¡°Ganar el Oscar de animaci¨®n ser¨ªa como poner una pica en Flandes¡±

En la casa madrile?a de Fernando Trueba (Madrid, 1955) hay prisas y ajetreo, pero no nervios, o al menos no en apariencia. Encima de la mesa, sobre unos libros est¨¢ la camisa blanca reci¨¦n comprada que se pondr¨¢ el domingo en el teatro Kodak y acaban de llegar los billetes del avi¨®n que coger¨¢ dentro de unas horas para Los ?ngeles. Cuenta Cristina Huete, su esposa y coproductora de Chico y Rita, que ya han terminado de arreglarle el viejo esmoquin que se puso en 1993 para recoger el Oscar por Belle ¨¦poque. "Estaba por ah¨ª, olvidado, pero no iba a comprarme otro si solo me lo he puesto una vez", dice ¨¦l. Casi veinte a?os despu¨¦s la historia se repite. Aunque ?qui¨¦n hubiera dicho entonces que su regreso a los Oscar iba a ser con una pel¨ªcula de animaci¨®n y en competencia con El gato con botas?

"Yo no", asegura rotundo. Pero resulta que ahora le ha cogido el gusto y quiere hacer m¨¢s pel¨ªculas de dibujos animados con Mariscal. La historia que le motiva m¨¢s es sobre el pianista brasile?o Tenorio Junior, "uno de los grandes de la bossa nova, que muri¨® asesinado en Buenos Aires cuando el golpe de Estado, en 1976". La animaci¨®n, afirma, le ha "abierto" la mente. "Llevaba a?os d¨¢ndole vueltas a esta pel¨ªcula como un documental, pero despu¨¦s de Chico y Rita he descubierto que hoy puedo contarla mucho mejor; hay temas que son de ficci¨®n, a algunos se les saca m¨¢s partido como documental, pero para otros la animaci¨®n es lo perfecto".

Menciona con admiraci¨®n pel¨ªculas como Pers¨¦polis o Vals con Bashir, y considera que estas, igual que Chico y Rita, siguen la l¨ªnea de la novela gr¨¢fica dentro del mundo del c¨®mic. Si el c¨®mic se ha hecho "mayor de edad", tambi¨¦n la animaci¨®n, aunque atreverse con una pel¨ªcula de dibujos animados para adultos es un riesgo y se paga, admite Trueba. "En Espa?a ¡ªy en Europa y EE UU¡ª la gente no a ver una pel¨ªcula de cine animado si no es en un domingo y con ni?os, y mucho menos si lo que te cuenta es una historia seria".

Chico y Rita ha sido un ¨¦xito en cuanto a cr¨ªticas. En EE UU, dice, la han considerado "una pel¨ªcula de arte". Pero en t¨¦rminos econ¨®micos, sin representar un fracaso, le est¨¢ costando recuperar la inversi¨®n, alt¨ªsima para una producci¨®n espa?ola ¡ªm¨¢s de 10 millones de euros¡ª. Es lo que tiene buscar nuevos caminos. "Si Xavi y yo hubi¨¦ramos querido hacer unos dibujos animados comerciales, habr¨ªamos hecho una historia de un osito en las Alpujarras, pero no es el caso".

Trueba aspira a la estatuilla 19 a?os despu¨¦s de la que gan¨® ¡®Belle ¨¦poque

La candidatura al Oscar ha llegado cuando la pel¨ªcula parec¨ªa haber agotado su recorrido natural y ha coincidido con su estreno en Estados Unidos, que no va nada mal. "Es una segunda oportunidad para que la gente la disfrute y eso es fabuloso, adem¨¢s confirma que no nos hab¨ªamos equivocado".

Trueba no ha visto sus competidoras del pr¨®ximo domingo ¡ªRango, El gato con botas, Kung Fu Panda 2 y Una vida de gato¡ª, pero sabe que lo tiene crudo. "Xavi, que s¨ª tiene ni?os peque?os, las ha visto y dice que algunas son muy buenas. Seamos objetivos: ganar el Oscar a la mejor pel¨ªcula de habla no inglesa es muy dif¨ªcil aunque entra dentro de lo posible; pero en el de animaci¨®n, es competir en su terreno, es como poner una pica en Flandes". Ahora no tiene sentido preocuparse, toca disfrutar ¡ªo sufrir¡ª el ritual. Despu¨¦s volver¨¢ a su ¨²ltima pel¨ªcula, ya terminada, El artista y la modelo, una historia sobre la relaci¨®n entre un viejo escultor que se despide de la vida y la joven que le devuelve el deseo de trabajar y crear su ¨²ltima obra.

Seg¨²n Trueba, es su pel¨ªcula "m¨¢s personal", en la que ha puesto "m¨¢s de su visi¨®n del mundo y de la vida". Le viene a la mente una cr¨ªtica que le sol¨ªa hacer el gran Rafael Azcona por no hablar nunca de lo que le pasaba a la gente normal, a las porteras, a los taxistas, a los pescaderos... "Joder, es que t¨² solo escribes historias de artistas', me dec¨ªa; yo, para fastidiarle, le respond¨ªa con un argumento de su propia filosof¨ªa: uno solo debe escribir de lo que conoce".

En Espa?a la gente no ve cine animado si no es en domingo y con ni?os

Trueba no cree que haya tanta distancia entre Chico y Rita y El artista y la modelo, ambientada en el verano de 1943 en un lugar de la Francia ocupada, rodada en franc¨¦s y en blanco y negro. "En el fondo hay una unidad profunda, pues se habla del amor por el arte y de la relaci¨®n del arte con la vida, y de c¨®mo mirar la vida a trav¨¦s del arte".

Antes de la gala de los Oscar Chico y Rita empezar¨¢ a comercializarse en Internet. Cree que hay que proteger los viejos modelos de exhibici¨®n y negocio, pero tambi¨¦n apostar por el futuro. "No son excluyentes", afirma. Menciona la pirater¨ªa y la cobard¨ªa para enfrentarlas entre las verg¨¹enzas de Espa?a, y se acuerda tambi¨¦n de la humillaci¨®n que representa el juicio a Garz¨®n y el retroceso del aborto con el PP. Pero basta. La funci¨®n va a comenzar, y en primera fila est¨¢ el bolero dibujado por Mariscal y Trueba.