El primer mapa de humedales de Espa?a desvela m¨¢s de 5.000 enclaves y abre el camino para su protecci¨®n
El inventario del Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica est¨¢ incompleto, lleva d¨¦cadas de retraso y solo recoge el 20% del total, indica un estudio de la Fundaci¨®n Global Nature
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En el Inventario Espa?ol de Zonas H¨²medas (IEZH), que deber¨ªa contener la totalidad de los ecosistemas acu¨¢ticos de Espa?a, hay grandes huecos en blanco, con comunidades aut¨®nomas en las que no aparece ninguna laguna, turbera o lago. El listado oficial solo recoge 1.352 humedales de los 5.767 que existen, concluye la Fundaci¨®n Global Nature (FGN), tras una investigaci¨®n en la que ha recopilado toda la informaci¨®n disponible y que se publica hoy. ¡°Son solo dos de cada 10 humedales y la protecci¨®n de estos ecosistemas vitales para la biodiversidad requiere conocer cu¨¢ntos tenemos, qu¨¦ se ha destruido y qu¨¦ se puede mantener, y la primera dificultad con la que nos encontramos es no disponer de un listado conjunto que abarque el territorio nacional completo¡±, aclara Eduardo de Miguel, director de FGN.
El registro oficial es parcial debido a que solo nueve comunidades aut¨®nomas han aportado sus cat¨¢logos al Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica. Faltan por hacerlo Navarra, Castilla y Le¨®n, Arag¨®n, Galicia y Catalu?a, aunque las cinco cuentan con ¨¦l; mientras que Canarias, Extremadura y Cantabria no han elaborado todav¨ªa un documento oficial. El inventario nacional deber¨ªa estar terminado en 2026 y la demora, para FGN, no tiene mucho sentido: ¡°Ha habido suficiente tiempo [para hacerlo], ya que el real decreto para la elaboraci¨®n de IEZH se aprob¨® en 2004, hace casi dos d¨¦cadas¡±.
La organizaci¨®n conservacionista ha volcado la informaci¨®n ¨Drecopilada con ayuda de Datadista¨Den un mapa interactivo que consideran el primer registro homogeneizado completo de humedales de Espa?a, aunque todav¨ªa faltan por incluir muchos datos, como, por ejemplo, el estado de conservaci¨®n de muchos de ellos. En ¨¦l se incluyen los datos del IEZH, los cat¨¢logos auton¨®micos a¨²n no a?adidos en el registro oficial, las ¨¢reas de la Base Documental de los Humedales Espa?oles (BDHE) de 2006 y las 76 zonas inscritas en el tratado internacional de protecci¨®n Ramsar. De Miguel asegura que el mapa no se ha elaborado con la finalidad de ¡°denunciar¡±, sino con el objetivo de ¡°iniciar un trabajo, que debe incluir la mejora de los planes y estrategias del Estado para estos ecosistemas, cuya destrucci¨®n se ha acelerado en los ¨²ltimos 50 a?os¡±.
El maltrato a las ¨¢reas h¨²medas prosigue imparable, en medio de un escenario de cambio clim¨¢tico, con sequ¨ªas prolongadas y con olas de calor encadenadas. En Espa?a, el 49,6% est¨¢n alterados o muy alterados; una cantidad id¨¦ntica todav¨ªa se conserva y el 0,8% ha desaparecido, seg¨²n los datos del Plan Estrat¨¦gico de Humedales 2030, aprobado el a?o pasado por el ministerio. Los humedales son espacios clave para la biodiversidad, para absorber emisiones de di¨®xido de carbono e intervienen de manera decisiva en el ciclo del agua (reciben, almacenan y liberan agua limpia).
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Do?ana y Daimiel, protegidos pero maltratados
Del abuso sistem¨¢tico que se ha ejercido sobre estas zonas h¨²medas no se libran ni las de fama mundial, destaca el informe. En Do?ana, la laguna permanente de Santa Olalla se ha vuelto a secar este agosto por segundo a?o consecutivo, algo que no hab¨ªa ocurrido nunca, denuncia el CSIC; en las Tablas de Daimiel, en plena Mancha H¨²meda, el encharcamiento es testimonial, y el mar Menor contin¨²a recibiendo nitratos. ¡°Si esta es la situaci¨®n de los conocidos, ?c¨®mo ser¨¢ la del resto?¡±, se pregunta De Miguel, que no est¨¢ de acuerdo en c¨®mo contabiliza el ministerio los humedales desaparecidos. ¡°Para m¨ª la situaci¨®n de Do?ana o Daimiel, por ejemplo, es tan mala que considero que no van a salir adelante¡±, plantea. El estudio de FGN culpa de la desaparici¨®n de las zonas h¨²medas, sobre todo, a la agricultura intensiva y a la sobreexplotaci¨®n de acu¨ªferos; adem¨¢s, de a la desecaci¨®n forzada de muchos de ellos en otras ¨¦pocas y a la contaminaci¨®n por plaguicidas, fertilizantes y vertidos urbanos.
M¨¢s all¨¢ de los grandes humedales, hay que proteger y catalogar ¡°las turberas del norte de Espa?a y de las zonas altas de monta?a, que constituyen uno de los mayores sumideros de carbono, o los marjales mediterr¨¢neos que se despliegan por toda la costa¡±, advierte De Miguel. En Tierra de Campos (Castilla y Le¨®n), hay casos como las lagunas de Boada (65 hect¨¢reas) y Pedraza (70 hect¨¢reas), que no aparecen en ning¨²n cat¨¢logo, ¡°a pesar de las inversiones de fondos que se dedican a su gesti¨®n y ser humedales de referencia de muchos estudios cient¨ªficos¡±, plantea De Miguel como ejemplo de la falta de control que existe. La Junta de Castilla y Le¨®n anunci¨® este febrero que han iniciado la tramitaci¨®n para incluir sus 297 zonas h¨²medas en el inventario nacional. ¡°El que no est¨¦n incorporadas a ese listado no quiere decir que no las protejamos, al contrario, estamos estudiando la ampliaci¨®n del inventario con 70 nuevas ¨¢reas¡±, aclara David Cubero, jefe de Servicio de Flora y Fauna de Castilla y Le¨®n.
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El Hito: en plena restauraci¨®n
La Fundaci¨®n Global Nature recupera lugares como la laguna del Hito, en Cuenca, comarca de la Mancha Alta. Est¨¢ declarada reserva natural por Castilla-La Mancha desde hace m¨¢s de dos d¨¦cadas. El problema que arrastra el ecosistema se debe a la agricultura y la ganader¨ªa, que han acabado con las zonas de pastizal, arrancando plantas que frenaban el avance de los sedimentos hacia el interior de la cubeta. Global Nature comenz¨® a actuar all¨ª en 2020. Han comprado 387 hect¨¢reas que est¨¢n en plena reconversi¨®n. ¡°Hemos eliminado vallas, escombros, naves y, por otra parte, estamos acelerando el proceso de recuperaci¨®n natural plantando vegetaci¨®n aut¨®ctona¡±, explica Eduardo Palencia, t¨¦cnico de la fundaci¨®n encargado del Hito. El espacio es importante en la migraci¨®n de las aves. ¡°Es de las pocas zonas h¨²medas entre el valle del Ebro y los humedales intermedios de la Mancha ¨Dcomo las Tablas de Daimiel¨D y de las dehesas extreme?as. Este a?o, de poca agua, han parado all¨ª 4.000 grullas, pero se han llegado a contabilizar hasta 10.000.
Laguna de Antela: la desaparecida
En el camino de desprecio a los ecosistemas acu¨¢ticos, algunos han desaparecido hace d¨¦cadas y as¨ª permanecen. El informe de FGN se centra en casos de desecaci¨®n como, por ejemplo, el ocurrido en la laguna de Antela, en Ourense. La ley de 1956 para la producci¨®n agr¨ªcola y ganadera sentenci¨® a este humedal estacional, que se consideraba uno de los mayores de la pen¨ªnsula Ib¨¦rica. En ¨¦poca invernal su superficie alcanzaba seis kil¨®metros de largo y otros seis de ancho. Su desaparici¨®n elimin¨® una de las zonas de cr¨ªa del ¨¢nsar com¨²n y un ¨¢rea ¡°de regular aparici¨®n de cisnes procedentes de tierras europeas¡±, que llegaban a Antela, destaca FGN. En 2021, la ministra para la Transici¨®n Ecol¨®gica, Teresa Ribera, anunci¨® la intenci¨®n de recuperar este humedal, adem¨¢s de Mar de Campos (Palencia) y la Janda (C¨¢diz), que contaba con 6.000 hect¨¢reas. ¡°Todav¨ªa no se ha hecho nada¡±, denuncia De Miguel, que se muestra esc¨¦ptico ante estos anuncios.
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