¡°Estoy aprendiendo a manejarme en televisi¨®n¡±

Durante a?os, la televisi¨®n era demasiado peque?a para M. Night Shyamalan. ¡°No era un medio en el que encajara mi est¨¦tica¡±, reconoce a EL PA?S sin disimulo el director de filmes como El sexto sentido o El protegido. Hombre de grandes producciones, conocido por un ego todav¨ªa mayor, no disimula el desd¨¦n que sent¨ªa por un medio que solo aprendi¨® a apreciar con Los Soprano. Fue cuando a sus ojos, la peque?a pantalla se convirti¨® en un dios ¡°capaz de infiltrarse en todo lo que hacemos, desde nuestra forma de vestir hasta nuestra conversaci¨®n¡±.

Aun as¨ª, tuvo que pasar m¨¢s de una d¨¦cada (y un par de sonados fracasos en cine como Airbender: El ¨²ltimo guerrero o After Earth) hasta que el realizador indio encontr¨® el proyecto televisivo a su medida. Su t¨ªtulo: Wayward Pines, cuyos diez episodios ya ha comenzado a emitir Fox en Espa?a.

Como una pel¨ªcula

¡°Todav¨ªa estoy aprendiendo a manejarme en televisi¨®n¡±, admite por una vez con humildad. El medio le ha gustado, pero le parece mucho m¨¢s duro que el cine. ?Cosas que aprendi¨®? ¡°A acabar cada episodio en un punto ¨¢lgido y a organizar los cortes para la publicidad¡±. ?Lo que cambi¨®? ¡°Me plante¨¦ Wayward Pines como si fuera una pel¨ªcula¡±.

A Shyamalan le ha gustado tanto esto de la televisi¨®n que no la descarta en un futuro pr¨®ximo y con alg¨²n proyecto m¨¢s personal aunque igual de enrevesado. ¡°Por el momento no puedo dar detalles, pero esta vez no esperar¨¦ a encontrar un guion que me interese¡±, a?ade cr¨ªptico, pero entusiasmado.

¡°Estoy aprendiendo a manejarme en televisi¨®n¡±

Basada en el best seller hom¨®nimo de Blake Crouch, a Shyamalan le encant¨® su premisa: las cosas nunca son tan perfectas como parecen serlo en una peque?a localidad de Idaho (EE UU) llamada Wayward Pines, donde el agente Ethan Burke (encarnado por Matt Dillon) se despierta vapuleado sin saber c¨®mo le ha llevado hasta all¨ª su b¨²squeda de dos compa?eros desaparecidos. Lo que m¨¢s despert¨® la curiosidad del realizador es que no supo hacia d¨®nde iba el guion hasta llegar a sus ¨²ltimas p¨¢ginas.

Pensado para una pel¨ªcula, Shyamalan transform¨® el guion y le dio el tono, dirigi¨® el primer episodio y dej¨® el resto de la ficci¨®n en manos de su creador y productor, Chad Hodge.

Proceso art¨ªstico

Con un marcado sabor a Twin Peaks, Shyamalan entiende las comparaciones, pero advierte: ¡°El mundo que presentamos evoluciona en algo completamente diferente a mitad de la serie¡±.

La elecci¨®n de Dillon como protagonista le pareci¨® obvia, pese a que para el actor tambi¨¦n era su primer trabajo en el terreno televisivo. ¡°Algo he hecho, pero poco¡±, reconoce un actor a quien le gusta el medio, porque no hay ni principio ni final. ¡°En la televisi¨®n vas construyendo los personajes. Ellos cuentan la historia, no al rev¨¦s¡±, explic¨® a este diario.

A ¨¦l se suman otros int¨¦rpretes como Terrence Howard, Juliette Lewis o Melissa Leo, dispuestos a contar una historia que Shyamalan asegura que forjaron juntos en la ¡°fortaleza¡± que el realizador tiene en Filadelfia. As¨ª es como le gusta llamar a su rancho. ¡°Cenamos juntos, lo que para m¨ª es un ritual sagrado en todos mis filmes. Terrence toc¨® la guitarra, cantamos, le¨ªmos el guion y expusimos nuestras ideas. El fin fue tomarnos el proceso como una expresi¨®n art¨ªstica, no como un trabajo¡±, cuenta el director.

Es la parte que m¨¢s ha disfrutado de la televisi¨®n, la ¡°escritura colectiva¡±, que le llev¨® de seis a nueve meses trabajando con el equipo de guionistas en lugar de la soledad de un escritor de cine.