Pensar para 20 cabezas

En contra de lo que pudiera pensarse, en los minutos anteriores a un desfile en Cibeles la zona de maquillaje y peluquer¨ªa est¨¢ bastante tranquila. Lo peor ya ha pasado y el jaleo vendr¨¢ en cuanto termine el pase que est¨¢ a punto de empezar. Los aplausos del p¨²blico marcan el inicio de trabajo para el equipo de 30 personas que se encargan de cambiar el look de las modelos en unos pocos minutos. Los maquilladores est¨¢n coordinados por Jos¨¦ Belmonte, mientras que los peluqueros trabajan a las ¨®rdenes de Beatriz Matall¨¢n. El secreto de que todo funcione en lo que puede parecer un caos es, seg¨²n confiesan, "el trabajo en equipo".

Los preparativos para la Madrid Fashion Week comienzan "unos tres meses antes con una reuni¨®n con los dise?adores", explica Belmonte. De ese encuentro salen los maquillajes y peinados que se ver¨¢n sobre la pasarela. "Intentamos ser fieles a lo que nos piden, aunque hay que tener en cuenta si es posible realizarlo en los 20 minutos que tenemos entre pase y pase", aclara Belmonte. "Hay que tener en cuenta la luz de la pasarela, que no es igual que la utilizada para sesiones de fotos, que te permiten m¨¢s brillos en determinadas partes del rostro", a?ade Belmonte.

Cuando las ideas est¨¢n claras llega el momento de hacer las pruebas en las modelos e ir apuntando el proceso paso a paso para elaborar un gui¨®n que les ser¨¢ de gran ayuda antes del desfile. A¨²n as¨ª, cuando llega el d¨ªa repiten "el peinado en una modelo delante de todos para refrescar ideas", a?ade Matall¨¢n, que, como Belmonte, trabaja para L?Oreal.

Los rostros que Belmonte y su equipo crear¨¢n para las modelos en esta edici¨®n de Cibeles ser¨¢n, seg¨²n explica, f¨¢ciles de adaptar a la calle. "Veremos muchos tonos fl¨²or, turquesas o verdes para los ojos y colores ¨¢cidos para los labios". Aunque tambi¨¦n habr¨¢ un punto de la fantas¨ªa propia de las pasarelas ejemplificadas en l¨¢grimas de silicona o en las l¨ªneas de los ojos marcadas con lo que simula ser terciopelo.

Los peinados ideados por Matall¨¢n son, al igual que el maquillaje, f¨¢ciles de reproducir en casa. "Hay mucha onda natural cuando se lleva el cabello suelto y recogidos desestructurados", explica la directora de peluquer¨ªa. En su caso, el punto diferente lo pondr¨¢n "colas de caballo muy exageradas y pelucas que sustituyen el cabello por otro material".

Mientras Matall¨¢n y Belmonte cuentan los entresijos de una jornada que dura "desde las ocho de la ma?ana hasta las diez de las noche", los maquilladores y peluqueros descansan aprovechando que las modelos se encuentran en la sala donde se cambian de ropa. Unos minutos de asueto que se esfumar¨¢n cuando comiencen los aplausos.