El verano de las noches infernales: m¨ªnimas de 31,6 grados en M¨¢laga y de 37 en Tenerife

Aunque este verano se ha convertido en el m¨¢s c¨¢lido de los documentados en el mundo hasta el momento, en Espa?a ha sido el tercero peor de su ranking, que arranca en 1961 y que, de momento, sigue encabezando el terrible verano de 2022, seguido por el de 2003, seg¨²n el balance climatol¨®gico estacional hecho p¨²blico este jueves por la Agencia Estatal de Meteorolog¨ªa (Aemet) en un acto presentado por la vicepresidenta tercera y ministra para la Transici¨®n Ecol¨®gica y el Reto Demogr¨¢fico (Miteco), Teresa Ribera, que ha vuelto a respaldar la ¡°informaci¨®n tan solvente, tan confiable, tan s¨®lida y tan de servicio p¨²blico¡± que proporciona la agencia y su trabajo divulgativo sobre el tiempo y el clima. Por primera vez, este an¨¢lisis se ha presentado en la sede del ministerio.

¡°Se ha tratado de un verano muy c¨¢lido, que ha quedado muy cerca de los valores de 2003¡å, ha destacado el portavoz de Aemet, Rub¨¦n del Campo, para quien lo importante no es que sea el primero, el segundo o el tercero peor, sino la tendencia: nueve de los 10 veranos m¨¢s c¨¢lidos sufridos en Espa?a se han registrado en este siglo y cuatro de los cinco m¨¢s c¨¢lidos, desde 2015. ¡°Se est¨¢n acumulando los veranos t¨®rridos¡±, ha subrayado.

La temperatura media fue de 23,4¡ã en la Espa?a peninsular, 1,3¡ã por encima del promedio normal ¨Del periodo de referencia ha sido actualizado recientemente y va de 1991-2020, as¨ª que la comparaci¨®n se est¨¢ haciendo con los efectos del cambio clim¨¢tico ya patentes¨D.

Las m¨¢ximas estuvieron 1,2¡ã por encima, pero lo peor fueron las m¨ªnimas, con 1,4¡ã de m¨¢s. Se trata del segundo verano con las m¨ªnimas m¨¢s altas tras el de 2022, cuando la anomal¨ªa fue de 1,6¡ã por encima de lo normal. En esta estaci¨®n estival, se ha materializado el fantasma de una nueva tipolog¨ªa de noches para las que hasta ahora no exist¨ªa nombre. Cuando los term¨®metros no bajan de 20¡ã, se las llama noches tropicales y cuando no baja de 25¡ã, noches t¨®rridas o ecuatoriales.

Pero este verano, M¨¢laga ha sufrido su primera noche por encima de 30¡ã ¨Den realidad fueron dos, 31,6¡ã ¡°en el momento m¨¢s fr¨ªo de la noche¡± del 20 de julio, y 30,3¡ã el 2 de agosto¨D y en Gu¨ªa de Isora (Tenerife) se midi¨® una m¨ªnima de 37¡ã el 12 de agosto. No fueron las ¨²nicas, es m¨¢s, numerosas estaciones de Canarias encadenaron varias noches as¨ª consecutivas a primeros de agosto. El climat¨®logo Javier Mart¨ªn Vide propuso llamarlas infernales, flam¨ªgeras o ahornagantes y Aemet se ha decantado por el primer t¨¦rmino. ¡°Esto [en referencia al cambio clim¨¢tico y al vertiginoso aumento de las temperaturas] va m¨¢s r¨¢pido de nuestra capacidad de observaci¨®n¡±, ha comentado el experto. De momento, Aemet no dispone de un balance del n¨²mero total de noches tropicales, t¨®rridas e infernales registradas en esta estaci¨®n ni tampoco de un an¨¢lisis detallado sobre su multiplicaci¨®n y expansi¨®n en las ¨²ltimas d¨¦cadas.

Canarias ha padecido dos olas de calor de cinco d¨ªas cada una y la Espa?a peninsular cuatro, dos en julio y dos en agosto, que suman un total de 24 d¨ªas ¨Docho en julio y 16 en agosto¨D. ¡°Si lo comparamos con el verano pasado, que fue extraordinario, parece poco, porque fueron 41 d¨ªas bajo situaci¨®n de ola de calor, casi la mitad de la estaci¨®n, pero este a?o Espa?a ha estado en situaci¨®n extrema de altas temperaturas m¨¢s de la cuarta parte de los d¨ªas. El promedio en los ochenta, noventa y primera d¨¦cada del siglo XXI era de apenas siete d¨ªas, estamos multiplicando esta cifra por tres. La tendencia es a un aumento de tres d¨ªas por d¨¦cada¡±, ha contextualizado el portavoz. Este ha sido el cuarto verano que m¨¢s d¨ªas en ola de calor acumula desde 1975, tras los de 2022, 2015 y 2017.

Del Campo tambi¨¦n ha mostrado su preocupaci¨®n por la contundencia con la que se han superado los r¨¦cords de temperatura: ¡°Antes, los r¨¦cords se bat¨ªan por d¨¦cimas, pero este a?o llama la atenci¨®n el amplio margen. Por ejemplo, el 10 de agosto en el aeropuerto de Valencia se lleg¨® a 46,8¡ã, tres grados y medio m¨¢s por encima de la anterior efem¨¦ride¡±.

A este calor en tierra se suma el calor de las aguas que circundan el pa¨ªs, que s¨ª ha sido el peor de la historia documentada. ¡°Est¨¢ batiendo r¨¦cords, en lo que va de a?o de enero a agosto el promedio de la temperatura casi se nos va de escala. Es de 19,5¡ã, m¨¢s de 1¡ã por encima de lo normal y medio grado por encima del r¨¦cord previo, que fue en 2020¡å, ha apuntado el experto. El problema no es solo lo que supone en t¨¦rminos de migraciones o mortandad de especies, sino que unos oc¨¦anos m¨¢s c¨¢lidos son ¡°combustible¡± para precipitaciones m¨¢s intensas.

Un verano ¡°muy h¨²medo¡± y un oto?o que se prev¨¦ ¡°lluvioso¡±

El verano ¨Den t¨¦rminos meteorol¨®gicos acab¨® el 31 de agosto, aunque el oto?o astron¨®mico en el hemisferio norte comenzar¨¢ el s¨¢bado 23 de septiembre a las 8.50 hora espa?ola¨D fue muy h¨²medo, con una precipitaci¨®n media en la Espa?a peninsular de 87 litros por metro cuadrado, un 24% m¨¢s de lo normal. Fue el tercer verano m¨¢s lluvioso de este siglo.

Pero el agua estuvo muy desigualmente repartida ¨Dtres cuartas partes cayeron en junio¨D y lo peor es que, al t¨¦rmino de la estaci¨®n, contin¨²a la sequ¨ªa meteorol¨®gica de larga duraci¨®n en la que entr¨® el pa¨ªs en diciembre ¨Des decir, que lleva tres a?os consecutivos lloviendo menos de lo normal¨D. Durante este a?o hidrol¨®gico, que comenz¨® el 1 de octubre y al que le quedan apenas 20 d¨ªas para terminar, se hab¨ªan recogido de media en Espa?a hasta el 10 de septiembre 529,5 litros por metro cuadrado, cuando lo normal habr¨ªan sido 607. El d¨¦ficit de lluvia es del 13%.

Del Campo ha puesto el foco en la acuciante falta de agua que sufre el sur: ¡°En la cuenca de acumulaci¨®n ¨Dsimilares a las hidrol¨®gicas pero no exactamente iguales¨D del Guadiana y en la del Guadalquivir, ya se trata de la sequ¨ªa meteorol¨®gica m¨¢s larga desde que hay registros. Comenz¨® en 2016, siete a?os frente a los cuatro que dur¨® la de los noventa, aunque aquella fue m¨¢s intensa¡±. En la cuenca del Pirineo oriental, en Catalu?a, esta s¨ª es ya ¡°la sequ¨ªa m¨¢s intensa¡± y en la del Ebro, ¡°la segunda m¨¢s intensa¡±. ¡°Nos estamos enfrentando a sequ¨ªas m¨¢s largas y de mayor dureza¡±, ha concluido el portavoz de Aemet.

La predicci¨®n estacional para el oto?o apunta de forma ¡°muy robusta¡± a que esta estaci¨®n ser¨¢ m¨¢s c¨¢lida ¨Duna probabilidad del 70%¨D, incluso mucho m¨¢s c¨¢lida de lo normal ¨Dentre el 50% y 70%¨D y tambi¨¦n m¨¢s lluviosa, aunque en ese caso ¡°la incertidumbre es mayor¡± ¨Dla probabilidad es de entre un 40% y un 50%¨D. La gran pregunta es si se lograr¨¢ revertir la sequ¨ªa, y la respuesta es que probablemente no. ¡°Si se cumple la predicci¨®n, aliviar¨¢ la sequ¨ªa, pero ser¨ªa necesario que el oto?o fuera especial y extraordinariamente lluvioso para salir de ella¡±, indica Del Campo, que recuerda que, para acabar con la del oto?o-invierno de 2017, ¡°fue necesaria la primavera m¨¢s lluviosa de la serie hist¨®rica¡±.

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