¡°Mary Poppins es atractiva en un mundo en donde no hay liderazgo¡±
Cameron Mackintosh, productor de 'Los miserables', acudi¨® al estreno del famoso musical en el Palau de les Arts de Valencia y defendi¨® la esencia del g¨¦nero m¨¢s comercial
Los miserables es el primer musical que se pone en escena en el Palau de les Arts de Valencia. No fall¨® el d¨ªa del estreno Cameron Mackintosh, su productor y uno de los hombres m¨¢s ricos de la industria musical brit¨¢nica, para supervisarlo. Tiene fama de revisar los detalles y puesta en escena de sus producciones alrededor del mundo, pero tambi¨¦n sabe delegar. ¡°He hablado con mi equipo y me han dicho que todo va muy bien¡±. Cree que ¡°un teatro subvencionado y un espect¨¢culo comercial como ¨¦ste pueden encajar muy bien¡±, ya sean musicales, ballet u ¨®peras, que ¡°son caras¡±. De hecho, recuerda, esta ¨²ltima versi¨®n de Los miserables, que lleva 28 a?os en cartel en Londres, se ha representado en m¨¢s de 300 pa¨ªses y en 22 idiomas, se vio por primera vez en el Wales Millenniun Center de Cardiff ¡°y tuvo un ¨¦xito rotundo¡±.
Pregunta. ?Es el musical la ¨®pera de nuestro tiempo?
R. No todos los musicales, ja ja. No Mamma mia!, que es un gran espect¨¢culo pero es otra cosa. Si lo es Los miserables, por supuesto, porque est¨¢ absolutamente en la tradici¨®n de Carmen y de las grandes ¨®peras. Alain Boublil [dramaturgo] y Claude-Michel Sch?nberg [m¨²sico] son grandes amantes de la ¨®pera. Nunca tuvieron ambici¨®n de escribir para el gran teatro musical, hasta que vieron el original de Jesuchrist Superstar en Nueva York en los a?os setenta. Era como el Oklahoma! de Rodgers y Hammerstein y les hizo ver que pod¨ªan trabajar juntos en un espect¨¢culo a escala oper¨ªstica popular.
P. ?A usted le gusta ir a la ¨®pera?
R. Ocasionalmente. No me atrapa la parte musical por s¨ª sola, aunque es importante. Necesito una historia que me enganche. Si no me gustan la historia y los personajes, no importa lo buena que sea la m¨²sica; yo no lo har¨¦. Los espect¨¢culos que yo hago est¨¢n basados en una gran historia cl¨¢sica. Todo ha de contar una historia, la m¨²sica tambi¨¦n.
P. ?No disfruta escuchando un concierto de jazz en un peque?o club, por ejemplo?
R. El jazz es una m¨²sica que yo amo. Mi padre tocaba la trompeta y me introdujo en los grandes del jazz, como Duke Ellington, Louis Armstrong o Ella Fitzgerald. Me ense?¨® a apreciar a los grandes artistas y si no hubiese sido por ¨¦l probablemente no hubiera hecho lo que hecho.
P. Su madre era secretaria de producci¨®n. ?Qu¨¦ dir¨ªa su madre de esta versi¨®n de Los Miserables?
R. S¨¦ lo que dir¨ªa, porque me lo dijo ayer por tel¨¦fono. ?Por qu¨¦ no puedo ir a Valencia a verlo? Tiene 94 a?os. Le dije que solo iba a estar un d¨ªa aqu¨ª, pero la llevar¨¦ a ver el estreno en Broadway el a?o que viene. Est¨¢ muy interesada en lo que hago ?Sabe que su madre, mi abuela era medio espa?ola? Su apellido era Herrera.
P. ?Sabe en cu¨¢ntos pa¨ªses se est¨¢ representando Los miserables?
R. No estoy seguro, porque se est¨¢n haciendo centenares de producciones profesionales y amateurs en todo el mundo, adem¨¢s de mi propia producci¨®n, al mismo tiempo. Hay pa¨ªses como Jap¨®n o Corea donde est¨¢ seis meses, programan otra cosa y luego vuelve. En estos momentos, est¨¢ programada en Inglaterra, Canad¨¢, Am¨¦rica, Jap¨®n y Corea. Pronto ir¨¢ a Broadway, Australia, Sud¨¢merica, Brasil, M¨¦xico. No podemos hacer m¨¢s que unas pocas producciones al mismo tiempo, porque los directores y dise?adores no solo est¨¢n haciendo Los miserables, sino tambi¨¦n El fantasma de la ¨®pera u otros espect¨¢culos. He de tener cuidado con los compromisos que adquiero porque tienen que ser fieles a la versi¨®n y se est¨¢n haciendo versiones profesionales y no profesionales por todo el mundo. No necesita un gran escenario, puede bastar con unas sillas, la fuerza est¨¢ en el texto. Hay que ver Los miserables como una obra de arte, m¨¢s all¨¢ de mi producci¨®n.
P. ?Cu¨¢l es la principal diferencia entre la producci¨®n hace casi 28 a?os, cuando empez¨® con Los miserables y una producci¨®n actual?
R. La producci¨®n original solo existe ahora en Londres, donde adem¨¢s cambiar¨¢ tambi¨¦n muy pronto. Pens¨¦ que para su 25 cumplea?os lo mejor que pod¨ªa hacer era plantearlo como un musical nuevo. Claude-Michel y yo decidimos desnudarlo y hacer un nuevo cl¨¢sico intemporal. La primera vez que fue orquestada en los 80, los pianos electr¨®nicos literalmente acababan de comenzar, as¨ª que si escuchas el original resulta muy setentero. Ten¨ªa un toque cl¨¢sico como West side story y necesit¨¢bamos dar un paso adelante, con una nueva orquestaci¨®n, la que se ha hecho para los 25 a?os y se ha utilizado para la pel¨ªcula. Decidimos tambi¨¦n cambiar la direcci¨®n, porque aunque la original era maravillosa, estaba muy en la tradici¨®n de los espect¨¢culos casi shakespearianos y ahora las cosas han cambiado. Es un mundo diferente, una generaci¨®n muy diferente. La gente que lo hizo en su momento ahora est¨¢ ya en los setenta. As¨ª que pensamos en nuevos dise?os y una nueva iluminaci¨®n, adem¨¢s de utilizar las pinturas originales de Victor Hugo. Y el p¨²blico lo acepta igual o mejor que la versi¨®n antigua.
P. Los miserables es tambi¨¦n una gran novela sobre las desigualdades. Como uno de los productores m¨¢s influyentes del mundo, qu¨¦ cree se puede hacer en este momento para disminuir las desigualdades, que era el mensaje tambi¨¦n de V¨ªctor Hugo.
R. Como productor solo puedo poner el don que tengo al servicio de la producci¨®n de musicales. Pero una de las razones por las que siento arrastrado hacia esta historia es precisamente por los temas que Victor Hugo trata; la injusticia social que se refleja en la obra, que servir¨ªa igual para Francia que para Inglaterra. Uno de los motivos por los que el musical tiene ¨¦xito es porque los valores humanos, las historias que V¨ªctor Hugo refleja y la injusticia social de que habla existen hoy exactamente igual. Por desgracia, la Humanidad no tiene capacidad de aprendizaje y por eso es tambi¨¦n hoy una pieza contempor¨¢nea. Lo que ha hecho Claude-Michel [Sch?mberg] es coger los elementos claves de la historia de V¨ªctor Hugo y capturar tambi¨¦n en la m¨²sica esa pasi¨®n y emoci¨®n del autor, de manera que la sientes adem¨¢s de leerla.
P. ?Le preocupa transmitir valores adem¨¢s de historias en sus producciones?
R. Si ves otras historias que he hecho, como Miss Shaigon, cuenta el m¨¢ximo sacrificio que una madre puede hacer por su hijo, algo que tambi¨¦n es intemporal. As¨ª que lo que comenz¨® como una versi¨®n actualizada de Madame Butterfly en la guerra del Vietnam, hace 25 a?os, se puede situar hoy en cualquiera de las muchas guerras que ha habido, como Afganist¨¢n, Irak o Siria. Es la misma historia, con la diferencia de que en Vietnam estaba involucrado Estados Unidos y ahora todo el mundo ha participado en historias como ¨¦sta. Es la vertiente social de estas historias la que las hace duraderas. Incluso Mary Poppins la tiene en un mundo en el que no hay liderazgo.
P. ?Mary Poppins y el liderazgo mundial?
R. Me refiero a nuestros l¨ªderes, pr¨¢cticamente todos y en todos los pa¨ªses. Mary Poppins contin¨²a siendo atractiva porque tiene un punto de vista y le dice a la gente: ¡°T¨² puedes hacer lo correcto o lo incorrecto¡±. No te voy a decir lo que has de hacer, pero si tomas la decisi¨®n correcta tu vida mejorar¨¢. Mary Poppins se queda con la familia hasta que ¨¦sta sabe lo que ha de hacer; luego se va. En mi familia tengo dos hermanos, yo he tenido un gran ¨¦xito y ellos en ning¨²n momento se han sentido resentidos por ello. Nos criaron como una familia, con los valores del respeto la ayuda mutua. Estos valores son aplicables a la Humanidad. Hay que aprender los m¨¢s y los menos, los pros y los contras de vivir con otros. ?Hay tanta gente que mira ¨²nicamente por s¨ª misma!
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.