Pasaba por all¨ª
El tratamiento medi¨¢tico propinado al aniversario del 15-M certifica una verdad: contra Zapatero viv¨ªan mejor. Los medios conservadores mantuvieron en el origen del movimiento una distancia respetuosa ante la voz de la calle, porque entonces la evidente insatisfacci¨®n con las pol¨ªticas socialistas dotaban a las protestas de un matiz electoral que les favorec¨ªa. Ocupado el poder, todo ruido es molesto. Ha hecho fortuna, pese al feo significado, la orden pronunciada contra la oposici¨®n en pleno mitin: ¡°Lo mejor que podr¨ªan hacer es callarse¡±. Restringido el horario para ser ciudadano libre por ordenanzas amenazantes, como si a los derechos se les pudieran aplicar parqu¨ªmetros, ni siquiera con los disidentes cercados logramos que se reduzca la prima de riesgo, que evapora todo el esfuerzo recaudador en pagar intereses especulativos de la deuda nacional.
La prensa amarille¨® al revolver hasta en los expedientes acad¨¦micos de algunos miembros del movimiento, buscando suspensos sospechosos. La delegada del Gobierno ha dicho que detr¨¢s de las protestas est¨¢ la financiaci¨®n de grupos okupas, que se convierten as¨ª en firmes candidatos a incorporarse al Ibex y a la CEOE. No ha hecho falta recurrir a la estrategia antisindical de sacarlos en portada tom¨¢ndose una ca?a, pero s¨ª se constata la insistencia en presentarlos como guarros que no se lavan cuyas rastas delatan perfiles delincuenciales. Aunque si uno mira los noticiarios, comprobar¨¢ que por los juzgados desfilan corruptos bien duchados y afeitados, con traje caro y pasador en la corbata, sin que nadie hasta ahora sospeche autom¨¢ticamente de cualquier tipo con excesivo olor a colonia.
El clima, propicio al antidisturbio, permite que a una muchacha que pasaba por all¨ª la polic¨ªa la detenga y la plaque contra una pared con maneras que convierten al defensa Pepe en un nuevo rom¨¢ntico. Los indignados son la ¨²nica referencia positiva que ha merecido Espa?a en la prensa internacional durante el pasado a?o, s¨ªmbolo de una juventud pac¨ªfica e implicada en la sociedad. Su desprestigio corresponde a un inter¨¦s local. Pero no hay que alarmarse, cuando toca, aqu¨ª se procede a desprestigiar hasta el Banco de Espa?a, convertido ahora en novedoso ¨²nico culpable de nuestra corrupci¨®n financiera para as¨ª salvar a financieros corruptos. Si pasas por all¨ª, saldr¨¢s salpicado.
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