La sequ¨ªa se alivia en el oeste peninsular, pero se agudiza en el Mediterr¨¢neo

Las buenas noticias, a veces, caen del cielo, pero siempre est¨¢n desigualmente repartidas. Cruzado el ecuador del a?o hidrol¨®gico, que comenz¨® el 1 de octubre de 2023 y se acabar¨¢ el 30 de septiembre de 2024, y superadas ya las dos estaciones m¨¢s lluviosas, han ca¨ªdo de media en la Espa?a peninsular 397 litros por metro cuadrado a 10 de marzo, cuando lo normal en este periodo son 362, por lo que ha llovido un 10% m¨¢s. El problema, subraya Rub¨¦n del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorolog¨ªa (Aemet), es que ¡°existen grandes diferencias regionales¡± en ese 10% de m¨¢s.

As¨ª, ¡°las lluvias han estado claramente por encima de lo habitual en el noroeste de la Pen¨ªnsula y claramente por debajo en el tercio oriental, sobre todo en las regiones mediterr¨¢neas y en los archipi¨¦lagos¡±, explica Del Campo. En cuanto a las cuencas de acumulaci¨®n de Aemet ¨Dsimilares, pero no iguales, a las hidrogr¨¢ficas¨D, en la del Tajo las lluvias se sit¨²an en torno a un 45% por encima de lo normal; y en las del norte y noroeste, un 32% por encima. Al contrario, en las de Catalu?a, del J¨²car y del sur de Andaluc¨ªa ¡°no se llega ni a la mitad de las precipitaciones normales¡± y, en la cuenca del Segura, ¡°ni a la tercera parte¡±.

Estas copiosas precipitaciones recogidas en la cuenca del Tajo han permitido a Aemet dar por finalizada all¨ª, aunque ¡°muy por los pelos¡±, la sequ¨ªa de larga duraci¨®n, en la que Espa?a en su conjunto entr¨® en diciembre de 2022. ¡°Otras cuencas, las del J¨²car, Segura y Norte y Noroeste, no han llegado a estarlo. El Tajo, que s¨ª lo estuvo, ha salido y es la ¨²nica que lo ha hecho, aunque muy al l¨ªmite¡±, detalla el experto. En cambio, la sequ¨ªa ¡°no solo no se ha paliado, sino que se ha agudizado en el ¨¢rea mediterr¨¢nea¡±. En resumen, ¡°se ha producido una recuperaci¨®n en el noroeste y centro de la Pen¨ªnsula, pero un empeoramiento en el este y sur de Andaluc¨ªa¡± y ¡°pr¨¢cticamente casi toda Espa?a sigue a d¨ªa de hoy en sequ¨ªa de larga duraci¨®n¡±, la de Catalu?a ¡°la m¨¢s intensa desde que hay registros¡± y la de Andaluc¨ªa, ¡°la m¨¢s duradera, ocho a?os ya¡±.

Gracias a las ¨²ltimas borrascas, la reserva h¨ªdrica ha crecido hasta el 56,8% de su capacidad y, pese a que en esta ocasi¨®n las lluvias tambi¨¦n han llegado a Catalu?a, sus pantanos contin¨²an bajo m¨ªnimos y han recuperado apenas 0,1%, seg¨²n los datos difundidos el martes por el Ministerio de Transici¨®n Ecol¨®gica. Los embalses espa?oles almacenan 31.844 hect¨®metros c¨²bicos de agua, tras aumentar en la ¨²ltima semana en 1.171, el 2,1%.

La causa de esta desigual distribuci¨®n de las lluvias es que en lo que va de a?o hidrol¨®gico ¡°est¨¢ predominando un r¨¦gimen de borrascas atl¨¢nticas, que dejan muchas lluvias, sobre todo en el noroeste y otras zonas del oeste peninsular, pero que llegan muy desgastadas al Mediterr¨¢neo¡±. No hay nada de raro en ello. ¡°Unos a?os predominan las borrascas atl¨¢nticas y otros sucede lo contrario, que hay m¨¢s bajas mediterr¨¢neas y m¨¢s danas¡±, contextualiza Del Campo, sin que esta alternancia natural se vaya visto acentuada por el cambio clim¨¢tico.

Aunque a¨²n quedan seis meses y medio de a?o hidrol¨®gico, ¡°la mayor parte ya est¨¢ vendida¡±, ya que en los primeros seis meses del a?o suelen caer dos tercios de lo que llueve en todo el a?o. ¡°Las estaciones m¨¢s lluviosas son, por este orden, oto?o y el invierno, mientras que la primavera puede ser lluviosa, pero es m¨¢s variable. El verano es el periodo m¨¢s seco, casi nunca llueve mucho¡±, recuerda el portavoz de Aemet.

?Y c¨®mo se espera que sea la primavera en cuanto a lluvias? La predicci¨®n estacional del trimestre abril-mayo-junio, publicada este jueves por la agencia, no da una se?al clara: hay las mismas probabilidades de que sea m¨¢s lluviosa que m¨¢s seca de lo normal, as¨ª que puede ocurrir cualquier cosa, detalla el tambi¨¦n portavoz de Aemet Cayetano Torres. ¡°Solo en Canarias hay una probabilidad m¨¢s alta de que sea m¨¢s seca¡±, matiza. La predicci¨®n estacional para el verano, por desgracia, s¨ª es rotunda: ¡°Hay mayor probabilidad de que sea m¨¢s seco de lo normal¡±.

Con estas predicciones en la mano, todo apunta irremediablemente a que Espa?a tampoco saldr¨¢ este a?o de la sequ¨ªa de larga duraci¨®n. ¡°Tiene que llover mucho, de las sequ¨ªas solo se sale con estaciones muy muy muy lluviosas. La sequ¨ªa de 2017-2018 pintaba fatal, pero lleg¨® la primavera de 2018, que fue la m¨¢s lluviosa con diferencia de toda la serie hist¨®rica, y se acab¨®. Con la de los noventa tambi¨¦n se acab¨® con un solo invierno, el de 1995-1996, que fue extremadamente lluvioso. Pero en esta ocasi¨®n, a pesar de haber sido m¨¢s lluviosos de lo normal, el oto?o y el invierno no nos han salvado, la primavera no parece que pueda ser de las m¨¢s lluviosas y de c¨®mo ser¨¢ el oto?o no sabemos nada, es lanzar una moneda al aire¡±, explica el experto.

Lo que tambi¨¦n parece muy claro con las predicciones a seis meses vista es lo de siempre, el calor sin fin. Aemet prev¨¦ que la primavera ¡°m¨¢s c¨¢lida de lo normal en todo el pa¨ªs, especialmente en el extremo norte peninsular, Levante, suroeste andaluz y ambos archipi¨¦lagos, donde la probabilidad es del 70 al 100%¡±. Y para el verano, el mapa pinta ¡°extremadamente rojo no solo para Espa?a, sino para toda la cuenca mediterr¨¢nea¡±. ¡°Hay una alt¨ªsima probabilidad, de entre un 70 y un 100%, de que sea m¨¢s c¨¢lido¡±, anota Torres.

El invierno m¨¢s c¨¢lido

As¨ª, a Espa?a le esperan dos temporadas m¨¢s de calor por encima de lo normal tras un invierno que fue nada menos que el m¨¢s c¨¢lido de la serie hist¨®rica en Espa?a, que arranca en 1961, empatado con el invierno de 2019-2020, seg¨²n recoge Aemet en su balance climatol¨®gico, divulgado tambi¨¦n este jueves. Es m¨¢s, un nuevo informe de reconstrucci¨®n clim¨¢tica que abarca hasta 1870 revela que fue ¡°el m¨¢s c¨¢lido en al menos siglo y medio¡±.

La temperatura media en el conjunto de la Espa?a peninsular fue en invierno de 8,5¡ã, lo que supone 1,9 grados por encima de lo normal. En Baleares tambi¨¦n fue muy c¨¢lido, pero en Canarias lleg¨® a extremadamente c¨¢lido, con una anomal¨ªa de 2,5¡ã. Espa?a encadena seis inviernos c¨¢lidos consecutivos y hace ya seis largos a?os que no hay una estaci¨®n fr¨ªa ¨Dla ¨²ltima fue la primavera de 2018¨D. ¡°Es m¨¢s, de las ¨²ltimas siete estaciones, cuatro han sido las m¨¢s c¨¢lidas de la serie, una ha sido la segunda m¨¢s c¨¢lida y otra la tercera m¨¢s c¨¢lida, es decir, que llevamos dos a?os en los que las temperaturas no solo son m¨¢s altas de lo normal, sino much¨ªsimo m¨¢s altas, de r¨¦cord¡±, lamenta Del Campo, para quien semejante acumulaci¨®n de anomal¨ªas y extremos c¨¢lidos solo tiene un culpable: el cambio clim¨¢tico.

Seg¨²n precisa Aemet, del invierno no se salv¨® ni un mes, ya que tuvieron temperaturas superiores al promedio. Adem¨¢s, fueron frecuentes los episodios c¨¢lidos y destacaron, por su intensidad y duraci¨®n, los que tuvieron lugar entre el 21 de enero y el 9 de febrero y entre el 12 y el 22 de febrero. En cuanto a bajas temperaturas, hubo varios episodios con temperaturas por debajo de las normales, pero ninguno fue una ola de fr¨ªo.

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