Muere el iconoclasta Carles Flavi¨¤
Actor, manager, empresario y exsacerdote fallece en Barcelona a los 70 a?os
![Carles Flavi¨¤.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/PIEY5DEXEUE6ZCCYDR3O4MMO6Q.jpg?auth=19473cda2ecb84252a7e86f34dc0451332bbb3e7154f22cb48b656c8b8a8fdcc&width=414)
Carles Flavi¨¤ ha muerto de la misma manera que vivi¨®. Rodeado de amigos y devorando la vida hasta el ¨²ltimo suspiro. Y no es una met¨¢fora.
No dej¨® que le sedaran cuando la situaci¨®n, a la que le hab¨ªa llevado el c¨¢ncer que padec¨ªa, era irreversible, para poder estar consciente hasta el ¨²ltimo segundo. Y para despedirse de sus amigos que permanentemente acud¨ªan a su habitaci¨®n el Hospital Valle de Hebr¨®n de Barcelona, ciudad en la que naci¨® en 1945 y en la que ha ejercido numerosos oficios hasta que en 1997 se dedic¨® a la interpretaci¨®n.
Sus ¨²ltimas horas las pas¨® junto a su inseparable Lucila Aguilera, su gran amor y otrora, esposa de Pepe Rubianes, y sus m¨¢s entra?ables amigos. All¨ª estaban, entre otros, Joan Manuel Serrat, Jaume Sisa, Rafaell Moll, Joan Llu¨ªs Bozzo, Anna Rosa Cisquella, Pep Molina, Yuta Tiffon.... La mayor¨ªa de ellos, al igual que Flavi¨¤, no solo eran conocidos por sus respectivos y populares oficios, sino tambi¨¦n por su condici¨®n de viudas de Rubianes, actor al que guardaban luto y manten¨ªan fresco su recuerdo en puntuales cenas. En ellas tampoco faltaba el padre Manel Pousa, el ¨²nico que contin¨²a siendo cura, de todo el grupo de amigos que se ordenaron sacerdotes, junto con Flavi¨¤, en los a?os setenta. Y el ¨²nico que consegu¨ªa, no solo por ser ¨ªntimos amigos, que Flavi¨¤ mantuviera la ¨²nica suerte de afiliaci¨®n a la que perteneci¨®: siempre participaba en la recaudaci¨®n anual de fondos que se realiza a favor de la asociaci¨®n que preside el padre Manel y con la que colaboran importantes artistas.
Flavi¨¤ siendo sacerdote oficiaba en Santa Coloma de Gramanet, donde ayudaba a j¨®venes reci¨¦n salidos de la c¨¢rcel a encontrar trabajo y oficio. Pero como sufr¨ªa noctambulismo, que padeci¨® hasta hace un par de semanas, tambi¨¦n formaba parte del selecto grupo que todas las noches cerraba el Zeleste situado en la calle Plater¨ªa, la misma que dio nombre a la orquesta que naci¨® en aquel local. Aquellos a?os empez¨® a ejercer de road manager de una empresa llamada Cabra y en 1982 abandon¨® el sacerdocio. En m¨¢s de una ocasi¨®n cont¨® el porqu¨¦: ¡°Profundic¨¦ en mi fe y la perd¨ª; cambi¨¦ a dios por el mundo; dej¨¦ de creer en dios tal y como me lo explicaron¡±. Mucho antes ya dejaba claro cu¨¢l era su aut¨¦ntica vocaci¨®n: ¡°Pas¨¢rmelo bien y re¨ªr mucho¡±. Y as¨ª lo hizo.
Primero desde una curiosa vida laboral que le llev¨® a ser manager personal de Gato P¨¦rez, la Orquesta Plater¨ªa y Pepe Rubianes, adem¨¢s de empresario de salas y bares nocturnos como el Baticano y Nitsa. Pero un d¨ªa que estaba enzarzado en una de esas eternas diatribas que se marcaba con Rubianes, uno de sus amigos del alma, (escribi¨® en 1996 Rubianes, payaso -conversaciones a platea vac¨ªa) le espet¨® al actor galaico-catal¨¢n, que lo que ¨¦l hac¨ªa sobre un escenario era una chorrada que no ten¨ªa ning¨²n m¨¦rito y, por si fuera poco, a?adi¨® que eso lo pod¨ªa hacer cualquiera. Rubianes desternillado le provoc¨® y le inst¨® a demostrarlo. Y Flavi¨¤ debut¨® en 1997 en la m¨ªtica Bodega Bohemia con un mon¨®logo, Ep¨ªstolas de Carles Flavi¨¤, en el que contaba su vida desde una mirada c¨ªnica, sarc¨¢stica hasta la mordacidad, ir¨®nica y profundamente inteligente. As¨ª naci¨® el actor que llevaba dentro y que solo hab¨ªa podido lucir desde el pulpito y, en menos medida, en bodas, comuniones y entierros. Estos ¨²ltimos eran los que m¨¢s le gustaban: ¡°Todos te escuchan calladitos y, si adem¨¢s haces mala cara, te lo agradecen¡±.
Este lunes se celebrar¨¢ el suyo, del que en alguna ocasi¨®n lleg¨® a hablar: ¡°No pedir¨¦ un cura en el ¨²ltimo momento, no espero encontrar nada en la otra vida¡±.
A pesar de confesar que entre sus enfermedades estaba el no poder madrugar y la alergia al trabajo, trabaj¨® mucho en estos ¨²ltimos 20 a?os: Sus mon¨®logos M¨¢s ep¨ªstolas de ¡, Prensamiento (con direcci¨®n espiritual de Joan Llu¨ªs Bozzo), El estado del malestar, El evangelio seg¨²n Flavi¨¤, 10/9/45, bajo la direcci¨®n de Carol L¨®pez, (con ella y Rubianes escribi¨® Metiendo ca?a). En todos ellos asomaba ese Flavi¨¤ deslenguado, procaz, provocador, desvergonzado y todo lo pol¨ªticamente incorrecto que pudiera. Y pod¨ªa mucho. Era una especie de ¨¢lter ego que se situaba frente al verdadero yo de Flavi¨¤, al que acced¨ªan unos pocos y con el que ocultar su infinita bondad, su solidaridad, su inquebrantable amistad con los suyos, y su debilidad por los d¨¦biles, su fragilidad con los fr¨¢giles y su mala leche con los poderosos.
Tambi¨¦n trabaj¨® acompa?ado en el escenario. En 5hombres.com; en alg¨²n que otro montaje arrevistado; en Pis mostra (Piso de muestra), de Max Marieges, y precisamente con Sisa y bajo la direcci¨®n de Pau Mir¨® en Com quedem? (?C¨®mo quedamos?) tambi¨¦n titulado Tan b¨¦ que an¨¤vem (Con lo bien qu¨¦ ¨ªbamos) en el que a pesar de limitarse a reproducir, con acierto y humor, cualquiera de las conversaciones que ambos artistas ven¨ªan manteniendo hace casi cuarenta a?os, aquello estaba lleno de teatro y del bueno. Su ¨²ltimo espect¨¢culo fue El estado del malestar 2 acompa?ado por la pianista B¨¢rbara Granados.
En cine particip¨® en pel¨ªculas de Ventura Pons, Francesc Bellmunt, Llorens Soler, Joel Joan y Ram¨®n de Espa?a, sin olvidar su paso por diferentes series televisivas como en el Ministerio del tiempo, donde realiz¨® su ¨²ltimo trabajo, hace escasas semanas.
Su reconocimiento como actor, a cuyo crecimiento colabor¨® un p¨²blico fiel que termina consagr¨¢ndole como un artista de culto, va unido a su ¨¦xito en BTV, donde su programa Qual sevol nit pots sortir el sol (toma el t¨ªtulo de la canci¨®n de su casi hermano Jaume Sisa) se convierte en un cl¨¢sico de la televisi¨®n local barcelonesa. En el mismo canal termina haciendo entrevistas l¨²cidas y merecedoras de elogios que le descubren como un sobresaliente periodista. Su paso por televisi¨®n fue por diferentes cadenas junto a Javier Sard¨¢, en el Club de la Comedia, con ?ngel Casas, Silvia Tarragona, Albert Om¡ Especialemente fruct¨ªfera fue su colaboraci¨®n radiof¨®nica con Manuel Fuentes, con quien le une una estrecha amistad y quien ha caminado de la mano junto a Flavi¨¤ en todo el v¨ªa crucis de su c¨¢ncer detectado hace algo menos de un a?o.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.