Halladas las dos fallas activas que provocaron la erupci¨®n de La Palma
Un estudio localiza fracturas de la corteza terrestre que atraviesan la isla y que han da?ado decenas de edificios. Algunas viviendas han quedado inhabitables
En marzo de 2022, tres meses despu¨¦s de que el volc¨¢n de la isla de La Palma dejase de escupir lava, el ge¨®logo Miguel ?ngel Rodr¨ªguez-Pascua recibi¨® una llamada que al principio no supo encajar. Hab¨ªa un vecino de El Paso que dec¨ªa que su casa se hab¨ªa llenado de grietas. Lo sorprendente era que este hombre llevaba a?os reparando sus muros. Tapaba una grieta y con el tiempo, volv¨ªa a salir. Y as¨ª desde la d¨¦cada de 1980. ?C¨®mo pod¨ªa deberse esto a la erupci¨®n? ?Y por qu¨¦ la casa de enfrente no ten¨ªa ni un desconch¨®n?
Desde entonces, Rodr¨ªguez, del Instituto Geol¨®gico y Minero de Espa?a (IGME-CSIC), y el resto de su equipo han analizado decenas de casos similares. Hay dep¨®sitos de agua rajados de parte a parte e importantes fracturas en muros, vallas, aceras, paredes, rampas de garaje, incluso estaciones de guaguas. En ninguno de los casos identificados los da?os est¨¢n relacionados con las coladas de lava ni con el enjambre de miles de terremotos que presagiaron la erupci¨®n. La raz¨®n, acaban de concluir, es que estas edificaciones est¨¢n justo encima de dos fallas activas, las primeras que se han descubierto en Canarias. Hasta el momento se han confirmado al menos 10 casas situadas sobre estas zonas de fractura y al menos dos de ellas han quedado inhabitables.
¡°Hasta ahora se pensaba que en Canarias no hab¨ªa fallas activas¡±, explica Rodr¨ªguez. ¡°Estas son las primeras que se han identificado en el archipi¨¦lago. Sin ellas, no habr¨ªa habido una erupci¨®n como la que hubo en La Palma¡±, a?ade el cient¨ªfico.
Las fallas son zonas de rotura en la corteza terrestre. Estas fracturas abarcan desde el manto, a unos 10 kil¨®metros bajo tierra, donde hay magma, y a una profundidad similar a la que se detectaron los hipocentros de los terremotos antes de la erupci¨®n, hasta el exterior. La apertura de estos resquebrajamientos es la responsable ¨²ltima de que la roca fundida repte hasta la superficie y provoque una erupci¨®n de lava como la que se vivi¨® en La Palma entre septiembre y diciembre de 2021.
Las dos nuevas fallas de La Palma, bautizadas como Tazacorte y Mazo, pueden ser consideradas las m¨¢s r¨¢pidas de todo el territorio espa?ol. Se mueven unos tres mil¨ªmetros al a?o, el triple que la falla de Carboneras, una de las m¨¢s r¨¢pidas de la Pen¨ªnsula, explica Rodr¨ªguez, quien ha dirigido los trabajos para identificar estas dos fracturas con la toma de m¨¢s de 400 datos sobre el terreno. Los investigadores creen que llevan activas decenas de miles de a?os. Es ¡°probable¡± que tambi¨¦n sean las responsables de la erupci¨®n del volc¨¢n San Juan, en 1949, aventura.
El estudio del IGME muestra c¨®mo la falla de Tazacorte estuvo activa antes, durante y despu¨¦s de la erupci¨®n. Todas las bocas del volc¨¢n se alinearon a lo largo de esta fractura, que sigue una direcci¨®n noroeste-sureste. A partir del 2 de octubre la erupci¨®n cambi¨® de fase y los hipocentros de los terremotos y las bocas cambiaron de orientaci¨®n a la oeste suroeste-este noreste siguiendo la falla de Mazo. M¨¢s de dos a?os despu¨¦s de que el volc¨¢n se apagara, las grietas de la corteza siguen movi¨¦ndose, como comprueban los vecinos que llevan a?os reparando las paredes de sus casas.
¡°Todo el mundo se pregunta cu¨¢ndo va a parar la actividad, pero no podemos saberlo¡±, reconoce Ra¨²l P¨¦rez, otro ge¨®logo del IGME coautor del estudio de las fallas, quien realiz¨® un intenso trabajo durante y despu¨¦s de la erupci¨®n, en ocasiones adentr¨¢ndose en las zonas m¨¢s peligrosas junto a efectivos de la Unidad Militar de Emergencias. ¡°Estas fallas llevan acumulando energ¨ªa miles de a?os y ahora se est¨¢ liberando poco a poco con ese movimiento lento y constante que detectamos y que es lo que hace que se agrieten las casas. Hab¨ªa mucho escepticismo respecto a este tema, por eso nos ha hecho falta estudiarlo en detalle y tomar tres a?os de datos para confirmarlo ?C¨®mo es de peligroso? Eso lo debe determinar un an¨¢lisis arquitect¨®nico que queda fuera de nuestras competencias, pero si hay seguimiento no deber¨ªa haber peligro¡±, a?ade.
Las dos grietas atraviesan La Palma de lado a lado. La de Tazacorte tendr¨¢ unos 8,5 kil¨®metros desde la costa hasta el cono volc¨¢nico y otros 20 kil¨®metros hacia la vertiente opuesta de la isla; y la de Mazo unos seis kil¨®metros hasta el cr¨¢ter y otros 16 al flanco opuesto. Es probable que se prolonguen por la corteza oce¨¢nica, bajo el mar, aunque por ahora no se ha podido comprobar.
Las fallas de La Palma son de movimiento lento, por lo que el riesgo de terremotos o de que las casas afectadas se vengan abajo es menor, consideran los cient¨ªficos. Cada lado de la falla se va desplazando lentamente sin causar movimientos bruscos, pero agrietando las construcciones a su paso.
A partir de la d¨¦cada de los 80, en La Palma se empez¨® a construir las casas sobre zapatas de hormig¨®n, un material que resiste bien la deformaci¨®n. En cambio las estructuras aleda?as, como patios, rampas, piscinas, dep¨®sitos de agua no tienen ninguna estructura debajo y se resquebrajan. Muchas de las edificaciones m¨¢s da?adas est¨¢n en la zona de Corazoncillo. Uno de los puntos m¨¢s afectados es el famoso cementerio de Las Manchas, situado justo encima de la falla de Mazo.
El equipo del IGME colabora con los ayuntamientos afectados y con el Cabildo de La Palma. Van casa por casa y determinan si las grietas se deben a la actividad de estas fallas. La localizaci¨®n de las mismas ha obligado a cambiar el emplazamiento del futuro centro de interpretaci¨®n del nuevo volc¨¢n de La Palma, que se pensaba edificar justo encima de una falla. Los cient¨ªficos han instalado casi 60 fisur¨®metros en viviendas, unos testigos que monitorizan la apertura progresiva de las grietas dentro de las casas. Lo ideal, explican, ser¨ªa instalar adem¨¢s un sistema m¨¢s preciso con estaciones de GPS.
La erupci¨®n de La Palma ha sido ¨²nica en la historia de Espa?a. Por primera vez, un ej¨¦rcito de cient¨ªficos la pudo seguir por tierra, mar, aire y espacio. Fue como ver el tiempo geol¨®gico, que act¨²a a escalas de millones de a?os, pasando delante de los ojos a c¨¢mara r¨¢pida. Pasada la erupci¨®n, cuando la gente pudo regresar a las zonas que hab¨ªan quedado acordonadas, comenzaron a saltar los casos de grietas y desperfectos en zonas aparentemente intactas, algunos a mucha distancia de las coladas.
¡°En algunas casas las grietas eran brutales; hab¨ªa hasta fumarolas de vapor de agua¡±, recuerda Nieves S¨¢nchez, investigadora del IGME. ¡°Recuerdo una que estaba completamente destrozada, hab¨ªa quedado inhabitable, mientras que la de al lado estaba perfecta. ?Por qu¨¦ la m¨ªa s¨ª y la otra no?, se preguntaba la due?a. Ha sido terrible en algunos casos, pero ha habido una gran colaboraci¨®n. Estamos intentando que alguna de estas casas inhabitables se musealicen, pero todo depende de lo que quieran hacer los propietarios¡±, detalla.
Rodr¨ªguez-Pascua resalta que el trabajo en La Palma ha sido ¨²nico por esta vertiente social. ¡°Yo trabajo en fallas activas, geolog¨ªa de terremotos y arqueosismolog¨ªa, y veo que a veces pareces un gur¨² diciendo que hubo terremotos en el pasado y que en alg¨²n momento volver¨¢ a haber otro. Mucha gente te tacha de alarmista, lo intentan negar; no lo aceptan. En La Palma no ha hecho falta convencer a nadie. Han sido los propios vecinos los que te avisan de que su casa se est¨¢ fracturando. Lo que hemos hecho nosotros es explicarles por qu¨¦, y generalmente la mayor¨ªa lo ha entendido¡±, resalta
Las nuevas fallas de La Palma tambi¨¦n explican, por ejemplo, por qu¨¦ durante la erupci¨®n sali¨® lava por puntos que estaban muy alejados del cono, explica David Sanz Mangas, coautor del estudio, que se acaba de publicar en la revista especializada Applied Sciences.
Jos¨¦ Fern¨¢ndez-Turiel, vulcan¨®logo del CSIC, que no ha participado en el estudio, explica: ¡°El trabajo es una aportaci¨®n interesante en cuanto a que pone de relieve las manifestaciones tect¨®nicas superficiales de una isla volc¨¢nica; un campo de trabajo poco investigado¡±. El cient¨ªfico profundiza en las implicaciones del nuevo trabajo. ¡°Las islas volc¨¢nicas oce¨¢nicas crecen de forma muy r¨¢pida en tiempo geol¨®gico. La Palma se ha formado en unos dos millones de a?os formando un edificio de m¨¢s de 5.000 metros de altura, m¨¢s de 3.000 bajo el mar y 2.400 en superficie. Este crecimiento tan r¨¢pido hace que tiendan a desmoronarse a trav¨¦s de deslizamientos gigantes. Estos deslizamientos producen fallas que pueden alcanzar hasta tres kil¨®metros de profundidad. Estas suelen reconocerse en el terreno por los planos que dejan. Tambi¨¦n se reconocen en el subsuelo en las galer¨ªas perforadas para agua. Hay buenos ejemplos en Tenerife y El Hierro. Otras fracturas que pueden tener esa dimensi¨®n en profundidad son las que aprovechan el magma para ascender y que es el propio magma que las va abriendo en su camino. Estas se reconocen en superficie o en el subsuelo por diques de roca volc¨¢nica. El magma al enfriarse se solidifica y forma estos diques, que son los conductos de progresi¨®n del magma fosilizados. En este nuevo estudio asumen que el plano de falla de Tazacorte llega a hasta 20 kil¨®metros de profundidad en base a datos de 12 a 19 de septiembre. Otro trabajo reciente, con datos de focos s¨ªsmicos de las mismas fechas, no dibuja un plano simple como el de la falla de Tazacorte. Es m¨¢s veros¨ªmil este modelo, ya que en el contexto de una isla oce¨¢nica la traza del magma sigue un camino m¨¢s complejo, porque no hay planos simples por donde transitar. El magma va rompiendo el encajante y movi¨¦ndose por donde le es m¨¢s f¨¢cil abrirse camino¡±, detalla
Alessandro Maria Michetti, vulcan¨®logo de la Universidad de Insubria y experto en las fallas producidas por el volc¨¢n Etna, que s¨ª pueden provocar terremotos muy peligrosos, opina: ¡°Es un estudio muy bien realizado y muestra el ¨¦xito de predecir la zona en la que el volc¨¢n entrar¨ªa en erupci¨®n¡±. El ge¨®logo cuenta que en Italia este tipo de trabajos ayuda a dividir el terreno en microzonas e impedir que se construyan casas encima de las zonas peligrosas, algo que tambi¨¦n recomienda en La Palma. Otro tipo de construcciones que son m¨¢s flexibles s¨ª son posibles, detalla, como autopistas o gasoductos que pasan justo por encima de una de las fallas m¨¢s peligrosas del pa¨ªs, la de Pernicana. En La Palma, concluye el investigador italiano, este tipo de estudios ¡°ayudar¨¢ a entender d¨®nde puede producirse la pr¨®xima erupci¨®n¡±.
Puedes seguir a MATERIA en Facebook, X e Instagram, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.