Primera sentencia por el expolio de agua en Do?ana que prev¨¦ la entrada en prisi¨®n de terratenientes

Sentencia hist¨®rica contra agricultores participantes en el saqueo del agua en Do?ana. La jueza Isabel de Luque, titular del Juzgado de lo Penal 14 de Sevilla, ha condenado a tres a?os y medio de c¨¢rcel a cinco hermanos terratenientes por esquilmar el acu¨ªfero del Parque Nacional, al extraer de manera ilegal 19,4 millones de metros c¨²bicos de agua durante cinco a?os, entre 2008 y 2013. Si la sentencia se confirma, los latifundistas de la finca Hato Blanco Viejo en Aznalc¨¢zar (Sevilla), dentro de la reserva, ingresar¨¢n en prisi¨®n por un delito contra el medio ambiente y otro de da?os, adem¨¢s de pagar 1,9 millones como indemnizaci¨®n por el robo masivo de agua cometido. Al no superar la condena de dos a?os de c¨¢rcel, ning¨²n agricultor ha entrado en prisi¨®n hasta ahora por el expolio de agua en las provincias de Huelva y Sevilla, que durante d¨¦cadas ha minado su acu¨ªfero y provocado que sus valiosos humedales desaparezcan.

¡°Estas alarmantes cifras han de valorarse en conexi¨®n a un espacio como el de Do?ana, que ostenta las m¨¢ximas categor¨ªas de protecci¨®n auton¨®mica, nacional y mundial (¡­) un territorio singular de permanente atenci¨®n internacional, un enclave especial y vulnerable, unido a la circunstancia de la continuidad sistem¨¢tica [del saqueo del acu¨ªfero]¡±. Los latifundistas obtuvieron un ¡°enorme beneficio¡± econ¨®mico derivado del riego gratuito a costa de los intereses p¨²blicos, resalta el fallo emitido el pasado lunes.

La sentencia coincide con el ¨²ltimo tr¨¢mite de la ley de PP y Vox para ampliar regad¨ªos en el entorno de Do?ana, lista para su pr¨®xima aprobaci¨®n parlamentaria. La pol¨¦mica norma convertir¨¢ suelos de secano en regad¨ªo en Huelva, lo que a?adir¨¢ m¨¢s presi¨®n a¨²n al acu¨ªfero sobreexplotado, de 2.409 kil¨®metros cuadrados, y en su peor nivel hist¨®rico por la sequ¨ªa extrema y los pozos ilegales de la agricultura intensiva.

La captaci¨®n ilegal de agua en esta finca agr¨ªcola sevillana donde comienza la reserva en su extremo norte, en el l¨ªmite entre las dos provincias m¨¢s occidentales de Andaluc¨ªa, ha sido ¡°sistem¨¢tico, ambicioso, de car¨¢cter industrial y mantenida durante a?os¡±, subraya la magistrada. El robo ha sido de tal volumen que el nivel fre¨¢tico del acu¨ªfero baj¨® hasta 15 metros, seg¨²n resalt¨® el perito adscrito a la Unidad T¨¦cnica de la Fiscal¨ªa de Medio Ambiente.

A pesar de que la familia Campos Pe?a solo ten¨ªa permiso para regar 456 hect¨¢reas de un total de 1.044, extrajo del acu¨ªfero m¨¢s del doble del riego autorizado por la comisar¨ªa oficial de aguas. ¡°Es alarmante desde todos los puntos de vista: un sitio sin agua, due?os con un patrimonio bestial y un robo durante muchos a?os. La pena es comedida pero muy ajustada a las pruebas periciales¡±, destacan fuentes del caso. El delito contra el medio ambiente contempla un m¨¢ximo de cinco a?os de c¨¢rcel.

El fallo aclara que los delitos acreditados de esta familia de hacendados se limitaron a seis a?os consecutivos, pero hay ¡°claros indicios de usos anteriores irregulares durante un decenio¡±. Esos indicios est¨¢n acreditados, aunque no lleven aparejados condena penal, ya que desde 1997 hasta 2008 los cinco hermanos fueron sancionados por la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del Guadalquivir con 13 expedientes sancionadores y multas millonarias cuyo pago han intentado evitar durante a?os.

A pesar de las sanciones econ¨®micas y con la investigaci¨®n judicial en marcha, la Confederaci¨®n ¨Cdel Ministerio de Transici¨®n Ecol¨®gica¨C concedi¨® en 2018 a la finca otro permiso para seguir regando. Hoy su millar de hect¨¢reas con cultivos de arroz, algod¨®n y remolacha funcionan a pleno rendimiento con dos autorizaciones para extraer agua, seg¨²n confirma el abogado de la familia, Juan Luis P¨¦rez-Mar¨ªn.

El saqueo del agua en Do?ana que ha acabado con sus lagunas y deteriorado su biodiversidad se ha centrado en la comarca del Condado de Huelva, donde crecen las fresas en invernaderos. Pero el acu¨ªfero abarca tambi¨¦n toda la parte sur de la provincia de Sevilla, donde grandes latifundistas ¨Ccon cultivos de frutales, arroz y algod¨®n¨C han extra¨ªdo agua sin permiso y esquilmado el enorme acu¨ªfero de la reserva. Al margen de esta condena, la Fiscal¨ªa sevillana tiene abiertos otros cinco procesos contra hacendados que a¨²n se investigan y no han llegado a juicio. Desde 2007, los agricultores de Do?ana han recibido 49 condenas por pozos ilegales y por transformar sin permisos sus fincas a regad¨ªos, seg¨²n un recuento elaborado la pasada primavera por la Fiscal¨ªa de Huelva.

A pesar de que suele estar abierta, este mi¨¦rcoles la cancela de la finca Hato Blanco Viejo ¨Cque incluye una plaza de toros para tentadero¨C estaba cerrada, rodeada de latas de refrescos esparcidas por el suelo. Para opinar sobre la condena, un empleado remiti¨® al encargado de la finca, Jos¨¦ Mar¨ªa Rodr¨ªguez, que rechaz¨® la propuesta, al igual que la familia Campos Pe?a, a trav¨¦s de su abogado. Los latifundistas recurrir¨¢n el fallo ante la Audiencia de Sevilla.

Los acusados, por medio de la sociedad familiar, dispusieron de una instalaci¨®n de tuber¨ªas y pozos ¡°sin tasa ni control administrativo de ninguna clase, de forma descontrolada¡±, lo que alter¨® el balance h¨ªdrico del acu¨ªfero y quebr¨® ¡°el necesario equilibrio del sistema natural¡±, reprocha la jueza. A pesar de tener un permiso oficial, la finca carec¨ªa de contadores de agua.

Para la magistrada, los condenados ¡°no solo pusieron en peligro el acu¨ªfero¡± que alimenta al parque nacional, sino que causaron da?os efectivos en el dominio p¨²blico hidr¨¢ulico, ¡°en unos recursos h¨ªdricos ya significativamente escasos, lo que hace si cabe m¨¢s reprochable a¨²n la conducta de los hermanos, hecha en su solo beneficio econ¨®mico¡±. Como las pesquisas del Juzgado 2 de Primera Instancia de Sanl¨²car la Mayor se iniciaron en 2013, la jueza ha rebajado por dilaciones indebidas la pena, que una d¨¦cada despu¨¦s habr¨ªa sido mayor sin este atenuante.

Durante la investigaci¨®n judicial uno de los cinco hermanos coautores de los delitos ¨Cllamados Francisco, Antonio, Ernesto, Jos¨¦ Mar¨ªa y Ana Mar¨ªa Campos Pe?a¨C aleg¨® que ejerc¨ªa el sacerdocio y otra que viv¨ªa desde hace cuatro d¨¦cadas en Reino Unido, por lo que desconoc¨ªan el robo masivo del agua. Pero la jueza desde?a esta supuesta ignorancia del delito: los cinco hermanos recibieron durante 11 a?os ¡°sanciones gubernativas singularmente numerosas¡± que ¡°conoc¨ªan inevitablemente¡±, seg¨²n la sentencia. ¡°Una conducta diligente¡± exig¨ªa pedir explicaciones a los gestores de la finca ¨Cdos de los cinco hermanos¨C o que cambiaran ese ¡°comportamiento da?ino¡± para el entorno natural.

Los hermanos que se dedicaron a ¡°actividades ajenas a la agr¨ªcola, delegaron durante a?os de manera acr¨ªtica en los hermanos que s¨ª se hac¨ªan cargo m¨¢s directamente de la labor agr¨ªcola¡±, censura la magistrada. Uno de los dos gestores de la finca s¨ª admiti¨® las sanciones, pero no las consideraba justas: ¡°La Confederaci¨®n sabe que lo que dicen es mentira y act¨²an por presiones¡±. Lleg¨® incluso a decir que con sus extracciones le hicieron ¡°un favor¡± a Do?ana.

Nula eficacia de la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica

La sentencia demuestra la incapacidad de la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del Guadalquivir para acabar con el saqueo del agua en Do?ana: durante una d¨¦cada el organismo del Ministerio de Transici¨®n Ecol¨®gica acumul¨® expedientes sancionadores contra los due?os de la finca, estos siguieron esquilmando el acu¨ªfero, y la Confederaci¨®n no les cerr¨® la tuber¨ªa ilegal que construyeron y les permiti¨® seguir regando, a sabiendas del da?o que cada a?o causaba al acu¨ªfero. Es m¨¢s, en abril de 2018 el organismo a?adi¨® a los condenados una segunda autorizaci¨®n para sumar 756 hect¨¢reas a las 456 regables, seg¨²n admiten los propietarios. ¡°Pr¨¢cticamente toda la finca tiene ahora derecho de riego, con una balsa. Mis representados han colaborado y tramitado permisos con la Confederaci¨®n¡±, confirma el letrado P¨¦rez-Mar¨ªn.

Despu¨¦s de 2015 y pese a que el juzgado ya ejecut¨® medidas cautelares, los due?os de la finca han recibido nuevos expedientes sancionadores por hechos posteriores. Es decir, han seguido regando con aguas sin permiso pese a la actuaci¨®n de la justicia, seg¨²n destaca la sentencia. La Confederaci¨®n ha rechazado opinar y aclarar qu¨¦ parte de las multas impuestas ha cobrado a la familia de terratenientes.

El juzgado aclara que escapa a su competencia se?alar la ineficacia del organismo de Transici¨®n Ecol¨®gica: ¡°No es la conducta p¨²blica m¨¢s o menos diligente la que es objeto de enjuiciamiento, ni puede mitigar su eventual ineficacia controladora o represiva la responsabilidad de los particulares¡±.

La finca Hato Blanco Viejo tiene una parte dentro del espacio protegido y mayoritariamente est¨¢ en zona de acu¨ªferos y marismas, correspondiente al antiguo acu¨ªfero 27 Almonte-Marismas, sobre el que se asienta la propiedad. En esta finca, el agua proviene del sistema de precipitaciones y de las capas superiores del acu¨ªfero de la zona libre, pero si este acu¨ªfero libre no tiene suficiente agua, debe seguir sac¨¢ndola de la zona que sea ¨Cla presi¨®n es una succionadora de agua¨C, incluso de la zona mar¨ªtima, causando una alteraci¨®n de las calidades del agua. ¡°Y eso ha ocurrido aqu¨ª, parece ser que est¨¢ ocurriendo y hay un proceso de salinizaci¨®n, todav¨ªa no demasiado potente, pero que ya existe¡±, aclar¨® el perito judicial de la Fiscal¨ªa de Medio Ambiente, cuyo criterio sigue la jueza.

Durante la vista oral, el perito de la Confederaci¨®n redujo la cantidad de agua extra¨ªda a 12 millones de metros c¨²bicos, lo que equivale a un tercio del embalse de El Gergal, que abastece a la ciudad de Sevilla, unos vol¨²menes de agua ¡°inmensos¡±. ¡°Ser¨ªan miles de campos de f¨²tbol con un metro de agua, ya que es muy dif¨ªcil imaginar en abstracto ese volumen¡±, precis¨® sobre el robo masivo en esta finca.

Hoy la masa de agua subterr¨¢nea 27 se encuentra en ¡°mal estado cuantitativo¡± y ha sufrido un descenso significativo en los ¨²ltimos a?os, hasta el punto de estar por debajo del nivel considerado hist¨®ricamente como m¨¢s extremo, que fue la sequ¨ªa del 1991 a 1995. La sentencia incluye un ejemplo pr¨¢ctico para entender c¨®mo la biodiversidad ha descendido en picado en Do?ana: la extracci¨®n ilegal ha afectado a la nidificaci¨®n y reproducci¨®n de aves en la zona. De las 22 especies reproductoras, en 2010 hab¨ªa 20 en regresi¨®n.

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