y el metal, escondido en Notre Dame, ya se muestra, siendo visibles las partes de hierro de los edificios.

El an¨¢lisis detallado de las grapas arroja tanto nuevas certezas como incertidumbres. En su composici¨®n, adem¨¢s de hierro, hay peque?as cantidades de una docena de materiales (cerio, europio, niobio...). La distinta ratio de elementos les ha permitido a los investigadores asegurar que el material con el que se hicieron las grapas ven¨ªa de, al menos, seis puntos distintos de Europa.

En cuanto al misterio, ¡°antes de nuestros an¨¢lisis, esper¨¢bamos que estas grapas de 3-4 kg habr¨ªan sido hechas a partir de una sola pieza, ya que la producci¨®n de hierro en la ¨¦poca medieval puede producir f¨¢cilmente tal cantidad de hierro en un solo horno; sin embargo, las soldaduras muestran que casi todas las grapas fueron forjadas ensamblando varias piezas¡±, cuenta L¡¯H¨¦ritier. Pero no saben a qu¨¦ se debe. Podr¨ªa ser una muestra de recuperaci¨®n y reciclaje de un material que no era barato y asequible entonces, ¡°pero nos parece extra?o que una construcci¨®n tan rica como la de Notre Dame usara exclusivamente hierro reciclado¡±, recuerda el historiador franc¨¦s. Y a?ade: ¡°No hemos aclarado esto todav¨ªa, pero continuamos nuestros an¨¢lisis con nuevos juegos de grapas que se est¨¢n retirando durante la restauraci¨®n y buscamos averiguar de d¨®nde viene el hierro¡±.

¡°Los constructores deb¨ªan de usar el hierro para intentar reducir los movimientos de las piedras, para darle estabilidad¡±

Roc¨ªo Maira Vidal, investigadora del Instituto de Historia del Centro de Ciencias Humanas y Sociales (CSIC)

Para Roc¨ªo Maira Vidal, investigadora del Instituto de Historia del Centro de Ciencias Humanas y Sociales (CSIC), ¡°los constructores deb¨ªan de usar el hierro para intentar reducir los movimientos de las piedras, para darle estabilidad¡±. Era como una acci¨®n preventiva, ¡°si se produc¨ªa alguna grieta o desplazamiento, les daba una falsa sensaci¨®n de seguridad, de estabilidad¡±, a?ade la tambi¨¦n arquitecta, que public¨® en 2021 un libro sobre los costes de las construcciones medievales. Lo que niega Vidal es que utilizaran el hierro para mantener ¡°la estructura mientras constru¨ªan la catedral¡±.

Vidal recuerda que el hierro ten¨ªa y tiene un problema, que se oxida. Y cuando el hierro se oxida, en un proceso acelerado por el agua presente en la argamasa usada para fijarlo a la roca, revienta lo que haya alrededor, aprision¨¢ndolo, como se puede observar en muchas malas construcciones costeras. Vidal est¨¢ convencida de que los arquitectos de Notre Dame lo sab¨ªan. La tambi¨¦n restauradora del patrimonio menciona los casos de la Abad¨ªa de Westminster, donde se ha coronado a los reyes ingleses durante siglos, y la Santa Capilla de Par¨ªs, ambas construidas d¨¦cadas despu¨¦s que Notre Dame: ambas tuvieron que ser restauradas. A la abad¨ªa le quitaron todas las grapas met¨¢licas al siglo siguiente.

Pero en Notre Dame, ¡°la mayor¨ªa de las grapas de las muros superiores se est¨¢n reutilizando en la restauraci¨®n en marcha¡±, destaca L¡¯H¨¦ritier. As¨ª que no deben estar muy oxidadas. Los problemas de corrosi¨®n del hierro pudieron ser conocidos, pero la catedral de Par¨ªs parece que pudo esquivarlos. Como a?ade el cient¨ªfico franc¨¦s, a?adir plomo a los materiales de hierro frena la oxidaci¨®n y m¨¢s si se produce un buen sellado. ¡°As¨ª que no creo que los constructores se preocuparan por la oxidaci¨®n del hierro¡±, termina.

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