Christie¡¯s logra la recaudaci¨®n m¨¢s alta de la historia en una sola sesi¨®n
La sala de subastas vende en Nueva York por valor de 543 millones de euros Se baten los r¨¦cords de Barnett Newman, Alexander Calder, Joseph Cornell y Joan Mitchel
Estos d¨ªas, el dinero ni se crea ni se destruye, solo se transforma en arte. Por eso, anoche la amplia sala (Rockefeller Center) neoyorquina de la casa de subastas Christie¡¯s parec¨ªa una fiesta organizada por El Gran Gatsby. Todo el mundo del arte, y sus arrabales, andaba por all¨ª. Coleccionistas (Eli Broad), galeristas (Larry Gagosian), dise?adores de moda (Marc Jacobs), expertos en fondos de alto riesgo (Andrew Saul) e inversores inmobiliarios (Mark Fisch). Ni una silla libre para pujar o observar la venta y ni un espacio vac¨ªo en la balaustrada que mantiene las pujas por tel¨¦fono o en la sala. Por faltar, faltaba hasta el aliento. Pero no el v¨¦rtigo de los n¨²meros, que fue enorme.
La casa vendi¨® en su propuesta de arte contempor¨¢neo y de postguerra obra por valor de 744,9 millones de d¨®lares (unos 543,8 millones de euros), la cifra m¨¢s elevada de su historia en una sola sesi¨®n. Atr¨¢s quedaron los 691,5 millones de d¨®lares que logr¨® el a?o pasado durante la misma puja. Adem¨¢s cuatro artistas consiguieron su r¨¦cord mundial: Barnett Newman, Alexander Calder, Joseph Cornell y Joan Mitchel. Al tiempo obras de primer nivel de Andy Warhol, Francis Bacon, Gerhard Richter o Jean-Michel Basquiat, entre otros nombres, cambiaron de propietarios por cifras astron¨®micas. Apunten. Salieron a la venta 72 lotes y solo cuatro se quedaron sin vender. Alegr¨ªa (casi) plena.
Cuando Jussi Pylkkamen, presidente de Christie¡¯s en Europa, la persona que el 12 de noviembre pasado vendi¨® por 142 millones de d¨®lares el famoso tr¨ªptico de Bacon Tres estudios de Lucian Freud, la obra m¨¢s cara adjudicada nunca en subasta, exclam¨®: ¡°?Sold!¡±, la sala aplaudi¨®. Hab¨ªa rematado un soberbio lienzo (Black fire I) de Barnett Newman creado en 1961 por 84,1 millones de d¨®lares (61,4 millones de euros). Fue la pieza m¨¢s codiciada y fijaba un r¨¦cord mundial del pintor.
La noche se abri¨® con fuerza. Pronto lleg¨® el lote n¨²mero ocho. Sobre la cabeza de los asistentes, la organizaci¨®n colg¨® Poisson volant (Pez volador), uno de los famosos m¨®viles de Alexander Calder. Perteneciente a la colecci¨®n del industrial estadounidense Bergman, la escultura, de grandes dimensiones (61 x 226 x 101 cent¨ªmetros), part¨ªa en nueve millones de d¨®lares pero se remat¨® por 25,9 millones (18,9 millones de euros). Algo ayudar¨ªa que en China el pez simbolice la fortuna y la buena suerte.
Tambi¨¦n se esperaba mucho de Andy Warhol, y una vez m¨¢s no defraud¨®. Una peque?a (50,8 x 40,6 cent¨ªmetros) imagen blanca de Marilyn Monroe creada en 1962 por el artista Pop encontr¨® comprador, tras una puja de varios minutos, en 41 millones de d¨®lares (29,9 millones de euros), m¨¢s del doble de su precio m¨¢ximo estimado. La obra pertenec¨ªa a la marchante Eleanor Ward, quien, en su tiempo, ofreci¨® al artista su primera exposici¨®n individual.
Id¨¦ntica atracci¨®n entre los coleccionistas demostr¨® Race Riot. La serigraf¨ªa sobre lienzo de Warhol recoge ¡ªa trav¨¦s de im¨¢genes extra¨ªdas de la prensa¡ª los disturbios vividos durante 1963 en Birmingham (Alabama, Estados Unidos) como respuesta a la segregaci¨®n racial que sufr¨ªa la poblaci¨®n negra. La obra se remat¨® en 62,9 millones de d¨®lares (45,9 millones de euros).
En esta fren¨¦tica subasta, Francis Bacon tambi¨¦n levant¨® la mano y reclam¨® la atenci¨®n. Y no le fue mal. Tres estudios para un retrato de John Edwards, de 1984, se vendi¨® por 80 millones de d¨®lares (unos 59 millones de euros), m¨¢s o menos la estimaci¨®n que manejaba Christie¡¯s. Y aunque no fue la obra m¨¢s cara de la noche, s¨ª result¨® un tremendo negocio para su propietario. La pintura la vendi¨® el multimillonario taiwan¨¦s Pierre Chen, quien, al parecer, la habr¨ªa comprado en una transacci¨®n privada hace una d¨¦cada por 15 millones de d¨®lares. El tr¨ªptico lo gan¨® un comprador asi¨¢tico.
Pero junto a la pieza de Barnett Newman, el gran protagonista de la jornada, al menos en t¨¦rminos de calidad, fue un mark rothko de 1952. La obra, untitled, sin t¨ªtulo, corresponde a su etapa de madurez, y a trav¨¦s de una estructura de bloques de colores logra que el ¨®leo anaranjado extendido sobre lienzo parezca que amaneciera en los vol¨²menes horizontales de la composici¨®n. Un coleccionista ha entendido que no hablamos de una pieza cualquiera y ha pagado por ella 66,2 millones de d¨®lares (48,3 millones de euros). Esta joya hab¨ªa estado en pr¨¦stamo durante d¨¦cadas en el Museo de Arte de Filadelfia.
Otro maestro del expresionismo abstracto, Jackson Pollock, ha tenido menos fortuna. El cuadro Number 5, 1951 (Elegant Lady) se cerraba en 11,3 millones de d¨®lares (8,2 millones de euros), una cifra por debajo de su m¨ªnimo estimado (12 millones). La tela, propiedad del coloso energ¨¦tico alem¨¢n E.ON, sal¨ªa a la venta para hacer caja y ayudar a seguir manteniendo sus actividades culturales. Y ha cumplido su objetivo econ¨®mico. En 1980, el cuadro lo compr¨® Veba AG (la compa?¨ªa que acabar¨ªa fusion¨¢ndose con la energ¨¦tica germana) por unos 500.000 d¨®lares. Adem¨¢s tiene su particular historia. Pollock se lo cambi¨® a la galerista Martha Jackson en 1954 por el descapotable con el que se estrellar¨ªa mortalmente dos a?os m¨¢s tarde.
M¨¢s cerca en el tiempo, dos artistas vivos demostraron que contin¨²an siendo objeto de deseo. Gerhard Richter vendi¨® una de sus conocidas Abstraktes Bild de 1990 por 29,2 millones de d¨®lares (21,3 millones de euros). Al parecer, su anterior propietario la adquiri¨® durante 2012 en Sotheby¡¯s por 17,4 millones de d¨®lares. As¨ª que le ha dado un pase nada desde?able. Eso s¨ª, quien ha estado muy activo en la sesi¨®n ha sido la galer¨ªa Gagosian, tal vez la m¨¢s poderosa del mundo. De hecho, pagaba (o pujaba en nombre de otro) 23,6 millones de d¨®lares (17,2 millones) por If You, un esmalte sobre aluminio de gran tama?o (274,3 x 182,8 cent¨ªmetros) de Christopher Wool, uno de los artistas que representa.
Para muchos, lo sucedido anoche en Nueva York fue, a su manera, un d¨¦j¨¤ vu. El pasado lunes la propia Christie¡¯s organizaba, de la mano de Loic Gouzer, un experto de solo 33 a?os, otra subasta de arte contempor¨¢neo con el provocador t¨ªtulo If I live I¡¯ll see you tuesday (Si estoy vivo nos vemos el martes). Se refer¨ªa al riesgo de convocar dos pujas similares tan pr¨®ximas en el tiempo. La jugada le sali¨® muy bien. Vendi¨® el 97% de los lotes y gener¨® 134,6 millones de d¨®lares (97,8 millones de euros). Nada menos que 16 artistas lograron su r¨¦cord mundial. Nunca Peter Doig, On Kawara, Glenn Ligon, Richard Prince o Thomas Schutte hab¨ªan adjudicado tan cara su obra. Es m¨¢s, el desaparecido artista alem¨¢n Martin Kippenberg ¡ªdespu¨¦s de una intensa puja de seis minutos¡ª remat¨® un lienzo fechado en 1988 por la inesperada cifra de 18,6 millones de d¨®lares (13,5 millones de euros). El precio de partida era de nueve millones.
Este mi¨¦rcoles por la tarde Sotheby¡¯s intentar¨¢ dar respuesta tambi¨¦n en Nueva York a las multimillonarias pujas de Christies¡¯s, y para ello cuenta, entre otras piezas, con un Popeye de Jeff Koons, estimado en 25 millones de d¨®lares, la obra Six self portraits (Seis autorretratos), firmada por Andy Warhol, que se valora entre 25 y 35 millones de d¨®lares y el lienzo Blau (Azul), de Richter. ?Ser¨¢ suficiente??
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.