Heath Ledger resucita en Cannes de la mano de Terry Gilliam
'The imaginarium of Doctor Parnassus' logr¨® terminarse tras la muerte del actor en mitad del rodaje
The imaginarium of Doctor Parnassus contar¨ªa como una pel¨ªcula m¨¢s de Terry Gilliam sino fuera por ese extra?o suceso que dio la vuelta al mundo. Probablemente pasar¨ªa sin pena ni gloria por este festival de Cannes, como un cuento m¨¢s del ¨²nico yanqui entre los memorables Monty Phyton. Pero contiene oro. Lleva dentro una presencia ya m¨ªtica, la de Heath Ledger. As¨ª que la nueva pel¨ªcula de Gilliam, que sigue atrapado por su mundo propio, consigui¨® ayer emocionar en Cannes con la aparici¨®n del ¨²ltimo maldito de Hollywood.
A fe que ten¨ªa magnetismo, a fe que era un gran actor. Distinto, inadaptado y fr¨¢gil, justo como aparece en ¨¦sta su ¨²ltima pel¨ªcula. Pero es que hay m¨¢s. Una extra?a y perversa maldici¨®n la rodea. Ledger aparece en pantalla por primera vez colgado de un puente. Ahorcado. Le rescatan una panda de c¨®micos de la legua, que son los titiriteros del doctor Parnassus. "No hemos cambiado ni una l¨ªnea del gui¨®n, ni las alusiones a morir joven, ni nada. Era la pel¨ªcula que Heath quer¨ªa hacer y as¨ª la hemos terminado", comentaba esta ma?ana en Cannes Terry Gilliam.
El director recal¨® en la secci¨®n oficial del Festival de Cannes. Lo hizo con algunos frikies como Verne Troyer y dem¨¢s actores de este duelo entre el mundo real y el viaje a trav¨¦s del espejo. M¨¢s enanos, m¨¢s sabios, m¨¢s doncellas y pr¨ªncipes desmemoriados, m¨¢s decorados que mezclan la basura con los castillos encantados, m¨¢s mendigos y villanos, mundos y submundos es lo que aporta Gilliam en esta nueva pel¨ªcula, que, eso s¨ª, cuenta, adem¨¢s de Ledger, con la aparici¨®n estelar de Tom Waits. "Le ofrec¨ª hacer de demonio y acept¨® sin leer el gui¨®n. ?l es el m¨¢s grande poeta americano vivo", asegura Gilliam.
El p¨²blico recibi¨® esta nueva aventura, m¨¢s en la l¨ªnea Las Aventuras del Bar¨®n Munchausen que de 12 monos, m¨¢s en concordancia con Brasil que con Miedo y asco en las Vegas, con aplausos. Algunos fans sin entrada se agolpaban en la puerta a las ocho de la ma?ana. Ha sido un pase de los madrugadores. Despu¨¦s, Gilliam compareci¨® ante la prensa vestido con un modelo florido para contar los entresijos de este doctor Parnassus, c¨®mo consigui¨® acabar una pel¨ªcula cuyo rumbo qued¨® torcido y contar la historia de este buen hombre ambulante, monje en su juventud, que viaja en carromato por el Londres de la noche alucin¨®gena con su juego de espejos y su creencia en la inmortalidad a trav¨¦s de los cuentos.
Lo de Ledger fue un palo. Pero tambi¨¦n un revulsivo. "Fui a hablar con su familia en Los ?ngeles y decidimos que la mejor manera de homenajearle ser¨ªa haciendo la pel¨ªcula". Su ausencia se not¨®. "Era un hombre especial, lo llenaba todo, bromeaba y motivaba mucho a quienes trabajaban con ¨¦l", coment¨® Gilliam. Tanto a los veteranos, como el gran Christopher Plummer, como a los m¨¢s j¨®venes. A Lily Cole o a Andrew Garfield, que comparten papel con la estrella desaparecida.
El papel de Ledger, a quien el actor proporciona un impecable acento brit¨¢nico, estaba inspirado ni m¨¢s ni menos que en Tony Blair. "El amigo Tony, qu¨¦ actuaci¨®n la suya como mediador en Oriente Pr¨®ximo. Bombardean Gaza y ¨¦l va a dar palmadas en el pecho a Bush. Muy bien, Tony, bien hecho", comentaba Gilliam con sarcasmo.
Que apareciera ahorcado en su primer plano se inspiraba en el famoso suceso de aquel hombre que trabajaba para el Banco Vaticano. "Me hac¨ªa gracia eso". Luego result¨® desagradablemente premonitorio. Pero as¨ª lo ha dejado Gilliam. ?Qu¨¦ mejor manera de agrandar la leyenda? "Lo que m¨¢s me preocupaba era que la que ha sido la ¨²ltima pel¨ªcula de Heath terminara de manera digna, que ¨¦l quedara bien", asegura el realizador.
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