Elena Asins y lo conceptual

Despu¨¦s de recorrer un largo periplo por Par¨ªs, Stuttgart y Nueva York, donde pas¨® largos a?os aprendiendo y trabajando, la artista Elena Asins se refugi¨®, casi aislada, en un caser¨ªo en Azpirotz (Navarra) donde falleci¨® la tarde del pasado lunes a la edad de 75 a?os.

Comenz¨® su carrera en Madrid, ciudad en la que naci¨® en 1940, participando con unas obras geom¨¦tricas muy radicales en la importante exposici¨®n Arte objetivo (1967), con la que se dio a conocer la abstracci¨®n de ra¨ªz constructiva y geom¨¦trica en Espa?a. En 1969, particip¨® activamente en el Seminario de An¨¢lisis y Generaci¨®n Autom¨¢tica de Formas Pl¨¢sticas, del Centro de C¨¢lculo de la Universidad de Madrid. Desde los a?os sesenta se decant¨® decididamente por el arte concreto, prestando un particular inter¨¦s por la l¨®gica formal y la geometr¨ªa. En 1979, revalid¨® su radicalismo con una exposici¨®n individual en la Biblioteca Nacional de Madrid, donde mostr¨® obras que segu¨ªan pautas musicales, delineadas con sutiles trazos negros sobre inmensas superficies de papel blanco.

Aquellas obras, que a¨²n permanecen en el recuerdo de los que tuvimos ocasi¨®n de verlas, fueron el comienzo de una intensa carrera que culmin¨® con dos grandes premios, la Medalla de Oro al M¨¦rito en las Bellas Artes (2006) y el Premio Nacional de Artes Pl¨¢sticas (2011), y una monumental exposici¨®n antol¨®gica en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sof¨ªa (2011).

Desde los or¨ªgenes, influida por la figura de Jorge Oteiza, realiz¨® una pintura extremada que huye de los enga?os de la figuraci¨®n, del gestualismo y del cromatismo, desterrando lo superfluo, apoy¨¢ndose en la l¨®gica formal y en el ¨¢lgebra, para situarse en los bordes de la poes¨ªa y la m¨²sica. Sus obras suelen ser estructuras de apariencia simple que luchan con la simetr¨ªa y persiguen las leyes de una armon¨ªa fugitiva.

Interesada por la aplicaci¨®n de los ordenadores a la creaci¨®n art¨ªstica, su obra se apart¨® de las pr¨¢cticas convencionales de la pintura, afianz¨¢ndose en lo concreto, que para ella estaba unido a la l¨®gica formal (Wittgenstein) y a la combinatoria de las matem¨¢ticas como generadoras de otra realidad constituida por l¨ªneas y superficies despojadas de cualquier simbolismo.

En su obra se sirvi¨® de un lenguaje esquem¨¢tico y utiliz¨® reducidos elementos que desarroll¨® a trav¨¦s de estructuras repetitivas. La geometr¨ªa de Elena Asins sobrepasa sus propias reglas generativas para ofrecer una visi¨®n que es a la vez cosmog¨®nica y profundamente personal.

En los ¨²ltimos a?os de la d¨¦cada de los sesenta realiz¨® tambi¨¦n varios poemas concretos utilizando la tradicional m¨¢quina de escribir, que desgraciadamente han desaparecido. El ¨²nico que se ha salvado es Cantos de Orfeo, compuesto a finales de esa d¨¦cada y editado recientemente.

Abierta polemista

Aunque su trabajo se inici¨® dentro de las pr¨¢cticas de la pintura, su obra se ha manifestado de muy diferentes maneras: como esculturas (los Canons 22 del malec¨®n de Zarautz), como dibujos, como poemas visuales, como infograf¨ªas animadas y, muy particularmente, como piezas inmateriales, lo que confirma el car¨¢cter conceptual de su trabajo que ha sido pionero del g¨¦nero desde finales de los a?os sesenta, siendo hoy considerada como una de las representantes m¨¢s genuinas del conceptualismo espa?ol.

Su pensamiento, anal¨ªtico y riguroso, le condujo a realizar obras de serena elegancia pero de tensi¨®n sostenida, lo que se traduce, a veces, en una cierta inquietud. Abierta polemista, no eludi¨® ofrecer explicaciones sobre su trabajo, ejerciendo como conferenciante y ensayista. Su taller de creaci¨®n de arte actual, impartido en el C¨ªrculo de Bellas Artes de Madrid, estuvo dedicado a generar formas pl¨¢sticas con ordenadores y fue tambi¨¦n pionero en su g¨¦nero. Sus ¨²ltimos trabajos se desarrollaron en el campo de las infograf¨ªas animadas, mostrando secuencias de l¨ªneas y formas geom¨¦tricas que se desarrollan serenamente ante los ojos del espectador.

Tras una tit¨¢nica entrega al trabajo, con continuas renuncias cotidianas, su cuerpo agotado se ha ido consumiendo por el esfuerzo hasta que su vida se ha apagado definitivamente. Su obra, de una sostenida contundencia, permanecer¨¢ entre nosotros.

Javier Maderuelo es cr¨ªtico de arte.