Un museo donde pasa la autopista
El artista Fabrizio Plessi sorprende con un edificio en el tr¨¢nsito fronterizo entre Austria e Italia
La construcci¨®n es sin duda inusual, pero a¨²n m¨¢s lo es su emplazamiento: la A-22, la autopista del Brennero, que comunica Italia y Austria. Se trata del Plessi Museum, y est¨¢ dedicado a la obra del c¨¦lebre artista multidisciplinar Fabrizio Plessi (Reggio Emilia, 1940). Abrir¨¢ sus puertas al p¨²blico el 21 de junio.
El puntiagudo edificio, obra del ingeniero Carlo Costa y el propio artista, se erige en el lugar donde antiguamente se encontraba el conjunto fronterizo, con la voluntad de restablecer la uni¨®n entre los mundos mediterr¨¢neo y mitteleuropeo, separados desde el fin de la I Guerra Mundial hasta la firma del tratado de Schengen, el 1 de enero de 1995.
Rodeado por las monta?as que encierran el Paso del Brennero, el Plessi Museum se alza como una gigantesca teca de cristal, capaz de poner en relaci¨®n la arquitectura con el extraordinario paisaje alpino. En el marco de la historia de Europa y de las relaciones entre Italia y Austria, el Paso del Brennero tuvo siempre un fuerte valor simb¨®lico e identitario, de modo que la recalificaci¨®n de los espacios de la antigua aduana se ha convertido en una ocasi¨®n para otorgarle un nuevo significado.
En su interior se abre un espacio concebido como un ¨¢gora sensorial, que re¨²ne instalaciones, v¨ªdeos, esculturas y elementos gr¨¢fico-pict¨®ricos. La pieza central es la obra creada para la Expo de Hannover en el a?o 2000, que celebra el proyecto de colaboraci¨®n transnacional de las tres provincias ¡ªTrento y Bolzano en Italia e Innsbruck en Austria¡ª que compon¨ªan hist¨®ricamente la regi¨®n del Tirol. ¡°La instalaci¨®n es como un paisaje alpino artificial, que el visitante debe experimentar y vivir desde el interior¡±, explica Plessi, que ha dise?ado el recorrido expositivo as¨ª como todos los muebles y elementos del museo, tambi¨¦n las innovadoras mesas digitales.
El tema del agua, que desde finales de la d¨¦cada de los sesenta predomina en buena parte de las producciones de Plessi, vuelve a tener un papel estelar, dando lugar a im¨¢genes pict¨®ricas extremadamente sugestivas. ¡°El v¨ªdeo y el agua forman un binomio perfecto. El agua es un elemento primordial y el v¨ªdeo, un s¨ªmbolo contempor¨¢neo, pero ambos son cambiantes, fluidos, inestables. El agua virtual, que surge de la magia de las nuevas tecnolog¨ªas, seguir¨¢ fluyendo por la eternidad, siempre viva y capaz de asombrarnos como el agua de las fuentes romanas del siglo XVII¡±, asegura Plessi, afincado en Venecia desde hace d¨¦cadas y por tanto profundo conocedor del arrollador poder del l¨ªquido.
Adem¨¢s del museo, el antiguo puesto fronterizo acoge un centro para congresos, dedicado a los encuentros enfocados en las relaciones entre el entorno mediterr¨¢neo y el germ¨¢nico y, por supuesto, un restaurante, ¡°ajeno a los formatos de las tradicionales ¨¢reas de descanso de las autopistas¡±, seg¨²n la empresa Autostrada del Brennero SpA, promotora de todo el proyecto.
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