Al calor de Bilbao Arte

Bilbao Arte se convierte cada a?o en un confortable hogar para una veintena de autores que dan los primeros pasos de su trayectoria, entre la formaci¨®n en las aulas de Bellas Artes y el inicio de la carrera profesional. All¨ª encuentran un espacio donde desarrollar sus proyectos, con los medios que requieran y una beca de 6.000 euros para los 12 meses de estancia. Esta semana cierran su paso por el centro con unas jornadas de puertas abiertas en que exponen al p¨²blico el resultado de un a?o de trabajo.

Los visitantes escasean en los estudios donde los artistas han instalado sus peque?as exposiciones. Las muestran revelan que buena parte de los residentes han optado por expresarse a trav¨¦s de la pintura. Carolina Andrada, por ejemplo, crea con sus lienzos grandes biombos en los que va desplegando sus personales paisajes. "He querido realizar un ensayo sobre la filosof¨ªa del paisaje, presente en la historia del arte desde el siglo XVII, como el ¨²ltimo g¨¦nero y el m¨¢s moderno en la pintura", explica Andrada, quien cursa estudios de doctorado en la Universidad Miguel Hern¨¢ndez, de Elche. "La pintura de paisaje no debe transmitir una vista exacta, una topograf¨ªa, sino una mirada al mundo natural", reflexiona. "El paisaje no tiene la responsabilidad del retrato, sino la de la experiencia de un sentido o un sentimiento sobre la naturaleza", concluye.

Esta semana cierran su estancia con unas jornadas de puertas abiertas

Los autores han disfrutado de espacios de trabajo y becas de 6.000 euros

Como ella tambi¨¦n han elegido la pintura Lourdes de la Villa, Juana Garc¨ªa-Pozuelo, Ainhoa Ortells, Mikeldi P¨¦rez Urkijo e Iker Serrano. "Los pintores necesitamos espacio para trabajar; quiz¨¢ por eso buscamos los estudios de Bilbao Arte", apunta Ortells, quien ha llevado a sus cuadros una visi¨®n ir¨®nica sobre la sociedad de consumo. Acabada la etapa en el centro, ahora busca espacio en su casa para seguir pintando y se prepara para terminar una investigaci¨®n de posgrado en la que analiza la cr¨ªtica social en la pintura de este siglo.

El balance que hacen los artistas del a?o en que han disfrutado de los espacios y de la beca resulta muy positivo. Lourdes de la Villa hab¨ªa dejado de pintar durante tres a?os. Obtuvo la beca y la cesi¨®n de un estudio en Bilbao Arte y puso a prueba su capacidad para trabajar sobre formatos gigantes ?lienzos de tres metros y medio de alto?, en los que presenta unos paisajes que parecen reflejos en el agua.

Hay mucha pintura, pero tambi¨¦n fotograf¨ªa, como la que realiza Patrik Grijalvo, quien retrata la arquitectura y, en una suerte de papiroflexia, crea esculturas. O la que utiliza el proyecto The sky was pink, de Raquel Dur¨¢n y Anybal Mira.

Otros optan por las instalaciones, como la del proyecto de Ane Pikaza, que suma esculturas y fotograf¨ªas de las intervenciones en espacios abiertos. Algunos autores trabajan m¨¢s pegados a la tradici¨®n: Lander Telletxea dibuja con grafito y Laura Bisotti, una italiana quien se qued¨® en Bilbao tras disfrutar de una beca Erasmus, realiza grabados y fotos anal¨®gicas.