Una exposici¨®n para entender la figura de Adolf Hitler

Una exposici¨®n en el Museo de Historia Alemana de Berl¨ªn repasar¨¢, desde ma?ana y hasta el 6 febrero, la figura de Adolf Hitler con la pretensi¨®n de explicar la fascinaci¨®n que el F¨¹hrer caus¨® en los alemanes. "Hace falta explicar como el insignificante Adolf Hitler, un hombre que ha vivido 30 a?os en el anonimato, sin estudios ni experiencia pol¨ªtica, pudo convertirse en ese salvador", ha explicado el comisario de la exposici¨®n, Hans-Ulrich Thamer.

Ante las cr¨ªticas de que la muestra pueda convertirse en un punto de peregrinaje para los neonazis, Thamer ha se?alado que esas personas "no son p¨²blico de museos" y ha a?adido que la exposici¨®n "no trata como un h¨¦roe a Hitler" sino que se analiza su figura "desde una distancia cr¨ªtica". "Queremos explicar la ascensi¨®n, el modo de actuar, el ejercicio de poder hasta el final y el incre¨ªble potencial de destrucci¨®n liberado por el nacionalsocialismo", ha aclaro el comisario.

Bajo el t¨ªtulo de Hitler y los alemanes. Comunidad y Crimen, la muestra pretende reflejar como pr¨¢cticamente todos los niveles de la sociedad alemana contribuyeron a crear un culto al dictador hasta los ¨²ltimos d¨ªas de la Segunda Guerra Mundial. Se contraponen documentos sobre el holocausto con la propaganda nazi que lleg¨® a todos los aspectos de la vida. Precisamente la extensa propaganda nazi mostraba a Hitler siempre como un aclamado y exitoso l¨ªder nacional y, aunque nunca se negaban los ideales defendidos por el r¨¦gimen, la publicidad no inclu¨ªa el fanatismo y brutalidad que se escond¨ªan detr¨¢s de sus pol¨ªticas.

Preguntas sin respuestas

Seg¨²n los responsables de la exposici¨®n, m¨¢s de seis d¨¦cadas despu¨¦s del final de la Segunda Guerra Mundial y del r¨¦gimen nazi, las nuevas generaciones consideran que existen muchas preguntas por responder sobre la figura del F¨¹hrer y que con la exposici¨®n podr¨ªan aclararse.

As¨ª, en Hitler y los alemanes se se?ala c¨®mo la figura carism¨¢tica del F¨¹hrer no pudo por si sola llevar adelante sus planes y consolidar su dictadura, sino que cont¨® con la aceptaci¨®n de la mayor¨ªa de la poblaci¨®n alemana, incluidas las clases pudientes. Las explicaciones indican c¨®mo, ante una ¨¦poca de crisis, los alemanes vieron en Hitler y sus promesas, apoyadas por un importante aparato propagand¨ªstico, una posibilidad de encontrar trabajo y prosperar.