Fascinante amistad
Dos amigas despiertan a la vida en un barrio pobre de N¨¢poles, afectivo y brutal en los a?os 50 Elena Ferrante sigue con pasi¨®n el desarrollo f¨ªsico, emocional y mental de estas dos mujeres que, con el paso de los a?os, cada vez difieren m¨¢s
Los personajes femeninos de Elena Ferrante son verdaderas obras de arte. En esta novela hay dos que sostienen el relato (Lila y Len¨², la verdadera protagonista), aunque la novela es un verdadero tableau vivant de personajes de un barrio pobre de N¨¢poles all¨¢ por los a?os cincuenta y es, a su vez, la primera parte de una trilog¨ªa napolitana. La amiga estupenda abarca la infancia y juventud de las dos amigas dentro de los l¨ªmites del barrio, contada retrospectivamente por la segunda, Elena Greco, Len¨², ya en la ¨²ltima etapa de su vida.
El hilo conductor de la novela es la amistad entre las dos ni?as, que se mantiene inc¨®lume durante la juventud. Lila es una ni?a inquieta, decidida, valerosa, rebelde e independiente, cualidades que fascinan a Len¨²; esta ¨²ltima, por el contrario, es m¨¢s bien tranquila, adaptable, y se siente inferior a su amiga; esta inferioridad no es tal sino una sensaci¨®n producto de las circunstancias y los caracteres, pero la autora la narra magistralmente poniendo el relato en boca de Len¨². De este modo, la inferioridad la vivimos desde el punto de vista de la narradora, mientras el relato va poco a poco colocando a cada una en su lugar. Este sencillo dispositivo permite seguir la evoluci¨®n de ambas desde una infancia que las asemeja a una juventud que las distingue y empieza a otorgar a cada una su individualidad.
Es evidente que la novela es descendiente del neorrealismo en la creaci¨®n del ambiente
El desarrollo f¨ªsico, emocional y mental de las dos amigas constituye el eje de la novela, pero el cuerpo lo forma el variado y estupendo conjunto de personajes, un total de nueve familias, en las que todos sus miembros est¨¢n bien definidos y personalizados, adem¨¢s de algunos otros a t¨ªtulo individual, como los maestros de la escuela y el instituto. Evidentemente, las familias tienen como funci¨®n establecer el colorido de la vida de barrio y el espacio social en que se mueven, lleno de fantas¨ªas, frustraciones, enfrentamientos, anhelos y an¨¦cdotas propias de la vida dom¨¦stica de un entorno cerrado. Es evidente que la novela es descendiente del neorrealismo en la creaci¨®n del ambiente, pero lo que ¨¦ste tuvo de retrato costumbrista lo soslaya Ferrante sin un titubeo. Y lo consigue gracias a la poderosa presencia de las dos amigas.
La infancia y la juventud de dos ni?as en un medio donde el afecto y la brutalidad se confunden a menudo, donde los r¨ªgidos c¨®digos de comportamiento obligan a crecer m¨¢s aprisa, donde las ilusiones, los amores y los desencantos florecen y se confunden en un paisaje urbano primario y un estricto c¨®digo del honor, est¨¢ contada desde el descarnado y emocionante despertar a la vida de Len¨² y su amiga, contada desde la realidad f¨ªsica de su desarrollo, de una veracidad e intimidad inusuales y perturbadoras, contada con la extrema delicadeza de quien ahonda sin pudor y sin miedo en lo m¨¢s personal de dos muchachas cuyas numerosas diferencias son justamente las que encierran el secreto de su fascinante relaci¨®n porque son las que permiten asentar la continuidad de su amistad. Una amistad que se entreteje en su propia maduraci¨®n.
Es una novela tan transparente como compleja, porque nada hay m¨¢s oscuro que la claridad
Dice Len¨²: ¡°En mi vida he hecho muchas cosas, pero nunca convencida; siempre me he sentido un tanto despegada de mis propios actos. En cambio Lila, de peque?a, se caracterizaba por tener una determinaci¨®n absoluta¡±. Desde el momento en que las dos ni?as se diferencian as¨ª durante una pedrea hasta el momento en que Len¨², paseando juntas por el barrio, bien agarradas del brazo, piensa que ¡°hab¨ªa algo insostenible en las cosas, en las personas, en los edificios, en las calles, que se volv¨ªa aceptable ¨²nicamente si se reinventaba todo como en un juego. Sin embargo, era esencial saber jugar y ella y yo, s¨®lo ella y yo, sab¨ªamos hacerlo¡±, su relaci¨®n se hace indisoluble. M¨¢s tarde, cuando su desarrollo como j¨®venes mujeres las obliga a empezar a batirse con la vida, cada una a su manera, un vaiv¨¦n de lejan¨ªa y acercamiento que nunca perder¨¢ de vista la confianza mutua, dar¨¢ paso a una relaci¨®n m¨¢s compleja a medida que se van abriendo a un mundo en el que las esperanzas y la turbiedad agitan la vida de otra manera, una vida en la que ellas, sin embargo, seguir¨¢n apoy¨¢ndose en la fuerza de su afecto.
Esta novela es transparente, al contrario que la oscuridad oprimente de las Cr¨®nicas del desamor (Lumen, 2010); tan transparente como compleja, porque nada hay m¨¢s oscuro que la claridad. S¨ª persiste, en cambio, ese empleo diferenciado del dialecto y del italiano en sus personajes; el primero, duro, s¨®rdido y hasta soez; el segundo, cuidado, cultivado pertenece a la narradora, que habla desde mucho tiempo despu¨¦s, pues fue su conquista y tambi¨¦n su primera y cumplida independencia del barrio.
La amiga estupenda. Elena Ferrante. Traducci¨®n de Celia Filipette. Lumen. Barcelona, 2012. 390 p¨¢ginas. 24,90 euros (electr¨®nico 16,99).
Babelia
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