Richard Serra, unido a Espa?a por "puentes" y "nervios de acero"

En la sala dedicada en el Museo Reina Sof¨ªa a la obra Equal Parallel/Guernica-Bengasi, y frente a esta segunda versi¨®n de la escultura, Richard Serra recibi¨® hoy la Orden de las Artes y las Letras concedida por el Ministerio de Cultura en reconocimiento a su trayectoria profesional y su contribuci¨®n a la difusi¨®n internacional de nuestra cultura.

Seg¨²n el Real Decreto por el que se concede este galard¨®n a Serra (San Francisco, 1939), considerado como uno de los escultores vivos m¨¢s importantes del mundo, son merecedores del mismo, en caso de personas extranjeras, quienes hayan consagrado una parte significativa de su trayecoria profesional o actividad a materias directamente relacionadas con la cultura espa?ola, as¨ª como mantener una intensa relaci¨®n personal con nuestro pa¨ªs.

Caracter¨ªsticas estas que confluyen en la persona de Serra con el que existen muchos puentes tendidos, en opini¨®n de la ministra de Cultura Angeles Gonz¨¢lez-Sinde, quien resalt¨® el honor de reconocer la labor de "un creador austero, pero intenso; poderoso pero combativo, que forja cada una de sus esculturas de acero con el fuego de su compromiso". Destac¨® tambi¨¦n que supone un placer "porque siempre lo es conmoverse, estremecerse, comprobar que la inquietud como la belleza m¨¢s profunda no anida en los objetos sino en la vida, en lo que experimentamos las personas, en sensaciones tan duraderas como las que Serra nos despierta".

Desplegado en el aire

Gonz¨¢lez-Sinde record¨® la primera vez que Serra se encontr¨® frente a Las Meninas, de Vel¨¢zquez "y desvel¨® lo secretos de una atm¨®sfera por la que es posible transitar e incluso perderse. Desde entonces Richard Serra despliega el aire, un aire real, transitable, que nos es ¨ªntimo, pero tambi¨¦n cambiante". En su relaci¨®n con Espa?a, tambi¨¦n le unen puentes "y nervios de acero" tendidos en el tiempo, en el espacio, ya que desde la d¨¦cada de los ochenta es habitual la presencia de su obra en exposiciones y espacios p¨²blicos de nuestro pa¨ªs.

Una presencia que alcanza su punto culminante, su punto de no retorno, con la instalaci¨®n de forma permanente en el Guggenheim de Bilbao de la "extraordinaria" exposici¨®n La materia del tiempo, "posiblemente la reflexi¨®n m¨¢s completa del artista acerca de las cualidades f¨ªsicas del espacio y de la naturaleza de la escultura". Su relaci¨®n con el Museo Reina Sof¨ªa ha sido siempre muy estrecha y en este "idilio mutuo entre el artista y los espa?oles", la ministra no quiso dejar de destacar "su colaboraci¨®n para la recuperaci¨®n de la obra Equal Parallel/Guernica-Bengasi.

Valiente, riguroso y humano

"Hoy Espa?a y Serra empiezan a escribir un nuevo capitulo en la historia del relato de un artista y de un pa¨ªs, que le quiere, le admira y le da las gracias", declar¨® Gonz¨¢lez-Sinde, quien dio las gracias al escultor por su lucidez y valent¨ªa creativa, por su rigor, sensibilidad, humanidad "y tambi¨¦n por tu generosidad, por tu aportaci¨®n material y espiritual al panorama art¨ªstico espa?ol".

Tras agradecer el galard¨®n, Richard Serra record¨® que lleva 35 a?os viniendo a Espa?a y desde entonces hubo un cambio radical en su vida y en su carrera art¨ªstica. Punto culminante de este cambio fue su encuentro con Vel¨¢zquez, y en concreto con Las Meninas. Para el escultor fue fundamental descubrir, al situarse frente a esta pintura, el sentido del espacio. Por primera vez experiment¨® la sensaci¨®n de "entrar" en el cuadro al que Vel¨¢zquez le hab¨ªa abierto el espacio.

Serra coment¨® que a lo largo de estos treinta y cinco a?os se han organizado alrededor de una docena de exposiciones dedicadas a su obra en Espa?a y durante este tiempo la gente espa?ola ha sido para ¨¦l una audiencia incomparable. Agradeci¨® tambi¨¦n el apoyo fant¨¢stico que han sido tanto el museo Reina Sof¨ªa como el Guggenheim.