Insulsa tarde de Morante en el adi¨®s de Zotoluco en Aguascalientes

El maestro mexicano Eulalio L¨®pez Zotoluco dio una lecci¨®n de lo que es el toreo cl¨¢sico, con buen gusto y templanza, y cort¨® una oreja en su emotiva despedida en la Plaza Monumental de esta feria de San Marcos en Aguascalientes, en tanto que Morante de la Puebla se llev¨® otro trofeo en un novillo de regalo, y Diego Silveti se fue en vac¨ªo.

Con una entrada de dos tercios del aforo, se lidiaron siete toros de Te¨®filo G¨®mez, que fueron f¨¢ciles, aunque algunos carentes de trasmisi¨®n. Unos se dejaron m¨¢s que otros, pero s¨®lo Zotoluco los entendi¨®, les dio su distancia y su sitio.

Zotoluco, con el primero, lo dej¨® a su aire y con maestr¨ªa lo meti¨® a la muleta, realiz¨¢ndole la faena de la tarde, que reuni¨® una serie de virtudes que son pocas veces entendidas por los aficionados. Mat¨® de un pinchazo y estocada baja. Con el cuarto, con menos clase y ritmo, repiti¨® la dosis con otra labor de torero. Una labor salpicada de toreo bueno. Concluy¨® de pinchazo y estocada, cort¨® una oreja y dio la vuelta al ruedo entre el cari?o de la gente, que se entreg¨® a esa entendida labor.

Morante, con el segundo que ten¨ªa poca fuerza, anduvo sin entrega, mat¨® mal, y su labor fue silenciada. Con el quinto, que no era toro para su estilo, termin¨® por aburrir. Mal con la espada, para aviso y abucheos. Regal¨® un s¨¦ptimo, un novillote, al que le hizo una larga faena, nada limpia y con momentos de esos que tiene este torero que a la gente le agrada y le aplaude todo. Pinchazo y estocada para una oreja, solicitada con m¨¢s cari?o que merecimientos, y vuelta al ruedo.

Silveti, recibi¨® al tercero en los medios de rodillas y sufri¨® un fuerte golpe en el tobillo derecho. Sigui¨® en el ruedo y entre altas y bajas, mat¨® regular y silencio. Con el sexto, tuvo momentos que se le festejaron sin mucha fuerza y mat¨® de dos intentos para recibir palmitas.

Miguel Abell¨¢n, a hombros en Riobamba

El diestro madrile?o Miguel Abell¨¢n sali¨® a hombros por la puerta grande de la plaza de la ciudad andina de Riobamba, en Ecuador, en la tercera tarde de la feria Se?or del Buen Suceso.

Abell¨¢n altern¨® en una corrida goyesca con su compatriota Francisco Rivera Ord¨®?ez y los ecuatorianos Diego Gaibor El Carmelo y el rejoneador Sebasti¨¢n Pe?aherrera.

En la plaza Ra¨²l D¨¢valos, de Riobamba, que tuvo solo un cuarto de entrada, se lidiaron toros de las dehesas de Triana, El Pinar, Campo Bravo y Ortu?o, con mejor juego y bravura que los lidiados la segunda tarde de feria.

Rivera Ord¨®?ez no pudo lucirse con el primero de su lote, un toro manso de El Pinar con 450 kilos. Fall¨® en el estoque, y fue aplaudido. En su segundo, un burel de Triana de 444 kilos, hizo una faena mejor con el capote, con varias ver¨®nicas con la rodilla en tierra y de pie. Destac¨® con la muleta con varios naturales, y luego no pudo completar su labor cuando el toro empez¨® a recortar el viaje. Aplausos al torero, que salud¨® desde el tercio, y pitos al toro.

Abell¨¢n se mostr¨® entregado con su lote. Al primero, un colorado de El Pinar de 446 kilos, lo recibi¨® con una larga cambiada y varias ver¨®nicas. En la muleta decidi¨® torearlo con pases por la espalda, varios muletazos a media altura y una serie de naturales que demostraron elegancia. Oreja.

A su segundo toro, un corniabierto de 464 kilos de Triana, no logr¨® torearlo con el capote, pero en la muleta ejerci¨® su dominio y muy empleado durante toda su faena con varias tandas de naturales y pases por derecha. Descabello, oreja.

El torero riobambe?o El Carmelo se puso al frente de un toro manso de Triana de 422 kilos, que rehuy¨® al picador y fue condenado a banderillas negras. No logr¨® hacer una faena con el capote, pero el astado acudi¨® con ritmo al trapo. Tras una estocada desprendida fue aplaudido.

Su segundo, de Campo Bravo, fue el mejor de toda la corrida por su bravura y formas, pero no logr¨® sacarle provecho. El toro fue premiado con la vuelta al ruedo y la bor del torero fuer silenciada.

El rejoneador Sebasti¨¢n Pe?aherrera lidi¨® un novillo de Ortu?o, un burel bravo y bien presentado, al que le cort¨® una oreja.

Abell¨¢n, Enrique Ponce, Alberto L¨®pez Sim¨®n y Rivera Ord¨®?ez donaron sus muletas y otros complementos para que fueran rifados, a fin de apoyar a los damnificados por el terremoto que asol¨® hace unos d¨ªas otra zona del pa¨ªs.