¡°En Espa?a el velo del pecado ha cubierto siempre el delito¡±
La subdirectora de EL PA?S Berna Gonz¨¢lez Harbour presenta su primera novela, ¡®Verano en rojo¡¯, una historia polic¨ªaca que abunda en los abusos a menores por parte de miembros de la Iglesia
Qu¨¦ mejor fuente de inspiraci¨®n para la ficci¨®n que la realidad. Y qui¨¦n mejor para saberlo que una periodista, m¨¢s a¨²n una experimentada y curtida en mil batallas como Berna Gonz¨¢lez Harbour, subdirectora de EL PA?S, que ha presentado esta tarde su primera novela: Verano en rojo, una historia de tintes polic¨ªacos. El lugar elegido para la puesta de largo, la librer¨ªa madrile?a Tipos Infames, se ha abarrotado con m¨¢s de seis decenas de asistentes, algunos caras conocidas del peri¨®dico. Entre todos, han conseguido sonsacar a la autora los nombres de las personas ¨Clas de verdad- que han servido de reflejo para los protagonistas de su libro: el periodista sabueso Luna y la comisaria Mar¨ªa Ruiz, que en la calle se llaman Jes¨²s Duva y Maribel Mar¨ªn.
¡°Los protagonistas son estupendos¡±, ha apuntado Duva, presente y llamado a participar. ¡°Antes de leer la novela me dije: ¡®a ver qu¨¦ tonter¨ªas dir¨¢ la compa?era¡¯¡±, ha proclamado divertido. ¡°Pero en realidad los personajes son cre¨ªbles, y Berna no incurre en errores como s¨ª hacen much¨ªsimos escritores¡±. Antes de las intervenciones del p¨²blico, Gonz¨¢lez Harbour ha comentado, mano a mano con la periodista Montserrat Dom¨ªnguez, directora de El Huffington Post y eventual moderadora de la presentaci¨®n, los pormenores de la trama, hilada en paralelo al Mundial de F¨²tbol de 2010. ¡°He le¨ªdo much¨ªsima novela negra y quer¨ªa retratar nuestra Espa?a, no quer¨ªa que hubiera comida siciliana, sino boquerones y jam¨®n. El hacerlo alrededor del Mundial me ofrec¨ªa una oportunidad de acotar la trama en un espacio cerrado, era un recurso literario muy f¨¢cil¡±. En torno al acontecimiento que llev¨® a un pa¨ªs entero a un estado de euforia colectiva, los dedicados protagonistas se afanan en realizar la labor que les atrapa: investigar. El caso, sin desvelar pormenores, tiene que ver con el abuso a menores por parte de miembros de la Iglesia. Una cuesti¨®n sobre la que se ha hecho mayor hincapi¨¦ en pa¨ªses como Irlanda o Alemania, pero que no por ello deja de existir en Espa?a. ¡°Aqu¨ª el velo del pecado ha cubierto siempre el delito¡±, ha subrayado la periodista y escritora.
Que la l¨ªder de la investigaci¨®n sea una mujer, no es ninguna casualidad. ¡°La novela negra est¨¢ vinculada a clich¨¦s masculinos¡±, ha explicado la autora, ¡°y yo quer¨ªa elegir a una mujer que representara a la mujer de hoy, alguien que logra sus objetivos a pesar de un entorno hostil¡±. Junto a la cuesti¨®n del g¨¦nero, emerge igualmente en la novela la confrontaci¨®n entre generaciones, entre la vieja escuela del periodismo y los j¨®venes que pivotan en torno a las redes sociales. Y, sin desde?ar lo que la tecnolog¨ªa puede ofrecer, Gonz¨¢lez Harbour reivindica el oficio de la investigaci¨®n esmerada y puntillosa. ¡°Quer¨ªa homenajear al viejo periodista, porque debemos aprender m¨¢s de ¨¦l que ¨¦l de las cosas nuevas¡±. Si algo le falta a la novela, ha apuntado una asistente, es un poco m¨¢s de acci¨®n carnal. Y ah¨ª es donde el p¨²blico ha estallado en risas. ¡°Estoy completamente de acuerdo, ?hay tensi¨®n sexual pero al final no llegan a nada!¡±, ha intervenido Dom¨ªnguez. La autora, colorada, solo ha acertado a se?alar a sus hijos: ¡°?Llegado este punto se han animado!¡±. A modo de conclusi¨®n, los asistentes y la escritora han desvelado otras dos claves del libro: una, que es una historia en que pecado y delito se solapan; la otra, que las v¨ªctimas se convierten en verdugos. Y de ah¨ª, a celebrar el nuevo libro entre cervezas, canap¨¦s y muchos amigos.
Babelia
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