Anne L¡¯Huillier, ganadora del Nobel de F¨ªsica: ¡°Las personas estamos compuestas b¨¢sicamente de espacio vac¨ªo¡±
El trabajo de la cient¨ªfica francesa ha permitido a la humanidad asomarse por primera vez al desconocido mundo de los electrones
La profesora Anne L¡¯Huillier estaba el martes dando clase de f¨ªsica en la Universidad de Lund (Suecia) cuando su tel¨¦fono silenciado empez¨® a recibir llamadas sin parar. En una breve pausa, atendi¨® a aquel n¨²mero desconocido. Un hombre la inform¨® de que era la ganadora del Nobel de F¨ªsica. L¡¯Huillier, nacida hace 65 a?os en Par¨ªs, hab¨ªa logrado lo que solo cuatro mujeres en la historia, empezando por la polaca Marie Curie en 1903. Conmocionada y con la obligaci¨®n de guardar el secreto hasta el anuncio oficial, L¡¯Huillier continu¨® dando clase a sus alumnos. ¡°Creo que se lo olieron, pero no les dije nada¡±, explica con una sonrisa.
Las pioneras investigaciones de esta f¨ªsica francesa hace m¨¢s de tres d¨¦cadas han permitido la creaci¨®n de pulsos de luz ultracortos, de unos pocos attosegundos: trillon¨¦simas partes de un segundo. Igual que el fot¨®grafo estadounidense Eadweard Muybridge logr¨® congelar por primera vez la imagen de un caballo al galope en 1878, L¡¯Huillier y sus colegas han conseguido fotografiar el movimiento de los electrones con esta especie de flash ultrarr¨¢pido. Es la escala de tiempo m¨¢s breve captada por el ser humano. Hay m¨¢s attosegundos en un segundo que segundos en toda la edad del universo.
L¡¯Huillier, ¡°agotada¡± tras dos d¨ªas de celebraciones, atiende a EL PA?S por videoconferencia. La cient¨ªfica ha abierto la puerta al mundo secreto de los electrones. Toda la materia conocida ¡ªtambi¨¦n la que compone a los seres humanos¡ª est¨¢ formada por ¨¢tomos. Y esos ¨¢tomos se unen en mol¨¦culas gracias a los electrones, el pegamento de la materia. El ¨¢tomo de hidr¨®geno, por ejemplo, tiene un n¨²cleo alrededor del cual se mueve un ¨²nico electr¨®n. Si ese ¨¢tomo tuviera el tama?o del planeta Tierra, el n¨²cleo apenas medir¨ªa 200 metros. El resto del espacio ser¨ªa para los imprevisibles movimientos del electr¨®n, en trillon¨¦simas de segundo.
Pregunta. Los electrones intervienen en nuestras vidas de muchas maneras, no solo por los dispositivos electr¨®nicos, como el ordenador y el tel¨¦fono. Tambi¨¦n nosotros somos electrones. En un cuerpo humano hay unos 23.000 cuatrillones de electrones, seg¨²n los c¨¢lculos del Laboratorio Jefferson de Estados Unidos.
Respuesta. La verdad es que no conoc¨ªa esa cifra [risas], pero no somos electrones: somos ¨¢tomos y mol¨¦culas, aunque hay much¨ªsimos electrones, por supuesto.
P. Usted fue una de las primeras personas que se asom¨® al mundo de los electrones. Son el pegamento de la materia. ?Le han surgido preguntas existenciales al ver, entre comillas, de lo que estamos hechos?
R. La verdad es que no me hago muchas preguntas existenciales.
P. ?Y si alguien le pregunta qu¨¦ somos? ?Somos solo ¨¢tomos?
R. Esa s¨ª es una pregunta existencial. Somos simplemente ¨¢tomos, s¨ª.
Somos simplemente ¨¢tomos¡±
P. M¨¢s del 99,9999% del ¨¢tomo de hidr¨®geno, que es uno de los elementos m¨¢s abundantes en el cuerpo humano, es espacio vac¨ªo.
R. As¨ª es, los ¨¢tomos son mayormente espacio vac¨ªo. Su n¨²cleo es muy muy peque?o.
P. Es dif¨ªcil de imaginar.
R. Por eso la f¨ªsica es tan divertida.
P. ?Tenemos un espacio vac¨ªo dentro de nosotros mismos?
R. S¨ª, estamos compuestos b¨¢sicamente de espacio vac¨ªo. Me gusta mucho esta idea.
P. El desaf¨ªo a largo plazo es lograr controlar en tiempo real el movimiento de los electrones en la materia. ?Ya es posible controlar los electrones?
R. Estamos empezando poco a poco. Uno de los objetivos, por ejemplo, es controlar el comienzo de una reacci¨®n qu¨ªmica.
P. ?Qu¨¦ aplicaciones podr¨ªa tener controlar los electrones?
R. Ser¨ªa extremadamente interesante controlar procesos como la fotos¨ªntesis [el proceso por el cual las plantas sintetizan sustancias utilizando como fuente de energ¨ªa la luz solar], pero esa no es realmente mi l¨ªnea de investigaci¨®n.
P. Usted afirm¨® el martes en el acto del Nobel de F¨ªsica que controlar la fotos¨ªntesis ser¨ªa como encontrar ¡°el santo grial¡±.
R. S¨ª, controlar la fotos¨ªntesis y otros procesos inducidos por la luz en grandes mol¨¦culas ser¨ªa un poco como hallar el santo grial.
P. ?Por qu¨¦ dice que ser¨ªa como un santo grial? ?C¨®mo ser¨ªa el mundo si pudi¨¦semos controlar la fotos¨ªntesis?
R. No lo s¨¦, pero si pudi¨¦semos ayudar a solucionar algunos de los problemas del mundo, como el cambio clim¨¢tico, ser¨ªa maravilloso. Todav¨ªa estamos lejos, el progreso es muy lento.
Controlar la fotos¨ªntesis ser¨ªa un poco como hallar el santo grial¡±
P. El f¨ªsico estadounidense Theodore Maiman invent¨® el l¨¢ser en 1960, sin aplicaciones a la vista. ?l mismo dijo por entonces que era ¡°una soluci¨®n buscando un problema¡±. Usted record¨® la an¨¦cdota en junio, al recoger el Premio Fronteras de la Fundaci¨®n BBVA en Bilbao.
R. Quiz¨¢ los pulsos de attosegundos tambi¨¦n son una soluci¨®n en busca de un problema, pero, 30 a?os despu¨¦s, las aplicaciones ya est¨¢n llegando. La capacidad de medir el movimiento de los electrones puede llevar a tener algo de control sobre este movimiento, pero todav¨ªa no estamos ah¨ª. Hay aplicaciones en la industria de los materiales semiconductores [de electricidad].
P. Obviamente el l¨¢ser no se invent¨® para escanear c¨®digos de barras en los supermercados, ocurri¨® por pura curiosidad, como los descubrimientos que ha hecho usted.
R. Totalmente. Hacer investigaci¨®n b¨¢sica es muy importante, porque nunca sabes cu¨¢l ser¨¢ la aplicaci¨®n. Como en el caso del l¨¢ser, puede llegar 30, 40 o 50 a?os despu¨¦s. No sabemos qu¨¦ aplicaciones ser¨¢n, pero estoy segura de que est¨¢n al caer.
P. Una aplicaci¨®n de la f¨ªsica de attosegundos es detectar la caracter¨ªstica huella de las mol¨¦culas en el infrarrojo, seg¨²n proclam¨® el martes la Academia sueca. Esto se podr¨ªa utilizar para detectar enfermedades, como el c¨¢ncer de pulm¨®n, en sus primeras fases.
R. Eso es lo que est¨¢ haciendo mi colega Ferenc Krausz [director del Instituto Max Planck de ?ptica Cu¨¢ntica, en la ciudad alemana de Garching]. Es todav¨ªa una investigaci¨®n experimental, no creo que se haya aplicado ya a detectar el c¨¢ncer.
P. El actual r¨¦cord de pulso de luz m¨¢s corto es de 43 attosegundos. ?D¨®nde est¨¢ el l¨ªmite?
R. No hay un l¨ªmite fundamental, pero es dif¨ªcil sincronizar todos los componentes de la frecuencia de esta radiaci¨®n [para superar ese r¨¦cord]. Ya lo veremos.
P. Hay ideas para generar pulsos de zeptosegundos [mil¨¦simas de attosegundos]. ?Qu¨¦ se podr¨ªa hacer con ellos?
R. La verdad es que no lo s¨¦. Supongo que se llegar¨ªa a la escala de tiempo del movimiento en los n¨²cleos de los ¨¢tomos, pero prefiero no decir estupideces.
P. Su colega Ferenc Krausz calcula que con la tecnolog¨ªa de attosegundos se podr¨ªa multiplicar por 100.000 la actual potencia de los ordenadores. ?Est¨¢ de acuerdo?
R. La idea es utilizar un interruptor ultrarr¨¢pido en los componentes electr¨®nicos. Estoy de acuerdo, probablemente. Tiene el potencial de realmente acelerar el procesamiento de una computadora.
P. Controlar los electrones en las mol¨¦culas ser¨ªa como tener un interruptor ultrarr¨¢pido para hacer que un material aislante se convierta en conductor de electricidad. Eso abrir¨ªa la puerta a materiales con propiedades incre¨ªbles.
R. No lo s¨¦, ya se ver¨¢.
No digo que he sufrido sexismo durante mi carrera porque ser¨ªa mentira¡±
P. En la ceremonia del Nobel, usted dijo que era un premio especial, porque apenas lo han ganado mujeres. Ha habido 219 ganadores hombres y solamente cinco mujeres: Marie Curie, Maria Goeppert Mayer, Donna Strickland, Andrea Ghez y usted. Son apenas el 2%. Usted estuvo en el comit¨¦ del Nobel de F¨ªsica hasta 2015, as¨ª que conoce lo que sucede entre bambalinas. ?Por qu¨¦ cree que solo han premiado a cinco mujeres desde que se instituy¨®, en 1901?
R. Se puede ver de otra manera: Donna Strickland lo gan¨® en 2018 y Andrea Ghez, en 2020. Y ahora lo he ganado yo, as¨ª que somos tres mujeres en cinco a?os. No est¨¢ mal. Lo que quiero decir es que esto est¨¢ cambiando. Hace un siglo, las mujeres no investigaban. Todav¨ªa tiene que haber m¨¢s mujeres, pero esto est¨¢ cambiando.
P. ?Cree que no era un problema de los mecanismos de decisi¨®n de los Nobel?
R. Probablemente eran los dos factores: los mecanismos de decisi¨®n y la composici¨®n de los grupos de investigaci¨®n. La sociedad era muy diferente hace 100 a?os: las mujeres ten¨ªan que cuidar a los ni?os. Mi esperanza es que esto est¨¢ cambiando y espero ayudar a que cambie.
P. ?Usted ha detectado sexismo durante su carrera?
R. Yo soy una mujer y, obviamente, mi carrera ha sido un poco diferente porque soy una mujer. Probablemente he sufrido ese sesgo inconsciente, pero tambi¨¦n me he beneficiado, por el hecho de ser m¨¢s visible y de algunas ayudas para mujeres. Ha habido cosas buenas y malas. No quiero decir que lo he tenido m¨¢s dif¨ªcil, porque no lo s¨¦, pero probablemente ha sido diferente. No digo que he sufrido sexismo durante mi carrera porque ser¨ªa mentira.
P. El f¨ªsico Joseph John Thompson descubri¨® el electr¨®n en 1897 y, un siglo despu¨¦s, ustedes fueron capaces de investigar su movimiento. ?Qu¨¦ cree que ocurrir¨¢ dentro de un siglo?
R. No lo s¨¦. ?Qui¨¦n sabe?
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