Aquella Espa?a s¨®rdida

Recuerdo en blanco y negro el cine m¨¢s impresionante y perdurable que se ha realizado en este pa¨ªs. Se hizo en la interminable y s¨®rdida noche del franquismo y no fueron muchos los espectadores que pudieron verlo. La censura era ignorante, mezquina y cerril, pero no tan ciega como para intuir o certificar que esas pel¨ªculas conten¨ªan dinamita, que el esperpento o la tragicomedia pod¨ªan hablar corrosivamente, con lucidez dolorosa, provocando la risa, la piedad, el horror y la mueca, sobre algo bastante insoportable llamado realidad.

Las asfixiaron econ¨®micamente, retrasaron su estreno o las destinaron a la marginalidad y en alg¨²n caso estuvieron prohibidas durante intolerable tiempo, aunque recibieran el mayor honor en el festival de Cannes, como fue el caso de Viridiana. Pero ah¨ª est¨¢n, con su talento, su fuerza, su mala leche y su expresividad intactas. Estoy hablando de El pisito, El cochecito, Calle Mayor, Pl¨¢cido, El verdugo, El extra?o viaje, La caza, La t¨ªa Tula. Y, c¨®mo no, la ¨¢spera, brutal y veraz El mundo sigue.

Se rod¨® hace 52 a?os, pero los inquisidores pusieron un notable celo en que no la viera ni dios. Creo que mi primera cita con ella fue en la Filmoteca, hacia finales de los 70. Me dej¨® aterrado, con la sensaci¨®n de que se hab¨ªa atrevido con tanta audacia como inteligencia a hablar de la colectiva miseria moral, la hipocres¨ªa que impon¨ªa la honorabilidad, la redenci¨®n social y familiar despu¨¦s de vender el cuerpo y el alma a condici¨®n de haber triunfado en la transacci¨®n, hacerse rica, comprar la respetabilidad, la desesperaci¨®n, la envidia y la ira de la que poseyendo id¨¦nticos o superiores atributos f¨ªsicos que esa hermana prostituida y trepa, permanece en la miseria al haber elegido un matrimonio desastroso con un perdedor ego¨ªsta y vil.

Fernando Fern¨¢n-G¨®mez, aquel se?or con cerebro y sensibilidad privilegiadas, pensamiento libre, una observaci¨®n ¨²nica, comprensiva y a veces demoledora de las personas y las cosas, dotado de irremplazable talento oral, brillante escribiendo, interpretando y dirigiendo, alguien con valores renacentistas que sobrevivi¨® como pudo en el mundo que le pari¨®, retrata de forma admirable una realidad permanentemente mediocre, opresiva, machista hasta la n¨¢usea, dominada por el miedo, en esta pel¨ªcula que describe el ritmo de las calles, el ambiente de los bares, el pavor o el desaf¨ªo al ¡°que dir¨¢n¡±, la resignaci¨®n sufriente, la amargura sin tregua, con una autenticidad y un realismo perdurables.

Tambi¨¦n extrae lo mejor de sus int¨¦rpretes. Gemma Cuervo y Lina Canalejas crean a dos hermanas en posesi¨®n de un desgarro memorable, intensidad, matices. Todo en El mundo sigue resulta perturbador y cre¨ªble. Sales revuelto. Y deja huella. Es un cl¨¢sico del cine espa?ol. Y te preguntas lo que hubiera sido capaz de crear este hombre extraordinario en un pa¨ªs y una ¨¦poca que respetaran y valoraran el arte.