16 escritores argentinos a tener en cuenta
Breve paseo por el panorama literario actual: desde el poeta Antonio Calveria, de 85 a?os, hasta el autor que se atrevi¨® a engordar 'El Aleph' y ha sido denunciado por Mar¨ªa Kodama
Lo que viene a continuaci¨®n es un espejo de la literatura actual argentina, un reflejo de lo que se escribe en el pa¨ªs. Faltan y faltar¨¢n siempre escritores notables. Muchos de ellos, como Ana Mar¨ªa Shua, Mempo Giardinelli, Liliana Heker, Alan Pauls, Eduardo Sacheri, Guillermo Mart¨ªnez, Mart¨ªn Kohan, Leopoldo Brizuela¡ O los poetas Jorge Fondebride, Diana Bellesi y Tamara Kamenszain, forman parte del grupo de 60 escritores invitados por el ministerio de Cultura argentino a la Feria Internacional del Libro de Guadalajara 2014.
Otros no asistir¨¢n. En ese grupo se encuentran tambi¨¦n escritores destacados como Sylvia Iparraguirre, Gabriela Cabez¨®n C¨¢mara, Federico Falco, Rodrigo Fres¨¢n, Jorge As¨ªs, Pablo Ramos, Matilde S¨¢nchez, Jorge Consiglio, Iosi Havilio, Juan Forn, Daniel Guebel, Pedro Mairal, Washington Cucurto, Sergio Schejfec, Patricio Pron; periodistas y escritores como Leila Guerriero, Mart¨ªn Caparr¨®s y Jorge Fern¨¢ndez-D¨ªaz; poetas como Luis Ben¨ªtez (¡°Anoche alguien derrib¨® un ¨¢rbol/ Que cumpl¨ªa 3.000 a?os / Erguido sobre el campo¡±) y dramaturgos como Rafael Spregelburd.
1. Arnaldo Calveyra (Provincia de Entre R¨ªos, 1929)
?Imaginan a un poeta de 85 a?os sacando una libretilla diminuta para anotar alguna frase mientras charla con un periodista? ?se es Calveyra, uno de los poetas contempor¨¢neos m¨¢s relevante en lengua espa?ola, due?o de una obra donde se funden la poes¨ªa y la narraci¨®n.
En su primer libro, Cartas para que la alegr¨ªa, publicado en 1959, con 30 a?os, escribe unos versos memorables:
"En el ferry fue tan lindo mirar el agua. / ?Y sabes?, no supe que estaba triste hasta que me pidieron que cantara."
Y el ¨²ltimo texto de su Poes¨ªa reunida (Adriana Hidalgo Editora, 2012) dice:
"Deseos de escribir la palabra ruise?or, de quedarme con ella toda la siesta y ver si cuando merme el sol se puede divisar un ruise?or o a un lindo boyerito."
Despu¨¦s de publicar su primer libro de poemas, Calveyra se march¨® a Francia con una beca y all¨ª se qued¨® hasta el d¨ªa de hoy. Casi todos sus libros fueron publicados en franc¨¦s. S¨®lo comenz¨® a editarse en espa?ol hace unos 20 a?os.
2.- Abelardo Castillo (nacido en San Pedro, provincia de Buenos Aires, en 1935)
Ha sido un personaje clave en la actividad cultural del ¨²ltimo medio siglo en Argentina, como escritor y como director de varias revistas literarias. Es dramaturgo, novelista y este a?o la editorial Alfaguara acaba de publicar sus Diarios (1954-1991). Su mayor prestigio lo ha obtenido como escritor de cuentos. La escritora Sylvia Iparraguirre, su pareja desde hace 44 a?os, fue la encargada de hacer una antolog¨ªa sobre el cuento argentino con motivo de la feria del libro de Francfurt y ha sido tambi¨¦n la encargada de ampliar la antolog¨ªa de cara a la feria de Guadalajara. En aquella ocasi¨®n, el cuento escogido para representar a Castillo fue El cruce del aqueronte. Y ahora, en Guadalajara, el relato suyo seleccionado es Carpe diem, que comienza as¨ª: ¡°-A ella le gustaba el mar, andar descalza por la calle, tener hijos, hablaba con los gatos atorrantes, quer¨ªa conocer el nombre de las constelaciones; pero no s¨¦ si es del todo as¨ª, no s¨¦ si de veras se la estoy describiendo ¨Cdijo el hombre que ten¨ªa cara de cansancio¡±.
Entre sus novelas m¨¢s destacadas se encuentra El que tiene sed, obra de car¨¢cter biogr¨¢fico sobre su adicci¨®n al alcohol. Su taller literario en uno de los de m¨¢s solera en Argentina. A pesar de que suele recibir a sus alumnos dici¨¦ndoles que los talleres no sirven para nada, se han formado escritores que hoy gozan de plena vigencia como Liliana Heker (quien a su vez dirige un taller desde 1978), Samanta Schweblin, Juan Forn o Pablo Ramos. El pasado 12 de noviembre Abelardo Castillo obtuvo junto a Ricardo Piglia el premio Konex de Brillante a las letras argentinas de la ¨²ltima d¨¦cada, otorgado por la fundaci¨®n Konex. Se trata de la mayor distinci¨®n de la literatura argentina. En 1984 el galard¨®n lo recibi¨® Borges, a quien siguieron Adolfo Bioy Casares (1994) y H¨¦ctor Tiz¨®n (2004). Abelardo Castillo excus¨® su presencia en la entrega de premios a causa de una ¡°contractura arcaica¡±. Pero recibi¨® a una periodista de P¨¢gina 12 en su casa a la que confes¨®: ¡°Me pone muy contento que el Konex de Brillante lo hayan ganado antes escritores como Borges, Bioy Casares y Tiz¨®n. Este tipo de premios le importa ganar a un escritor porque no se postula. Vale decir que no es que mand¨¦ una obra de teatro, un libro de cuentos o una novela, sino que me eligi¨® un grupo de pares ¨Cescritores, periodistas y cr¨ªticos literarios¨C y es muy gratificante¡±.
3. Hebe Uhart
Naci¨® en Moreno, provincia de Buenos Aires, en 1936. Sobre sus cuentos dijo Fogwill que est¨¢n entre los mejores de la literatura argentina. Uno de sus mejores relatos es Guiando la hiedra. Y comienza as¨ª:
"Aqu¨ª estoy acomodando las plantas, para que no se estorben unas a otras, ni tengan partes muertas, ni hormigas. Me produce placer observar c¨®mo crecen con tan poco; son sensatas y se acomodan a sus recipientes; si estos son chicos, se achican, si tienen espacio, crecen m¨¢s. Son diferentes de las personas: algunas personas, con una base mezquina, adquieren unas frondosidades que impiden percibir su real tama?o; otras, de gran coraz¨®n y capacidad, quedan aplastadas y confundidas por el peso de la vida. En eso pienso cuando riego y trasplanto y en las distintas formas de ser de las plantas: tengo una que es resistente al sol, dura, como del desierto, que tom¨® para s¨ª s¨®lo el verde necesario para sobrevivir; despu¨¦s una hiedra grande, bonita, intrascendente, que no tiene la menor pretensi¨®n de originalidad porque se parece a cualquier hiedra que se puede comprar en todos lados, con su verde tornasolado. Pero tengo otra hiedra, de color verde uniforme, que se volvi¨® chica; ella parece decir; ¡®Los tornasoles no son para m¨ª¡¯; ella responde creciendo muy lentamente, umbr¨ªa y segura en su cautela. Es la planta que m¨¢s quiero; de vez en cuando la gu¨ªo, yo comprendo para d¨®nde quiere ir y ella entiende para d¨®nde yo la quiero guiar."
En una entrevista coment¨®:
"Sigo el consejo de Chejov, en el que creo absolutamente: dejar de lado el contenido de lo que dice el personaje para atender a c¨®mo lo dice; mirar del personaje c¨®mo se mueve , c¨®mo camina, c¨®mo se calla, etc¨¦tera. Lo que alguien dice, en materia de juicios valorativos, ideol¨®gicos, entra en el circuito de su clase social, grupos de pertenencia. Todos escuchamos m¨¢s o menos las mismas radios, leemos los mismos diarios, por lo tanto la mayor¨ªa de las veces nuestros comentarios que pretenden ser muy personales, no lo son. A m¨ª me interesa la especificidad de las personas."
Alfaguara Argentina public¨® sus Relatos reunidos en 2010.
4. Juana Bignozzi (Buenos Aires, 1937)
En el pa¨ªs de Alfonsina Storni (1892-1938) y Alejandra Pizarnik (1936-1972) sigue habiendo excelentes mujeres poetas. Ah¨ª est¨¢n, por ejemplo, Diana Bellessi, de 68 a?os, Tamara Kamenszain, de 67, y Juana Bignozzi, de 77. Vivi¨® en Espa?a entre 1974 y 2004 traduciendo libros de italiano y franc¨¦s.
En una entrevista con la revista digital T¨®nica declar¨® el pasado julio:
"El pobrismo no sirvi¨® nunca para nada. No creo en la caridad. La detesto. Bueno, no soy cat¨®lica, nunca lo fui (¡). Subvencionar a los pobres es quitarles la dignidad. En un momento s¨ª, pero es una medida pasajera, no es una pol¨ªtica de Estado subvencionar un pa¨ªs. (¡) No soy peronista desde el fondo del alma (¡). No soy gorila y no soy antiperonista, pero no soy peronista. Es una estructura como ajena a m¨ª. Adem¨¢s estos diez a?os [de Gobiernos kirchneristas] fueron p¨¦simos."
He aqu¨ª su poema La vida plena, de su primer libro, Mujer de cierto orden, escrito a los veintisiete a?os:
"A algunos les han quitado las ganas de hablar,/ pasan mudos por el amor, aman perros vagabundos / y tienen una piel tan sensible / que nuestros peque?os saludos cotidianos / pueden producirles heridas casi de muerte. / Nosotros, seres amables e inofensivos, / miramos los gatos enfermos, las mujeres con collares / que pasan por la calle /y sentimos un desamor agradable, / casi suficiente."
5.- Ricardo Piglia (Adrogu¨¦, provincia de Buenos Aires, 1940)
Su novela Respiraci¨®n Artificial, publicada en 1980, en plena dictadura, marc¨® un antes y un despu¨¦s en la literatura del pa¨ªs. Plata Quemada y Blanco Nocturno tambi¨¦n fueron aclamadas en el mundo hispano. Adem¨¢s de novelista y cuentista, Piglia es un excelente ensayista literario. En Youtube hay cuatro clases impagables de Piglia sobre Borges, grabadas por la Televisi¨®n P¨²blica argentina. Autores como Sergio Olgu¨ªn (Buenos Aires, 1967) no tienen empacho en confesar que Piglia les ense?¨® a leer con nuevos ojos la literatura argentina.
El pasado 12 de noviembre Piglia fue galardonado junto a Abelardo Castillo con el premio Konex de Brillante a las letras argentinas de la ¨²ltima d¨¦cada, m¨¢xima distinci¨®n literaria en el pa¨ªs. Los anteriores galardonados fueron Borges (1984), Bioy Casares (1994) y H¨¦ctor Tiz¨®n (2004). Piglia no pudo asistir a la entrega del premio a causa de una enfermedad. A trav¨¦s de su editor argentino, encargado de recoger el premio en su nombre, se disculp¨® por su salud: ¡°Estoy un poco embromado, nada grave¡±.
6.- Alberto Laiseca (Rosario, 1941)
Se considera fundador de lo que ¨¦l llama ¡°realismo delirante¡±. Su obra est¨¢ marcada por el terror, la fantas¨ªa y el humor. Tiene dos novelas descomunales: Los Sorias (1998) y El jard¨ªn de las m¨¢quinas parlantes (1993). Los Sorias, con 1.344 p¨¢ginas, es la novela m¨¢s larga de la literatura argentina. Sobre ella, Ricardo Piglia escribi¨®: ¡°Es la mejor novela que se ha escrito en la Argentina desde Los siete locos [de Roberto Arlt]¡±.
Goza de gran predicamento entre un sector de los j¨®venes escritores, pero no ha sido traducido a ning¨²n idioma. ¡°Lo menos que podr¨ªan hacer es publicar mis libros al ingl¨¦s¡±, se queja para a?adir: ¡°Igual, hay algo mucho peor que no ser traducido y es que no les gustes a los j¨®venes¡±.
Laiseca se confiesa un gran admirador de Edgar Allan Poe y de Stephen King y cuando se le pide recomendar alg¨²n escritor argentino actual solo acierta a dar nombres de antiguos alumnos de su taller, entre los cuales se encuentra Selva Almada. Sus alumnos destacan que ¨¦l genera disc¨ªpulos muy distintos, ¡°no clones de un taller literario¡±.
7.- Guillermo Saccomano (1948, Buenos Aires)
Trabaj¨® como publicista y como guionista de c¨®mics para dibujantes famosos antes de dedicarse de lleno a la escritura. Gan¨® el Premio Nacional de Literatura 1999-2000 con El buen dolor. Su libro C¨¢mara Gesell (2012) fue saludado por el escritor argentino Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz como una ¡°topograf¨ªa de la maldad¡±, que ¡°hace volar por el aire la hipocres¨ªa de una sociedad donde nadie se siente culpable¡±
En una entrevista en La Naci¨®n, Saccomano comentaba:
"Mi padre era sastre, pero de noche estudiaba periodismo. (¡) Mi padre era socialista y mi madre, sin ser peronista, una admiradora de Eva Per¨®n, a la que, dec¨ªa, todas las mujeres argentinas le deb¨ªan algo. Esto hac¨ªa que en mi casa se viviera cierta tensi¨®n pol¨ªtica, que no pasaba a mayores, pero all¨ª estaba."
En otra entrevista publicada en P¨¢gina 12, donde suele colaborar, declar¨®:
"Yo lamento tener gustos de clase, pero en este pa¨ªs o te aline¨¢s con [Roberto] Arlt o te aline¨¢s con Bioy [Casares]. En mi caso hay una persistencia. Yo tengo la sensaci¨®n f¨ªsica de cuando le¨ª El juguete rabioso [de Arlt] por primera vez. La abuela estaba agonizando ese verano. Yo andaba al borde de la depresi¨®n y me acababa de dar un saque con Crimen y castigo. El juguete... lo le¨ª en un galp¨®n en el fondo de casa, una tarde de verano de calor terrible, entre las tres y las siete de la tarde. Si a los 16 a?os te pega Arlt, te va a seguir pegando toda la vida."
Una de las obras que suele recomendar en sus talleres es Ser escritor (Seix Barral), de Abelardo Castillo.
8.-C¨¦sar Aira (Pringles, Buenos Aires, 1949)
Es uno de los grandes referentes vivos de la literatura argentina. El escritor y editor argentino Luis Chitarroni escribi¨®:
"A veces, quien lee a Aira, debe tener paciencia: esperar el hecho que va a cambiar al libro totalmente. En sus libros hay siempre un click."
Su obra, tan caudalosa como desinhibida, sigue la senda marcada por Osvaldo Lamborghini (1940-1985), escritor que se mantuvo al margen de la cultura oficial y convulsion¨® los c¨¢nones literarios. El propio Aira ha perdido la cuenta de las novelas publicadas. En mayo dec¨ªa que deben haber sido unas sesenta o setenta. En 2012 la revista Perfil invit¨® a 23 escritores para que eligieran su obra preferida de Aira y no hubo apenas repetici¨®n de t¨ªtulos. No obstante, si hubiera que destacar algunas de las ¡°novelitas", como el mismo define a sus novelas cortas, que le han deparado mayor prestigio, habr¨ªa que mencionar Los fantasmas, Ema, la cautiva, La liebre, o El mago.
En una entrevista publicada en 2009 en La Naci¨®n le preguntaron:
"?Qu¨¦ opini¨®n le merecen los escritores serios, los intelectuales?"
Y Aira contest¨®:
"No saben lo que se pierden. No saben cu¨¢nta libertad est¨¢n perdiendo. Yo pienso, y lo he dicho varias veces, que es cada vez m¨¢s dif¨ªcil escribir literatura seria hoy."
Aira considera todos sus libros un experimento. ¡°Son pensados como tales¡±, reconoci¨® en 2004 a Clar¨ªn, ¡°pero no se trata de experimentos hechos con la seriedad met¨®dica de un cient¨ªfico sino con la seriedad amet¨®dica de un sabio loco o de un ni?o que juega al qu¨ªmico y mezcla dos sustancias para ver qu¨¦ pasa¡±. Para muchos j¨®venes, esa desinhibici¨®n es el gran faro a seguir.
9.- Marcelo Cohen (Buenos Aires, 1951)
Es el due?o de eso tan dif¨ªcil de alcanzar que podr¨ªa llamarse un mundo propio, una obra coherente y rica. Sobre Cohen dijo Ricardo Piglia: ¡°De su camada, que es muy buena, [Alberto] Laiseca es el n¨²mero dos. El mejor es Marcelo Cohen, un maestro. Est¨¢ escribiendo una obra monumental, inventando un mundo paralelo, un lenguaje nuevo¡±. Para algunos libreros y editores, Cohen es el m¨¢s recomendable de los escritores argentinos. Todos sus lectores destacan la ambici¨®n sostenida de su obra. A pesar de que vivi¨® en los ochenta en Espa?a no es muy conocido fuera de su pa¨ªs. Entre sus libros podr¨ªamos destacar los Relatos Reunidos, publicados en Alfaguara. Cohen piensa que la que la literatura est¨¢ para cosas m¨¢s complejas que s¨®lo contar historias.
El a?o pasado declar¨® en la revista ?:
"La literatura est¨¢ para ampliar las vivencias, que el pensamiento se expanda y la imaginaci¨®n pueda ser mayor y podamos sentir m¨¢s. Y, adem¨¢s, para darnos maneras de decir que nos permitan liberarnos de un r¨¦gimen del decir."
10.- Claudia Pi?eiro (Buzarco, provincia de Buenos Aires, 1960)
Es una de las escritoras argentinas m¨¢s le¨ªdas. Mientras trabajaba como contable de varias empresas acud¨ªa a varios talleres literarios. El que m¨¢s le influy¨® fue el de Guillermo Saccomano. En 2005 gan¨® el VIII Premio Clar¨ªn de Novela con Las viudas de los jueves. Y desde entonces, cada obra suya es una garant¨ªa de ¨¦xito de ventas.
Rosa Montero, miembro de aquel jurado, dijo en su d¨ªa:
"La novela habla de una serie de vecinos que viven en un country, en una de esas organizaciones residenciales de lujo, sumergidos en una de esas felicidades aparentemente perfectas y pl¨¢sticas, como la felicidad de los anuncios de televisi¨®n que muestran esa imagen de la familia perfecta de padres rubios y sonrientes, de hijos rubios y sonrientes, de perros rubios y sonrientes, saltando por praderas verdes y jardines maravillosos. Pero en realidad debajo de esa aparente felicidad palpita, crepita y crece, poco a poco y de manera inexorable, la perdici¨®n, la humillaci¨®n y la derrota."
A trav¨¦s de una trama policial Pi?eiro dibujaba las hipocres¨ªas y los miedos de la clase media alta que se enriqueci¨® bajo el menemismo, recluida en los countrys o barrios privados de las afueras de Buenos Aires. En 2011 Pi?eiro regres¨® a la vida de la burgues¨ªa en los countrys con Betib¨², que tambi¨¦n fue n¨²mero uno en ventas. En 2013 public¨® Un comunista en calzoncillos (Alfaguara), una novela sobre la infancia ambientada en el inicio de la dictadura militar.
11. Fabi¨¢n Casas (Buenos Aires, 1965)
Es poeta, narrador y columnista. ¡°No tengo imaginaci¨®n, as¨ª que escribo sobre lo que he vivido, sobre los relatos que escucho en diferentes lugares. (¡) Me gusta escribir buscando la voz extra?a, no la voz personal. Escribir sintiendo la piedra en el zapato, verg¨¹enza ajena por el texto, incertidumbre y, claro, alegr¨ªa¡±, comentaba a este diario en una entrevista. En 2007 recibi¨® en Alemania el premio Anna Seghers, que reconoce a un autor latinoamericano cada a?o.
En uno de sus libros, Los Lemmings y otros (2005) se encuentra el relato El Bosque Pulenta, que comienza as¨ª:
"Se trata de dos chicos que salen a la vez por las puertas traseras del mismo taxi y que, por miles de motivos, no se vuelven a ver m¨¢s. Uno de ellos soy yo, el que cuenta la historia. El Otro es M¨¢ximo Disfrute, mi primer amigo, maestro, instructor, como se le quiera llamar¡±.
Mi mam¨¢ y su mam¨¢ trabajaban en la misma f¨¢brica de ropa interior femenina. Lo primero que recuerdo es que estamos debajo de algo."
12. Selva Almada
Es la escritora del momento. Si pregunta uno en muchas librer¨ªas de Buenos Aires por un escritor joven es muy probable que el librero muestre alg¨²n libro de Selva Almada. Hasta hace tres a?os su nombre era un secreto a voces en el mundillo literario. Se hablaba de una chica del interior, es decir de provincias, que hab¨ªa publicado un libro de poes¨ªa y otro de cuentos muy bueno titulado precisamente Una chica de provincia. Pero pasaban inadvertidos para el gran p¨²blico. Hasta que en 2012 la peque?a editorial argentina Mardulce public¨® El viento que arrasa. Beatriz Sarlo, una de las cr¨ªticas literaria m¨¢s influyente del pa¨ªs la ensalz¨® y ese mismo a?o, La revista ?, del grupo Clar¨ªn, hizo una encuesta entre cien referentes de la cultura argentina y sali¨® elegido libro del a?o.
En El viento que arrasa se pueden leer pasajes como este:
"-Quiero hablar con vos.
Brauer la mir¨® sin dejar de hacer lo que estaba haciendo. Ella tard¨® en empezar y ¨¦l pens¨® que se tratar¨ªa de una prostituta. Era bastante corriente que los camioneros de viajes largos llevaran mujeres as¨ª de un lado a otro y las aguantaran mientras ellas se hac¨ªan una changa. Tal vez despu¨¦s compart¨ªan el dinero.
Viendo que no arrancaba, el Gringo dijo:
-Vos dir¨¢s.
-No te acord¨¢s de m¨ª.
Brauer la mir¨® con m¨¢s atenci¨®n. No, no la recordaba.
-No importa -dijo ella-, nos conocimos hace mucho y por poco tiempo. Cuesti¨®n que aquel es hijo tuyo."
Selva Almada ha publicado este a?o la novela Ladrilleros (en Mardulce) y el libro Chicas muertas (Literatura Random House), sobre tres mujeres asesinadas en los 80.
Se form¨® en el taller de Alberto Laiseca y ahora dirige uno propio.
13.- F¨¦lix Bruzzone (Buenos Aires, 1976)
Es hijo de desaparecidos v¨ªctimas de la dictadura militar (1976-1983) y ha escrito varias obras de ficci¨®n en las que profundiza en esa cuesti¨®n. ¡°Soy hijo de desaparecidos, es una condici¨®n real, no es inventada. Pero eso no me convirti¨® en escritor¡±, ha declarado en alguna entrevista. En 2008 public¨® el libro de cuentos 76 (a?o en el que naci¨® y en el que comienza la dictadura) y Los Topos, que comienza as¨ª: ¡°Mi abuela Lela siempre dijo que mam¨¢, durante el cautiverio en la ESMA hab¨ªa tenido otro hijo¡±. Bruzzone trabaja como limpiador de piscinas. Su novela Barrefondo versa sobre un limpiador de piletas que cree ser testigo de un crimen. En sus obras, seg¨²n ¨¦l, siempre hay una constante: los personajes quieren saber y no saben. Su ¨²ltima novela, Las Chanchas (2014, Random House), se inicia con la escena de un hombre que sale con la basura a la calle y se encuentra con dos chicas, que gritan: ¡°Nos quieren secuestrar, por favor, se?or, nos quieren secuestrar!¡±. En 2010 gan¨® en Berl¨ªn el premio Anna Seghers, que reconoce a un autor latinoamericano cada a?o.
14. Pablo Katchadjian (Buenos Aires, 1977)
Es el escritor preferido de C¨¦sar Aira entre las nuevas generaciones. Toda su obra ha sido publicada en peque?as editoriales. Es conocido, sobre todo, por sus novelas Qu¨¦ hacer (Bajo la luna, 2010),?Gracias (Blatt & R¨ªos, 2011) y?La libertad total (Bajo la luna, 2013). Public¨® sus primeros poemas y cuentos en su peque?¨ªsima editorial la Imprenta Argentina de Poes¨ªa (IAP). Ah¨ª dio a conocer El Mart¨ªn Fierro ordenado alfab¨¦ticamente (2007), en el que ordena el cl¨¢sico argentino seg¨²n el alfabeto. Ejemplo:
"a andar con los avestruces:
a andar declamando sueldos.
a ayudarles a los piones
A bailar un peric¨®n
a bramar como una loba
a buscar almas m¨¢s tiernas."
En su Imprenta Argentina de Poes¨ªa public¨® en 2009 El Aleph engordado. A las 4.000 palabras del cuento de Borges a?adi¨® 5600 de su propia cosecha. Fue un libro del que distribuy¨® apenas 200 ejemplares. A causa de esa obra, la viuda de Borges, Mar¨ªa Kodama, lo denunci¨® en 2011 por plagio. Katchadjian fue absuelto en primera instancia pero los abogados de Kodama recurrieron y la C¨¢mara de Casaci¨®n estim¨® que con el ¡°engorde¡± Katchadjian ha violado los derechos de autor. La defensa de Katchadjian pretende incorporar en el juicio como testimonios de expertos al escritor C¨¦sar Aira y a la ensayista y cr¨ªtica literaria Beatriz Sarlo. Continuar¨¢.
15. Ariana Harwicz (Buenos Aires, 1977)
Public¨® su primera novela en Espa?a (Lengua de Trapo) y en Argentina (Paradiso) al mismo tiempo el a?o pasado. Se titula M¨¢tate, amor y cuenta la historia en cap¨ªtulos breves de ¡°una mujer salvaje atrapada en una selva y en una familia¡±, seg¨²n la autora, una mujer que se plantea matar al marido y al beb¨¦. Sobre su segunda novela, La d¨¦bil mental (editorial Mardulce), el cr¨ªtico Maximiliano Tomas destac¨® en La Naci¨®n:
"Pocas veces la relaci¨®n entre madre e hija se ha visto tratada de la manera en que lo hace La d¨¦bil mental. Y que Harwicz logra, en apenas cien p¨¢ginas de un poder narrativo hipn¨®tico, exponer al amor y a la pasi¨®n sexual sin m¨¢scaras: el enamorado como un peligroso monoman¨ªaco, atrapado en toda su irresistible y salvaje estupidez."
Estudi¨® en Buenos Aires filosof¨ªa, gui¨®n cinematogr¨¢fico y dramaturgia. Hace unos a?os se march¨® a estudiar Literatura Comparada en La Sorbona y ahora vive en un pueblo de solo 13 habitantes situado a 180 kil¨®metros del sur de Par¨ªs.
16. Samanta Schwebling (Buenos Aires, 1978)
Public¨® en 2002 su primer libro de cuentos, El n¨²cleo del disturbio, y en 2009 el segundo, P¨¢jaros en la boca, con el que obtuvo el premio Casa de Am¨¦ricas. Ella era la escritora del momento hace diez a?os, la Selva Almada de entonces. En 2010, la revista Granta la seleccion¨® como uno de los ¡°mejores j¨®venes narradores en espa?ol¡±. Entre los 22 elegidos de aquel n¨²mero tambi¨¦n estaban los argentinos Patricio Pron (1975) y Pola Oloixarac (1977). En 2012 Schwebling gan¨® el Premio Internacional de Cuento Juan Rulfo, que se entrega en diciembre en Par¨ªs desde hace 30 a?os, por su relato Un hombre sin suerte. Este a?o acaba de publicar su primera novela, Distancia de rescate (Random House).
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