La edici¨®n 2.0 no quiere esperar
Fr¨¢ncfort cierra con las plataformas digitales a la caza de cat¨¢logos espa?oles
Parec¨ªan agentes literarios, incluso colegas de otros pa¨ªses, pero no: les delataba que eran los ¨²nicos que iban peinando de forma sistem¨¢tica los puestos de los editores espa?oles en la Feria del Libro de Fr¨¢ncfort, que cerr¨® ayer. Eran los representantes de las plataformas de Google, Amazon y la canadiense Kobo, que iban a la caza descarada de los derechos digitales de los cat¨¢logos ante su inminente desembarco en el mercado espa?ol.
En una feria no muy espectacular en lo que a grandes libros se refiere pero metamorfose¨¢ndose por nanosegundos hacia un encuentro de contenidos multimedia, la moraleja de este Fr¨¢ncfort para Espa?a es que el sector ha entrado en una segunda fase, much¨ªsimo m¨¢s din¨¢mica, de la digitalizaci¨®n. Tras un primer momento que simboliza el nacimiento del distribuidor Libranda (impulsada por los tres grandes, Planeta, Random House Mondadori y Santillana) y el lento y temoroso inicio de sellos medianos, ya todo el mundo ve hoy que hay que empezar a correr.
As¨ª, desde Anagrama, Jorge Heralde admit¨ªa que "estamos a punto de firmar" con algunas de esas plataformas. Casi pared con pared, un portavoz de Tusquets (sello de los m¨¢s cautos con lo digital) reconoc¨ªa: "Quiz¨¢ fue bueno no volverse loco hace un tiempo pero ahora ya hay que estar ah¨ª". As¨ª lo han entendido en las ¨²ltimas semanas editoriales tan distintas como Roca, Libros del Asteroide y Siruela, que ultimaban flecos con Amazon en Fr¨¢ncfort. "Han vendido a los de Amazon como monstruos devoradores, pero dinamizar¨¢n nuestro sector al obligarnos a trabajar con sus par¨¢metros", opina Ofelia Grande de Andr¨¦s, editora de Siruela.
Pero la alarma la han puesto cifras aparecidas estos d¨ªas, como la de que el balance del sector en EE UU en 2010 creci¨® en un 3,6% en muy buena parte gracias a los libros electr¨®nicos, que experimentan ganancias anuales de tres d¨ªgitos. Los ingresos por el formato electr¨®nico ya significan el 20% del sector; y en Inglaterra, casi el 10%. Frente a ello, en ambos pa¨ªses, como en el resto del mundo, las ventas de los libros en papel siguen bajando (6,1% en Gran Breta?a; 5,7% en EE UU y 2,3% en Espa?a; por cierto, el m¨¢s castigado, el g¨¦nero de la ficci¨®n), seg¨²n un informe mundial de la consultora Nielsen.
Siruela: "Venden a Amazon como un monstruo, pero mover¨¢ el sector"
"Llevamos ya un tiempo que junto a los derechos tradicionales pedimos siempre los electr¨®nicos, pero en esta feria ya hemos a?adido autom¨¢ticamente la coletilla 'y los electr¨®nicos subsidiarios", admite una editora del Grupo Planeta. No hay que dejar un solo formato al azar, como se ha visto en la feria: los famosos Angry Birds de los m¨®viles (350 millones de descargas desde la salida del juego en diciembre de 2009) ya tienen un peque?o filme promocional v¨ªa amazon.com, un c¨®mic on-line y se habla, claro, de pasarlo al papel.
El secretismo de las negociaciones con los editores es total. Al parecer, ninguna de las tiendas digitales demanda exclusividad y los m¨¢rgenes que est¨¢n pidiendo como canal oscilan entre el moderado 20% y el duro 60%, cifras que suelen sufrir m¨¢s las editoriales peque?as. En la franja de las condiciones exigentes se mueven Apple bookstore y Amazon. Esta ¨²ltima ha exhibido sus poderes en la feria: por un lado, ha ido mostrando su ¨²ltimo juguete: un nuevo Kindle (pantalla de seis pulgadas y wi-fi) que pondr¨¢ a la venta en breve a 99 euros.
Otra muestra de su poder¨ªo son sus ¨²ltimas cifras en Gran Breta?a, donde ya vende el 30% de los libros de papel, mientras que de todos los que compraron un libro electr¨®nico en los ¨²ltimos seis meses, el 59% lo hizo desde su web. Adem¨¢s, y eso no ocurre solo en las islas, los compradores de Kindle y, en general, los de formato electr¨®nico compran hasta tres veces m¨¢s que los que lo hacen en papel. Al ser m¨¢s f¨¢cil, la compra impulsiva de referencias ofrecidas en el mismo texto le¨ªdo se dispara.
El consumidor de libros electr¨®nicos compra el triple que el de papel
La vuelta de tuerca final la daba estos d¨ªas la tienda virtual norteamericana con el anuncio del lanzamiento en Francia y Alemania de su Kindle Direct Publishing, donde cualquier persona puede colgar y vender su libro en Amazon, que se encarga de transformar el documento en el formato colgable. El reclamo: gratis, global, usted pone el precio y el 70% de los derechos, para el autor (el temible agente Andy Wylie propuso en esta feria el 50%).
Otra tienda que "en las pr¨®ximas semanas", seg¨²n una portavoz, est¨¢ a punto de entrar muy fuerte en Espa?a es Kobo (3,2 millones de referencias, de las cuales 2,5 millones son libros), que tambi¨¦n ha ido mostrando su lector electr¨®nico (quiz¨¢ sobrepase los 120 euros), a la que las editoriales, especialmente las peque?as, se dirig¨ªan ellas mismas solicitando entrevistas.
Las declaraciones el pasado viernes del presidente del grupo Planeta, Jos¨¦ Manuel Lara, sobre la pr¨®xima creaci¨®n de una gran librer¨ªa virtual vinculada a la cadena de librer¨ªas Casa del Libro y un sistema de abono (e-streaming) con C¨ªrculo de Lectores (compra, venta y alquiler de libros en la red) no hace m¨¢s que confirmar esa etapa 2.0 del libro electr¨®nico en Espa?a. Otra muestra: hace poco m¨¢s de un mes arranc¨® la plataforma zona ebooks.com, vinculada al grupo Edhasa que, a diferencia de Libranda, ofrece venta directa: se propondr¨¢ entrar tambi¨¦n a editores sudamericanos y es muy posible que sellos como Juventud y Salamanca (que estaba en Libranda) acaben sum¨¢ndose.
Las prisas de las grandes tiendas virtuales se explican por la falta de oferta de t¨ªtulos digitales en castellano. Si a eso se a?ade la crisis econ¨®mica y que la espa?ola es una sociedad menos desarrollada tecnol¨®gicamente, el panorama parece oscuro. Pero no lo ven as¨ª desde una de las grandes tiendas: "La implantaci¨®n de lo digital que en EE UU tard¨® cuatro a?os; en Inglaterra se ha hecho en uno. En tres a?os, en Espa?a esto estallar¨¢ y se acortar¨¢n mucho las distancias".
Nuevas palabras para un viejo oficio
El sector editorial est¨¢ cambiando tanto que tambi¨¦n lo hace su l¨¦xico. He aqu¨ª algunas de las nuevas palabras-clave.
- Gamification . Uso de las t¨¦cnicas y dise?os propios de los juegos para atraer al lector. Las sinergias y estrategias de ese mundo con los del cine, m¨®viles y los libros (lectura, p¨¢ginas web, etc¨¦tera) crece.
- Metadata. Superficha del libro con toda aquella informaci¨®n (t¨¦cnica, biograf¨ªa del autor, art¨ªculos, p¨¢ginas web...) que ayude a que los buscadores posicionen mejor el libro. A mayor informaci¨®n, m¨¢s facilidad para que el libro luzca en la Red.
- Social Media Marketing . El cl¨¢sico boca-oreja del sector va hoy por Twitter y Facebook; se recomiendan libros por las redes sociales... Tan vital como la rese?a en diarios y revistas.
- Transmedia . Con la edici¨®n digital, por vez primera, un libro tambi¨¦n puede (o debe) ser audio, imagen, texto digital... Los libros son ya multiplataforma y as¨ª deben concebirse.
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