Las momias egipcias de gatos guardan el secreto de c¨®mo se convirtieron en mascotas
Un proyecto europeo analiza el ADN de m¨²ltiples restos arqueol¨®gicos de estos felinos para aclarar la nueva teor¨ªa de que comenzaron a ser domesticados hace m¨¢s de 10.000 a?os, mucho antes del Antiguo Egipto
Aunque seguramente no sorprenda a los due?os de gatos, que conocen sobradamente la naturaleza enigm¨¢tica e independiente de sus queridas mascotas, se ha descubierto que el proceso de domesticaci¨®n de los felinos es bastante menos convencional que el de otros animales. ¡°Los gatos son, en cierto modo, muy particulares, ya que se han adaptado mucho a los humanos, pero sin realmente cambiar su naturaleza¡±, explic¨® el Dr. Claudio Ottoni, paleogenetista de la Universidad de Roma Tor Vergata, en Italia. ¡°Hasta en el f¨ªsico, los gatos salvajes y los domesticados no se diferencian tanto. Los gatos han tenido una evoluci¨®n muy exitosa y se han adaptado muy bien al nicho humano, lo que resulta fascinante¡±, agrega.
Ottoni, que hace uso del ADN prehist¨®rico como herramienta para reconstruir el pasado de las poblaciones humanas y animales, dirige un proyecto europeo de investigaci¨®n llamado FELIX con el objetivo de desentra?ar la historia de la relaci¨®n entre gatos y humanos. El equipo de FELIX, que cuenta con prestigiosos expertos en paleontolog¨ªa, arqueozoolog¨ªa y biolog¨ªa molecular de museos e institutos acad¨¦micos de toda Europa, analiza m¨¢s de 1.300 muestras arqueol¨®gicas de gatos extra¨ªdas de algunas de las colecciones muse¨ªsticas m¨¢s importantes.
Estas muestras provienen de m¨¢s de ochenta yacimientos arqueol¨®gicos de Europa, ?frica y Asia Occidental, y est¨¢n datadas entre el a?o 10.000 antes de Cristo y el siglo XVIII. Los investigadores pretenden reconstruir las influencias biol¨®gicas y medioambientales ¨²nicas que dieron forma a la domesticaci¨®n de los gatos y rastrear la aparici¨®n de los gatos dom¨¦sticos en todo el mundo mediante la extracci¨®n de datos gen¨¦ticos de estos restos prehist¨®ricos de gatos.
Los investigadores trabajan en instalaciones especializadas para minimizar el riesgo de contaminaci¨®n del ADN y someten los restos de los gatos a pruebas mediante t¨¦cnicas avanzadas de biolog¨ªa molecular para extraer y analizar informaci¨®n gen¨¦tica. Pulverizan fragmentos diminutos de huesos y dientes de los que se extrae el ADN y los convierten en apenas unos miligramos de polvo, que forman as¨ª bibliotecas gen¨®micas: un conjunto de fragmentos de ADN que se superponen y juntos conforman el genoma total de un organismo individual.
La informaci¨®n gen¨¦tica se extrae mediante una potente y avanzada t¨¦cnica de secuenciaci¨®n de genes con la que es posible procesar grandes cantidades de datos muy r¨¢pidamente. Para esta fase, los investigadores reciben apoyo de la infraestructura computacional del consorcio italiano Cineca, una de las instituciones de investigaci¨®n a gran escala de Europa y que se cuenta entre los proveedores de servicios de supercomputaci¨®n m¨¢s potentes del mundo.
Esta avanzada tecnolog¨ªa permite a los investigadores estudiar los sistemas biol¨®gicos a unos niveles que antes eran impensables. Tambi¨¦n facilitar¨¢ la identificaci¨®n de patrones de mutaci¨®n gen¨¦tica a lo largo del tiempo, que indiquen las distintas etapas de la domesticaci¨®n felina. ¡°De esta manera somos capaces de diferenciar si un hueso pertenec¨ªa, por ejemplo, a un gato mont¨¦s europeo, africano o a uno de Oriente Pr¨®ximo, que es el ancestro de los gatos dom¨¦sticos actuales¡±, se?al¨® Ottoni.
Buscando en el ADN con supercomputaci¨®n
Los investigadores tambi¨¦n hacen uso de t¨¦cnicas sofisticadas basadas en el an¨¢lisis qu¨ªmico del col¨¢geno, la prote¨ªna que m¨¢s abunda en los huesos, para estudiar la evoluci¨®n de la alimentaci¨®n de los gatos a lo largo del tiempo. Por ejemplo, ?cu¨¢ndo empezaron a comer pescado, gracias a los pescadores que los alimentaban con sobras de sus redadas? Tal cuesti¨®n permite hacerse una idea sobre la evoluci¨®n de la domesticaci¨®n de los gatos.
Durante muchos a?os, los cient¨ªficos han considerado mayoritariamente que la domesticaci¨®n de los gatos empez¨® en el Antiguo Egipto, debido a la extensa iconograf¨ªa de gatos y el descubrimiento de gatos momificados como ofrecimiento a los dioses. No obstante, en 2004, el descubrimiento de un antiguo enterramiento de un joven y un gato en Chipre, en el pueblo neol¨ªtico de Shillourokambos, sugiri¨® que los gatos podr¨ªan haber sido domesticados ya hace 11.000 a?os.
El an¨¢lisis de ADN llevado a cabo por Ottoni y sus colegas pretende esclarecer este enigma. Hasta ahora, los resultados apuntan a que los gatos dom¨¦sticos europeos tuvieron el primer contacto con humanos en el norte de ?frica, y posiblemente viajaron a Europa con los romanos que comerciaban por el mar Mediterr¨¢neo.
La vida secreta de las momias de gato
¡°Si todo empez¨® hace unos 10.000 a?os, podr¨ªamos anticipar que los humanos trajeron a los gatos a Europa poco despu¨¦s, como pasa con los cerdos u otros animales dom¨¦sticos¡±, sugiri¨® Ottoni. ¡°Sin embargo, nuestro an¨¢lisis de ADN muestra que los gatos en Europa todav¨ªa eran salvajes, y ninguno tiene su origen gen¨¦tico en la cepa domesticada del gato hasta mucho despu¨¦s, hace alrededor de 2.500 a?os¡±, sostiene el cient¨ªfico.
No podr¨¢ saberse c¨®mo interactuaron estos distintos centros de domesticaci¨®n de gatos hasta que se complete el an¨¢lisis del genoma de los gatos prehist¨®ricos. Este es el plano que dibuja toda la informaci¨®n sobre el crecimiento, desarrollo y funcionamiento de un organismo.
Para los dos ¨²ltimos a?os del estudio, los investigadores diseccionar¨¢n los secretos gen¨¦ticos de su gran colecci¨®n de momias de gato egipcias. Quieren comparar el ADN de estos gatos con el de los gatos dom¨¦sticos modernos y con el de los restos de gatos prehist¨®ricos ya analizados en Europa.
Las investigaciones descritas en este art¨ªculo han sido financiadas por el Consejo Europeo de Investigaci¨®n (CEI). Las opiniones de los entrevistados no reflejan necesariamente la de la Comisi¨®n Europea. Si le ha gustado el art¨ªculo, puede compartirlo en sus redes sociales.
Este art¨ªculo apareci¨® originalmente en Horizon, la revista de investigaci¨®n e innovaci¨®n de la Uni¨®n Europea.
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