¡°En M¨¦xico, los estados de cuenta sirven para equilibrar la mesa¡±

Sof¨ªa Mac¨ªas vuelve a sacar a ese peque?o cerdo capitalista que lleva dentro. Ha publicado otra secuela de aquel fen¨®meno literario que desde hace cuatro a?os acumula cientos de miles de lectores. Como cada a?o por estas fechas presenta la agenda. Algo as¨ª como ¡°el libro de ejercicios¡± de su best seller.

Peque?o cerdo capitalista (Aguilar, 2011),un manual simp¨¢tico que ayuda al lector a ahorrar, ha vendido m¨¢s de 170.000 ejemplares, ya tiene su particular segunda parte sobre inversiones y desde 2012 se ha creado una agenda en torno a ¨¦l. ¡°Es como llevarme a m¨ª en el bolsillo para que les rega?e todas las semanas¡±, ha se?alado acerca de la edici¨®n 2016, que presentar¨¢ este jueves en la Feria del Libro de Guadalajara.

¡°Entre mis lectores hab¨ªa una banda de desbalagados que me dec¨ªan que todo iba bien hasta que se les atraves¨® una venta nocturna o vino el buen fin. Le dec¨ªa a una amiga que me encantar¨ªa estar junto a ellos y poderlos pellizcar o darles un manazo para que no se salgan del huacal¡±, se?ala.

Ante la imposibilidad de golpear a quienes desobedec¨ªan sus ense?anzas, Mac¨ªas decidi¨® crear esta agenda para enderezar as¨ª el comportamiento de sus lectores m¨¢s incorregibles. En ella advierte de los peligros que conlleva no depositar tu aguinaldo en un plan de ahorro, ayuda a planificar los gastos al comienzo de la quincena y aporta ideas sobre c¨®mo hacer para que el dinero no se esfume en un abrir y cerrar de ojos.

Pero su libro batalla en territorio hostil. Las cifras advierten que a los mexicanos les cuesta ahorrar. Solo el 34% guarda una parte de sus ingresos para utilizarlos en un futuro, seg¨²n datos oficiales. Y el cr¨¦dito al consumo se ha convertido -seg¨²n la autora- en la gran pesadilla para quienes viven en este pa¨ªs.

¡°Nos cuesta decir no y eso en finanzas tiene un coste. En M¨¦xico, los estados de cuenta solo sirven para equilibrar las patas de la mesa, nadie los abre. La gente dice que paga una millonada de intereses por un cr¨¦dito pero al contratarlo nunca se preocuparon de saber cu¨¢l es¡±, destaca.

El gran secreto para conseguir llevar unas finanzas en orden lo desvela Mac¨ªas en su obra. Una estrategia que le permiti¨® transformar a la joven despreocupada por su estado de cuenta que era, en una gur¨² de las finanzas personales.

A pesar de ser un ejemplo a seguir en temas de ahorro, esta periodista hecha escritora confiesa que no le ¡°queman las llamas de la pasi¨®n por tener un estado de cuenta ordenado¡±. Y es que la autora siempre ha tenido claro que el dinero no es un fin en s¨ª mismo, sino un medio para alcanzar otros objetivos. ¡°Por m¨¢s posdoctorados en finanzas personales que tengas, si no tienes una meta, como irte de viaje o comprar un coche, no vas a poner tu cuenta en orden¡±, defiende.

Comenz¨® a preocuparse por su cuenta de ahorros cuando quiso estudiar un m¨¢ster y el dinero se torn¨® su principal obst¨¢culo. A partir de ah¨ª, sus finanzas empezaron a adquirir orden. Su estricto plan de ahorro dejaba at¨®nitos a su amigos. Quedaban incr¨¦dulos ante el descubrimiento de esta nueva faceta de Mac¨ªas.

¡°Da la sensaci¨®n de que si soy una persona desinteresada, linda y con valores, no me puedo fijar en el dinero. El mexicano tiene una relaci¨®n de amor odio y demasiados prejuicios en torno a ¨¦l. Todos quieren ser millonarios; pero al mismo tiempo creen que quien obtiene riqueza se debe a la suerte o la ilegalidad¡±.

Su best seller, que lleva por subt¨ªtulo Finanzas personales para hippies, yuppies y bohemios, consigui¨® romper barreras. Las mismas que super¨® Mac¨ªas cuando confes¨® a una de sus amigas que ten¨ªa parte de sus ahorros en un fondo de inversi¨®n. ¡°Eres una peque?a cerda capitalista¡±, le espet¨®. Lo que no sab¨ªa es que aquel juicio acabar¨ªa transform¨¢ndose en un hito. Un fen¨®meno literario que dura ya casi un lustro.