El aspirante a rector que escribi¨® cuatro p¨¢rrafos y se cit¨® a s¨ª mismo 100 veces
Juan Manuel Corchado, experto en inteligencia artificial de la Universidad de Salamanca, ha hinchado artificialmente su curr¨ªculum hasta colocarse por encima de los l¨ªderes mundiales en Google Acad¨¦mico
El catedr¨¢tico Juan Manuel Corchado quiere ocupar el legendario trono del fil¨®sofo Miguel de Unamuno: el de rector de la Universidad de Salamanca. Corchado, especializado en inteligencia artificial y ciberseguridad, es uno de los cient¨ªficos con mayor impacto del mundo, seg¨²n los datos de Google Acad¨¦mico. Sus cifras son apabullantes: m¨¢s de 45.000 menciones a su trabajo. Lo chocante es que much¨ªsimas de esas menciones proceden de s¨ª mismo. En un documento sobre la covid firmado solo por ¨¦l, escribe cuatro p¨¢rrafos insustanciales e incluye un centenar de citas a sus trabajos anteriores, que nada tienen que ver con el coronavirus: estudios sobre vertidos de petr¨®leo, turismo, pron¨®sticos financieros e incluso los niveles de di¨®xido de carbono en el oc¨¦ano.
Corchado, nacido hace 52 a?os en Salamanca, niega en una entrevista telef¨®nica con EL PA?S que est¨¦ haciendo trampas para hinchar artificialmente su impacto cient¨ªfico real. En los ¨²ltimos a?os, ha subido a internet multitud de textos muy breves acompa?ados por una enorme cantidad de citas a s¨ª mismo. Como los sube al repositorio cient¨ªfico de su universidad, el motor de b¨²squeda de Google Acad¨¦mico los registra y los tiene en cuenta para elaborar sus indicadores. Con sus 45.000 menciones, Corchado tiene aparentemente m¨¢s impacto que los grandes referentes mundiales en su campo. La ingeniera israel¨ª Sarit Kraus, ¨²ltima ganadora del premio a la excelencia en la prestigiosa conferencia internacional IJCAI, tiene 29.000 citas. El cient¨ªfico Milind Tambe, experto en inteligencia artificial en Google y en la Universidad de Harvard (EE UU), tiene 38.000.
Un denunciante an¨®nimo comunic¨® a EL PA?S las extra?as pr¨¢cticas de Corchado el 21 de abril de 2023, despu¨¦s de que este peri¨®dico destapara la participaci¨®n de cient¨ªficos espa?oles en una trama saud¨ª para ama?ar el ranking de universidades. El informante insisti¨® el pasado viernes, d¨ªa 8, despu¨¦s de que Corchado anunciase su intenci¨®n de presentarse a rector de la Universidad de Salamanca, tras la inesperada dimisi¨®n del que estaba en el cargo. Este diario comprob¨® entonces la existencia de los documentos breves llenos de autocitas y tambi¨¦n constat¨® que al menos tres cient¨ªficos aparentemente inventados ¡ªJuan Rodr¨ªguez, A. P¨¦rez y Marcus Ress¡ª hinchaban las menciones a Corchado con pseudoestudios similares colgados en el repositorio ResearchGate, otra de las fuentes habituales de Google Acad¨¦mico. Este peri¨®dico comenz¨® el martes, d¨ªa 12, a hacer preguntas en el entorno del catedr¨¢tico, y los pol¨¦micos documentos empezaron inmediatamente a desaparecer de internet.
Las explicaciones de Corchado son confusas. Afirma que los cuatro p¨¢rrafos con un centenar de autocitas, y otros muchos textos similares, eran ejercicios para ense?ar a sus alumnos a escribir un estudio cient¨ªfico, pero no especifica qu¨¦ cursos eran esos. Los documentos analizados por este diario son m¨¢s bien un ejemplo de c¨®mo no redactar un estudio: informaci¨®n banal con multitud de autocitas ajenas al tema. Corchado sab¨ªa que esos escritos hinchaban artificialmente su curr¨ªculum en Google Acad¨¦mico. La organizaci¨®n estadounidense Retraction Watch, especializada en fraudes cient¨ªficos, revel¨® las pr¨¢cticas del catedr¨¢tico en marzo de 2022, pero Corchado mantuvo su conducta. ¡°Eran documentos que hice para mis estudiantes, estaban ah¨ª y ni me hab¨ªa preocupado por ellos, la verdad¡±, sostiene ahora.
El aspirante a rector cuenta que ¨¦l no cre¨® los perfiles falsos dedicados a citar compulsivamente sus estudios. Asegura que fue un antiguo colaborador. ¡°Fue una persona que tuvimos aqu¨ª y hac¨ªa cosas muy raras. B¨¢sicamente se empe?¨® en demostrar que ResearchGate era una red que no funcionaba y que lo de las citas era un cuento. Empez¨® a crear perfiles de gente, para hacer da?o¡±, afirma. Corchado asegura que ¨¦l y su equipo acaban de borrar esos perfiles de investigadores inexistentes.
¡ª?C¨®mo pudieron ustedes borrar los perfiles falsos de ResearchGate si no eran sus creadores y no ten¨ªan la clave?
¡ªBueno, porque yo me dedico a la ciberseguridad.
¡ª?Y por qu¨¦ ayer?
¡ªNo fue ayer, ha sido esta ma?ana [el mi¨¦rcoles 13], que me han dicho que ya los podemos borrar. B¨¢sicamente, porque desde hace una semana estamos intentando revisar todo lo que he publicado, porque me voy a presentar a las elecciones a rector.
El matem¨¢tico Domingo Docampo, antiguo rector de la Universidad de Vigo, lleva a?os denunciando la existencia de ¡°granjas de citas¡±: redes de cient¨ªficos tramposos que pactan citarse unos a otros para ascender artificialmente en los rankings internacionales. ¡°Es bien sabido que hay investigadores que utilizan procedimientos deleznables para incrementar artificialmente la visibilidad de sus aportaciones cient¨ªficas¡±, lamenta. ¡°La manera de burlar la buena fe de servicios como Google Acad¨¦mico es almacenar en repositorios institucionales informes banales atestados de citas cient¨ªficas a la obra de uno o m¨¢s investigadores, sin venir a cuento¡±, explica.
Docampo detalla que es muy sencillo detectar este tipo de trampas. Otras bases de datos habituales, como la Web of Science o Scopus, no incluyen cualquier documento aparentemente acad¨¦mico subido a un repositorio institucional. Un cient¨ªfico deber¨ªa tener un n¨²mero de citas m¨¢s o menos similar en todas estas plataformas. ¡°Incrementos por encima del 500% son indicativos de comportamientos irregulares: es la prueba del algod¨®n¡±, afirma el matem¨¢tico. Juan Manuel Corchado tiene 8.700 citas en la Web of Science, frente a las 45.000 en Google Acad¨¦mico: cinco veces m¨¢s.
Ramon L¨®pez de M¨¢ntaras, de 71 a?os, fund¨® hace tres d¨¦cadas el Instituto de Investigaci¨®n en Inteligencia Artificial, en Cerdanyola del Vall¨¨s (Barcelona). Fue pionero en la disciplina, en 1975, y desde entonces ha ganado multitud de galardones, incluidos los m¨¢s prestigiosos en Espa?a (como el Premio Nacional de Investigaci¨®n), Europa (el de la asociaci¨®n EurAI) y EE UU (el de la organizaci¨®n IJCAI). L¨®pez de M¨¢ntaras tiene 10.000 citas, seg¨²n Google Acad¨¦mico. ¡°No pasa nada por citar tus trabajos previos, pero tiene que ser con sentido com¨²n y, sobre todo, de manera justificada. Eso es lo normal. Lo que no es normal es que la mayor¨ªa de tus citas sean autocitas. Y lo que no tiene sentido en absoluto es que el tema del art¨ªculo no tenga nada que ver con la lista de referencias que pones al final¡±, se?ala.
Juan Manuel Corchado dirige el grupo de investigaci¨®n BISITE, con m¨¢s de 200 miembros, incluido su hermano Emilio, coautor habitual de sus estudios. El equipo mueve millones de euros cada a?o. El propio Corchado viaj¨® en noviembre a Emiratos ?rabes para presentar un ¡°proyecto de creaci¨®n de un gran gemelo digital que modele la econom¨ªa digital, la tokenizaci¨®n [convertir datos sensibles en formatos encriptados] y las monedas digitales a nivel mundial¡±, con una financiaci¨®n inicial de dos millones. Adem¨¢s, es responsable de siete m¨¢steres diferentes en la Universidad de Salamanca, ha colaborado con la Oficina Europea de Polic¨ªa (Europol) en m¨¦todos de detecci¨®n de terroristas en Twitter y es miembro de la comisi¨®n t¨¦cnica de la Plataforma Tecnol¨®gica del Vino, entre otras muchas actividades variopintas.
El Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC) actualiza cada a?o el ranking de investigadores espa?oles en Google Acad¨¦mico, con m¨¢s de 123.000 cient¨ªficos. El catedr¨¢tico Juan Manuel Corchado aparece en el puesto 157. La prensa local de Salamanca suele celebrar esta posici¨®n del salmantino en la ¨¦lite cient¨ªfica. El bi¨®logo Isidro Aguillo, editor del ranking y responsable del Laboratorio de Cibermetr¨ªa del CSIC, explica que es absolutamente inusual que un investigador suba documentos breves plagados de autocitas a los repositorios institucionales. Aguillo pide sanciones para los tramposos. ¡°Mi preocupaci¨®n es la impunidad¡±, se?ala el experto, del Instituto de Pol¨ªticas y Bienes P¨²blicos, en Madrid.
La presidenta del comit¨¦ de ¨¦tica de la Universidad de Salamanca, la historiadora de la ciencia Bertha Guti¨¦rrez, afirma que no ha recibido ninguna queja sobre las pr¨¢cticas de Corchado en el a?o que lleva en el cargo. La propia Guti¨¦rrez formaba parte de la anterior candidatura a rector de Corchado, en 2017, cuando fue derrotado. La historiadora iba a ser una de sus vicerrectoras. Todav¨ªa no se sabe si repetir¨¢ en la nueva candidatura. La situaci¨®n en la Universidad de Salamanca es ins¨®lita: tras la inesperada dimisi¨®n del rector, Ricardo Rivero, el d¨ªa 7, una semana despu¨¦s renunci¨® por sorpresa su sustituta provisional, Mar¨ªa Jos¨¦ Rodr¨ªguez Conde. Ambos alegaron ¡°motivos personales¡±.
Mi preocupaci¨®n es la impunidad¡±Isidro Aguillo, responsable del Laboratorio de Cibermetr¨ªa del CSIC
Alberto Mart¨ªn, experto en la herramienta Google Acad¨¦mico, analiz¨® el caso de Juan Manuel Corchado en 2022 a petici¨®n de la organizaci¨®n Retraction Watch. ¡°Los resultados mostraban manipulaci¨®n. Ten¨ªa un porcentaje de autocitas bastante alto y muchas citas proven¨ªan de documentos solamente disponibles en ResearchGate, donde cualquiera puede subir cualquier cosa. Los autores parec¨ªan ser personas que no existen en realidad o, al menos, no pudimos encontrar m¨¢s informaci¨®n sobre ellos¡±, recuerda el investigador, de la Universidad de Granada. Seg¨²n su an¨¢lisis, alrededor de la mitad de las citas recibidas por Corchado en Google Acad¨¦mico eran autocitas o proced¨ªan de documentos sospechosos.
Mart¨ªn ha intentado actualizar su an¨¢lisis, a petici¨®n de EL PA?S, pero el martes 12 los controvertidos documentos de Corchado iban desapareciendo de internet seg¨²n los iba leyendo. ¡°En un repositorio acad¨¦mico, alguien que deposita documentos no los puede eliminar. Esto ir¨ªa en contra del registro acad¨¦mico, porque esos documentos, en teor¨ªa, podr¨ªan haber sido citados y, si se eliminan a posteriori, el nuevo conocimiento que se hubiera generado a partir de ellos se queda sin base¡±, advierte. Adem¨¢s de borrar estos art¨ªculos, Corchado ha desactivado su perfil de Google Acad¨¦mico. La ¨²ltima vez que este peri¨®dico pudo acceder a ¨¦l fue ese mismo d¨ªa.
Corchado insiste en que no tiene ninguna necesidad de hacer trampas en Google Acad¨¦mico. El investigador tambi¨¦n aparece en el ranking de cient¨ªficos m¨¢s citados elaborado por la Universidad de Stanford (EE UU), que utiliza la informaci¨®n de otra base de datos, Scopus, centrada en aut¨¦nticas revistas cient¨ªficas. Corchado es muy citado en parte porque es hiperprol¨ªfico: tiene 750 documentos en Scopus, con unas 12.000 citas. Ha publicado m¨¢s de una vez a la semana durante a?os. En Google Acad¨¦mico, su actividad es todav¨ªa m¨¢s descomunal: 2.100 documentos y 45.000 citas. Esa producci¨®n extra est¨¢ plagada de autocitas.
El perfil de Google Acad¨¦mico apenas se tiene en cuenta en los procesos de evaluaci¨®n formales de los cient¨ªficos en Espa?a, pero cuando se pone el nombre de un investigador en Google suele ser lo primero que aparece, seg¨²n recalca Alberto Mart¨ªn. ¡°Unos indicadores apabullantes como los que se muestran en su perfil [el de Corchado] pueden contribuir a generar una imagen de excelencia, que luego puede revertir en alg¨²n beneficio, como invitaciones y peticiones de colaboraci¨®n¡±, subraya. ¡°Adem¨¢s, rankings como el elaborado por el CSIC con datos de Google Acad¨¦mico suelen ser empleados por los medios de comunicaci¨®n locales, cada vez que son actualizados, para exaltar la excelencia de los investigadores que salen bien en la foto. Esto puede contribuir a construir su poder pol¨ªtico¡±, opina.
?Tienes m¨¢s informaci¨®n sobre este caso u otros similares? Puedes escribirnos a mansede@elpais.es. Sigue a MATERIA en Facebook, X, Instagram o suscr¨ªbete aqu¨ª a nuestro bolet¨ªn.
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