Los conspiradores de Michael Snow
Una muestra retrospectiva y la presentaci¨®n de uno de sus ¨²ltimos trabajos en Barcelona ponen el foco en el artista canadiense, gran pionero del videoarte
Al igual que Dan Graham (1942) y Bruce Nauman (1941), Michael Snow (Toronto, 1928) pertenece a una generaci¨®n de artistas norteamericanos para quienes el v¨ªdeo y el cine deben ser tratados como el lenguaje. Siguiendo la filosof¨ªa de Witt?genstein ¡ªde que el sonido de la lengua (la m¨²sica) y su expresi¨®n (la imagen) son un juego¡ª, el v¨ªdeo es entendido como una pr¨¢ctica cotidiana que refleja las diferentes formas de vida y se legitima por ellas, incluso si el artista o el espectador no se identifican en concreto con una u otra. La imagen en movimiento pasa a ser una extensi¨®n de otras formas art¨ªsticas, como la pintura o la escultura, de manera que el artista puede per-formar actividades en su estudio delante de la c¨¢mara ¡ªcaminar, estar sentado, untarse de pintura¡ª como si fuera una escultura viviente o como si se tratara de las notas musicales seriadas de Terry Riley o Steve Reich. Este es el contexto para entender la retrospectiva de Michael Snow en la Virreina, a la que se suma el filme Video Fields presentado en la galer¨ªa ?ngels Barcelona ¡ªcoincidencia poco elegante y muy habitual en un pa¨ªs que ha decidido que la cultura ha de ser rentable, al menos para unos pocos¡ª.
Michael Snow ha declarado que nunca ha sido un profesional, sino un outsider: "Mis pinturas son realizadas por un cineasta o por un escultor; la escultura, por un m¨²sico o un cineasta; las pel¨ªculas, por un pintor o un m¨²sico; la m¨²sica, por un cineasta¡ A veces todo funciona junto".
Como pionero de la videotecnolog¨ªa, Snow aprovecha sus obras para desestabilizar la perspectiva del observador
La muestra es un gran c¨ªrculo conc¨¦ntrico de un jugador muy serio ¡ªrecuerden ?el lenguaje!¡ª en el sentido m¨¢s mallarmeano: para ¨¦l, la percepci¨®n y la participaci¨®n son elementos seminales del trabajo. Como pionero de la videotecnolog¨ªa, Snow aprovecha sus obras para desestabilizar la perspectiva del observador, de manera que ¨¦ste se siente incapaz de saber d¨®nde est¨¢n los l¨ªmites reales de las paredes de las salas. Wavelength, Right Reader y Two Sides to Every Story, filmadas en los sesenta y setenta, son algunos ejemplos en los que el p¨²blico siente que es un elemento m¨¢s de la obra, un co-conspirador.
Y como no pod¨ªa ser de otra forma, Duchamp el dada¨ªsta, el primer gran contempor¨¢neo que experiment¨® con la percepci¨®n (Anemic Cinema, 1926), es el gran inspirador. La pel¨ªcula Video Fields (2015) en la galer¨ªa ?ngels mantiene el mismo esp¨ªritu de ¡°escondite¡± y le sirve a Snow para demostrar que Barnett Newman ten¨ªa raz¨®n: ¡°Para un artista, la est¨¦tica viene a ser lo que la ornitolog¨ªa para un p¨¢jaro¡±.
Secuencias. Michael Snow. La Virreina Centre de la Imatge. Barcelona. Hasta el 1 de noviembre. Video Fields. Galer¨ªa ?ngels Barcelona. Hasta el 11 de septiembre.
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