Grassino se enfrenta al lado m¨¢s oscuro

A Paolo Grassino (Tur¨ªn, 1967) le interesa trabajar sobre lo fantasmal, sobre los miedos existenciales y el lado oscuro de la vida. Sus inquietantes instalaciones y esculturas se mueven entre la ciencia ficci¨®n y los pozos m¨¢s negros de la historia. En la exposici¨®n que acaba de inaugurar en el Instituto Italiano de Madrid (C/ Mayor 86), ha recreado una propuesta llena de misterio y belleza titulada La oscuridad en la luz, que podr¨¢ visitarse hasta el pr¨®ximo 23 de octubre.

En un circuito que ocupa toda la planta del palacio de Abrante dedicada a exposiciones, se mezclan tapices, v¨ªdeo y escultura para narrar una historia en la que lo on¨ªrico y lo real se mezclan de manera dram¨¢tica.

Una gran calavera realizada con cinco kil¨®metros de tubos negros de electricidad con una especie de cerebro flotante en su interior es la pieza que sirve de arranque por el inquietante recorrido. Sigue un gran tapiz realizado con esponja sint¨¦tica y ocupado por la figura de un ciervo negro, presumiblemente ya muerto, que flota de manera vertical ante una extra?a vegetaci¨®n. Cerca hay tres hombres de cemento, cubiertos de trozos de vidrio de botellas para hacerlos inaccesibles.

Todo ello conduce a la instalaci¨®n central (Analgesia) en la que ocho animales, cuya apariencia se mueve entre los hipop¨®tamos y los perros xoloitzcuintle de los aztecas, est¨¢n delante y en lo alto de un muro de estanter¨ªas negras y parece que su intenci¨®n fuera impedir el paso. No tienen hocico ni rabo y las cuencas de los ojos est¨¢n vac¨ªas. ¡°Representan el miedo que tenemos a adentrarnos en las razones ¨²ltimas de las cosas¡±, explica el artista. ¡°Son una especie de monstruos que nos inventamos como pretexto para no avanzar. Aqu¨ª se invita al visitante a traspasar al otro lado del muro para que compruebe que no pasa nada. Son nuestros miedos y cobard¨ªas lo que nos acorrala. La realidad es que en el lado oscuro no hay nada¡±.

Los bichos y el muro est¨¢n realizados con materiales sint¨¦ticos que producen un cierto rechazo al tacto. ¡° Al principio utilizaba solo material reciclado, objetos encontrados por casa. Ahora he ampliado mis opciones de trabajo. Lo que me gusta es hacerlo todo con mis propias manos de manera artesanal. Solo busco ayuda para trabajos muy espec¨ªficos o de dimensiones inabarcables para m¨ª.

Paolo Grassino es consciente del impacto que produce su trabajo. ¡°No busco expresamente el factor sorpresa ni quiero epatar. Si mi obra inquieta y altera el estado de ¨¢nimo es por el contenido¡±.

Artista habitual en las exposiciones europeas y en Espa?a vinculado a F¨²cares durante varios a?os, cree que el mundo del arte se debe repensar. ¡°Las galer¨ªas no pueden ser un mero negocio, tienen que ofrecer algo m¨¢s. En Italia est¨¢n sobreviviendo los poderos¨ªsimos establecimientos y las peque?as y nuevas galer¨ªas. Las medianas desaparecen porque no entienden que tienen que reinventarse. Es el tiempo de las iniciativas, no de las quejas¡±.